/ miércoles 29 de abril de 2020

¡A favor de Tlaxcala! | ¿Tenemos un liderazgo para reactivar el país?

En medio de la obligada decisión -que todos los días toman las familias- entre salir o quedarse en casa, es necesario reconocer que como sociedad estamos preocupados, temerosos, y con una fuerte incertidumbre sobre nuestro futuro económico, pues simplemente no alcanzamos a ver o a percibir la capacidad de respuesta del Gobierno Federal para sacar al País de la incertidumbre económica, que impulse hacia el optimismo a los sectores productivos o que nos genere la confianza de que lo peor está pasando.

Dicho de otra manera… el desastre en el que se ha convertido la economía a partir del mes de julio de 2018, que está dejando día con día sin empleo a muchas personas; la evidente debilidad institucional y operativa del sistema de salud que está cambiando la vida de miles de familias; el discurso de odio entre l@s mexican@s que está distanciando familias, sectores productivos y liderazgos sociales; el hostigamiento y censura que -desde lo más alto del poder político- se impulsa hacia los medios de comunicación que tienen "otros datos" como forma de atentar contra la libre expresión; la cerrazón política de la federación para escuchar opiniones de los sectores lastimados; el hecho de que el 2020 se enfile a ser el año más violento de la historia, etc., irremediablemente nos hace pensar que es alto el riesgo de vivir una crisis social y política en el futuro inmediato de México. Es decir, en lo social percibimos que la debilidad económica que el País tendrá cuando empecemos a regresar a la "normalidad", el despilfarro de recursos públicos en obras no prioritarias y el mal trato institucional otorgado a los creadores de empleo, etc., serán el freno que impedirán que la ciudadanía encuentre rápidamente un nuevo camino para el sustento diario de sus familias; serán motivo de desesperación de la gente, incrementará las críticas hacia el Gobierno Federal y lo peor, podría derivar en estallidos sociales que alteren la escasa gobernabilidad que tenemos. ¿Hasta cuándo la Presidencia de la República entenderá que la única ruta para evitar problemas sociales y disminuir la pobreza es el crecimiento productivo?

En lo político, también hay ingredientes que nos hablan de que nos dirigimos hacia una crisis… pues las diferencias entre gobernadores y la Presidencia de la República crecen, las relaciones de los partidos políticos de oposición con el Gobierno Federal y con el partido político en el poder son cada día más tensas; el abuso de las mayorías legislativas en el Congreso de la Unión siguen cerrando las puertas a la construcción de acuerdos; la negatividad para "dejarse ayudar" mediante un Acuerdo Nacional polariza aún más al País; privilegiar el gasto social sin criterios sostenibles a largo plazo y a costa de los generadores de empleo derivará en rompimientos políticos entre el sector empresarial y el Gobierno, etc.

Luego entonces, las tareas para enfrentar las secuelas del Covid-19 y para reactivar al País, requieren de un liderazgo serio no ocurrente, requieren de un Gobierno de Coalición y de la unidad de los mexican@s, requieren de un gabinete federal con mejores conocimientos técnicos y políticos, requieren de un proyecto o modelo económico - político claro y viable, requieren engranar una maquinaria entre los empresarios, los trabajadores y la sociedad; requieren de un emprendedurismo motivado; requieren de un federalismo cada vez más fuerte; requieren dejar de simular acciones contra la impunidad y la corrupción… requieren de decisiones técnicas, sin sueños de economía moral; … requieren de un liderazgo que hoy NO tiene México…

  • *Presidente del Comité Directivo Estatal del PAN en Tlaxcala

En medio de la obligada decisión -que todos los días toman las familias- entre salir o quedarse en casa, es necesario reconocer que como sociedad estamos preocupados, temerosos, y con una fuerte incertidumbre sobre nuestro futuro económico, pues simplemente no alcanzamos a ver o a percibir la capacidad de respuesta del Gobierno Federal para sacar al País de la incertidumbre económica, que impulse hacia el optimismo a los sectores productivos o que nos genere la confianza de que lo peor está pasando.

Dicho de otra manera… el desastre en el que se ha convertido la economía a partir del mes de julio de 2018, que está dejando día con día sin empleo a muchas personas; la evidente debilidad institucional y operativa del sistema de salud que está cambiando la vida de miles de familias; el discurso de odio entre l@s mexican@s que está distanciando familias, sectores productivos y liderazgos sociales; el hostigamiento y censura que -desde lo más alto del poder político- se impulsa hacia los medios de comunicación que tienen "otros datos" como forma de atentar contra la libre expresión; la cerrazón política de la federación para escuchar opiniones de los sectores lastimados; el hecho de que el 2020 se enfile a ser el año más violento de la historia, etc., irremediablemente nos hace pensar que es alto el riesgo de vivir una crisis social y política en el futuro inmediato de México. Es decir, en lo social percibimos que la debilidad económica que el País tendrá cuando empecemos a regresar a la "normalidad", el despilfarro de recursos públicos en obras no prioritarias y el mal trato institucional otorgado a los creadores de empleo, etc., serán el freno que impedirán que la ciudadanía encuentre rápidamente un nuevo camino para el sustento diario de sus familias; serán motivo de desesperación de la gente, incrementará las críticas hacia el Gobierno Federal y lo peor, podría derivar en estallidos sociales que alteren la escasa gobernabilidad que tenemos. ¿Hasta cuándo la Presidencia de la República entenderá que la única ruta para evitar problemas sociales y disminuir la pobreza es el crecimiento productivo?

En lo político, también hay ingredientes que nos hablan de que nos dirigimos hacia una crisis… pues las diferencias entre gobernadores y la Presidencia de la República crecen, las relaciones de los partidos políticos de oposición con el Gobierno Federal y con el partido político en el poder son cada día más tensas; el abuso de las mayorías legislativas en el Congreso de la Unión siguen cerrando las puertas a la construcción de acuerdos; la negatividad para "dejarse ayudar" mediante un Acuerdo Nacional polariza aún más al País; privilegiar el gasto social sin criterios sostenibles a largo plazo y a costa de los generadores de empleo derivará en rompimientos políticos entre el sector empresarial y el Gobierno, etc.

Luego entonces, las tareas para enfrentar las secuelas del Covid-19 y para reactivar al País, requieren de un liderazgo serio no ocurrente, requieren de un Gobierno de Coalición y de la unidad de los mexican@s, requieren de un gabinete federal con mejores conocimientos técnicos y políticos, requieren de un proyecto o modelo económico - político claro y viable, requieren engranar una maquinaria entre los empresarios, los trabajadores y la sociedad; requieren de un emprendedurismo motivado; requieren de un federalismo cada vez más fuerte; requieren dejar de simular acciones contra la impunidad y la corrupción… requieren de decisiones técnicas, sin sueños de economía moral; … requieren de un liderazgo que hoy NO tiene México…

  • *Presidente del Comité Directivo Estatal del PAN en Tlaxcala