México brinda asilo a Evo Morales Ayma, presidente de la República de Bolivia, depuesto por “golpe de Estado” consumado por los militares de ese país. Se hace notar con estadística que dicho presidente obligado a renunciar, que ejerció el mando por trece años consecutivos (elegido acorde a los lineamientos electorales de ese país), hizo crecer la economía del país rescatando los minerales valiosos como el uranio, y atenuó la miseria de los grupos indígenas bolivianos, motivo insoportado por el capitalismo explotador.
El citado “golpe de Estado” está señalado por la historia que inicia por las embajadas como en el caso de México, cuando Francisco I. Madero llega a la Presidencia de la República, entonces la Embajada de Estados Unidos acuerda con Victoriano Huerta el “golpe” a la democracia, encarcelando y luego asesinando a Serdán y Madero y … el premio que recibe Huerta por servir al capitalismo del país del Norte con arteros asesinatos es: la Presidencia de México (leer la Historia Nacional).
Lo mismo ha sucedido en otras naciones, recordemos a Guatemala en la época de Jacobo Arbenz, y otros países donde el Coloso del Norte no admite a gobiernos democráticos y menos que atiendan las necesidades del pueblo. El caso reciente del gobierno de Venezuela, donde el capitalismo nombró a un presidente para derrocar al actual (Maduro), porque éste ha defendido la riqueza natural que anhelan poseer los grupos capitalistas nacionales y extranjeros, deteniendo con el ello el progreso y bienestar popular.
Antes los imperialistas utilizaban armas para someter a los pueblos con el objeto de saquear las riquezas de las naciones sometidas. Hoy esas naciones semiliberadas de la bota militar tienen a gobernantes que obedecen órdenes a favor de intereses extranjeros, en nuestra nación lo sabemos con tanta concesión: con el agua, la tierra, las costas, fronteras, minas, petróleo, etc.
Según las declaraciones de Evo Morales al arribo a nuestra patria, una persona le dijo que le habían ofrecido cierta cantidad de dólares siempre y cuando lo entregara a los golpistas, y no es de dudarse que los tiempos han cambiado, porque desde la Segunda Guerra Mundial los países capitalistas se declararon demócratas, pero no modificaron sus estrategias para seguir dominando al mundo con las ganancias desmedidas del comercio, así que emplear las armas para derrocar a un gobierno por el capitalismo, la han cambiado por el poder del dinero, así que ahora para corromper a una sociedad democrática el medio es el dinero. Desestabilizar a un sistema democrático que se preocupa por abatir la pobreza, la falta de educación, la ausencia de fuentes de trabajo, al capitalismo no importa destruir esa construcción conciliadora e igualitaria.
Así que México y su actual gobierno federal han manifestado con la protección que hoy se le proporciona a un buen presidente extranjero, la tradición humanista que ha practicado con muchos personajes de otras naciones, por ejemplo, al grupo de españoles que protegió el gobierno de Lázaro Cárdenas, a José Martí, el héroe cubano que trató de liberar a su país, a Fidel Castro, a León Trotski, y otros personajes que por su ideología era amenazada su vida en su país de origen.
Hoy Evo, el indígena, acostumbrado como tal a sufrir por las calumnias del mundo capitalista, está entre los mexicanos, protegido también por un presiente humanista amante de la democracia, como lo es Andrés López Obrador, que ha demostrado al mundo el desafío hacia los poderosos que no está de acuerdo en someter su criterio al capitalismo.
Es indudable que las acciones del C. Evo como gobernante está considerado por las masas a las que rescató de la miseria impuesta por las empresas capitalistas, las que han sometido por medios bancarios a los dueños de las riquezas naturales.
La actitud patriótica de un gobernante como Evo es lo que no es de la aceptación de poder del dinero. Acá el Senado de la República deseaba someter a la banca (banqueros), que mantienen tasas altas a los préstamos. Debe atenuarse el poder del dinero en favor del pueblo, para que no suceda a nuestro gobierno democrático lo de Bolivia.