Qué difícil está siendo para todos, y principalmente para el Gobierno Federal, tratar de entender lo que México está viviendo, en donde la "nueva" realidad que envuelve la vida familiar contiene una clara combinación de factores como la inseguridad, el desempleo, la Covid 19, la incertidumbre sobre el futuro de nuestras fuentes de ingreso, etc.; ante ello, es normal y entendible que la gente se exprese en diferentes tonos, o que liderazgos empresariales, académicos, políticos y de medios de comunicación disientan de lo que está haciendo la federación, pues -sin duda- se percibe que se están desmoronando la confianza de que vamos en el camino correcto.
Es por ello que en Acción Nacional haciendo eco del sentir de la ciudadanía y de los diferentes liderazgos sociales y productivos, seguimos trabajando para que México tenga una nueva mayoría en el 2021 que permita reconducir lo que hoy se han hecho mal y para evitar -con ello- la destrucción del bien común que antes teníamos; es decir, estamos también ejerciendo nuestro derecho a disentir del Gobierno Central para construir coincidencias con los sectores sociales y productivos y con ellos… ¡Salvar a México!
Y precisamente es en este contexto, que los gobernadores de Acción Nacional y de otras fuerzas políticas, -a pesar del mal trato institucional que les ha brindado la Presidencia de la República- tienen muy claro qué por el bien de México, han venido poniendo en la mesa diversos temas para recomponer el rumbo; de esos temas hoy compartiré con ustedes los siguientes:
Acordar un nuevo Pacto Fiscal, en donde se ajuste Ley de Coordinación Fiscal que data de 1953, para lograr una coherencia entre los ingresos que generan los estados a la federación y los ingresos que reciben de ella; Desistir de los proyectos Dos Bocas, Tren Maya, Aeropuerto de Santa Lucía y Sembrando Vida, pues han sido un fracaso en su costo - beneficio, y reorientar esos fondos hacia la generación de empleo y de obra pública en los municipios; Dejar de atentar contra la generación de energía limpia por su beneficio económico para la gente y por sus bondades para el medio ambiente y castigar fiscalmente a las empresas contaminantes.
Recomponer las relaciones con el sector empresarial que han provocado que en este sexenio la economía nada más NO crece; que para el 2020 la contracción será entre 3.9% según la SHCP y 10.5% según JP Morgan Chase; que Citibanamex calcule que la desocupación alcanzaría 7%; que CONEVAL estime que la pandemia hará que entre 8.9 y 9.8 millones de personas más no tendrán los recursos suficientes para adquirir una canasta básica; cabe señalar que en este tema hasta hay voces afines al Gobierno Federal en el Senado que apoyan esta urgencia de carácter productivo.
Redefinir el INSABI, pues fue implementado sin diagnóstico y estrategia, por lo que con la pandemia por la Covid 19 -mal manejada- ha provocado incertidumbre social, malestar en el personal de salud por la evidente carencia de equipamiento y medicinas, miles de muertes, y una pésima atención a las familias; y Resultados en materia de seguridad, pues tan solo con datos de la SSPyPC se dieron 11, 535 homicidios en los primeros 4 meses de este año, es decir aumentaron 2.4%, con respecto al 2019, estamos viviendo niveles record de inseguridad en la historia de nuestro País.
En suma… disentir es sano y democrático, no debe enojarnos o ser autoritarios; disentir nos debe fortalecer como sociedad para crear circunstancias para un mejor futuro para tod@s, y si eso implica la alternancia en el poder, ¡aceptémoslo!... por lo que -aprovechando la ocasión- los invito a que como padres de familia, hagamos equipo con nuestra familia para que con un voto útil en el 2021, regresemos a Tlaxcala y a México al camino de la libertad y del progreso que hoy, están perdiendo.
*Presidente del Comité Directivo Estatal del PAN en Tlaxcala
