El fraude electoral de 1988 fue "la gota que derramo el vaso" del histórico hartazgo político y social que l@s mexican@s traíamos, ante elecciones amañadas a conveniencia del poder federal; fue entonces que un 11 de octubre de 1990, a partir de la expedición de un nuevo ordenamiento electoral, surge un órgano independiente y especializado en elecciones, que aunque se ha venido ciudadanizando y especializando -para darnos imparcialidad transparencia y legalidad en las transiciones gubernamentales-, debemos proteger, cuidar y mejorar, pues la democracia es un proceso inacabado al que siempre le debemos apostar.
Luego entonces, creemos que a sus 30 años de edad, este órgano especializado en elecciones, hoy llamado Instituto Nacional Electoral, tiene grandes retos:
Uno: Defenderse como una institución que le ha costado mucho a México, luchar de la mano de la ciudadanía y por su puesto de las fuerzas políticas de oposición, contra los evidentes intentos de regresar al pasado, del interés de unos cuantos por aspirar a ser los grandes "vigilantes" de los comicios, que pretenden ahogarlo financieramente, y trabajan para influir en la voluntad ciudadana mediante una tendenciosa consulta popular.
Dos: Aplicar la Ley sin distinciones y sin temores, pues recordemos que las y los mexicanos esperamos "pacientemente" respuesta a nuestr@s Diputad@s Federales panistas quienes interpusieron una queja derivada de la difusión del documento "Rescatemos a México", que revela la existencia de un Bloque Opositor Amplio, en donde se violaron los principios de imparcialidad y lineamientos sobre la propaganda gubernamental establecidos en el artículo 134 constitucional.
Tampoco hay respuesta a la denuncia del PAN por la entrega de dinero para el partido Morena, que fue exhibida en un video por todos conocido en donde aparecen personajes cercanos al poder federal.
Tampoco hay respuesta a la denuncia del PAN sobre el presunto uso de espacios y recursos públicos para promover la imagen de Morena con fines políticos y electorales, en el marco de las fiestas patrias.
Tres: Garantizar elecciones imparciales para el proceso electoral que inició el pasado 7 de septiembre y en donde casi 95 millones de mexican@s estarán siendo llamados a votar en medio de la incertidumbre, por el impacto de la pandemia en la operatividad del proceso.
Por todo lo antes expuesto, en el PAN estamos satisfechos con el desarrollo institucional que el INE ha logrado a favor de la democracia del País; estamos convencidos de que debemos unirnos con más fuerza en su defensa y consolidación; tenemos la confianza de que sabrá responder a la expectativa ciudadana en el ejercicio de sus funciones y en la aplicación del derecho; y hacemos votos porque sepa vigilar y sancionar a tiempo cualquier intromisión de los servidores públicos federales y estatales, en particular aquellos que tienen a su cargo el manejo de recursos y programas sociales.
- *Presidente del Comité Directivo Estatal del PAN en Tlaxcala
