/ lunes 2 de noviembre de 2020

Blanco y Negro | El estadio

El gobierno del Estado ha iniciado los trabajos de construcción de las cabeceras del estadio Tlahuicole, por lo que el inmueble capitalino tendrá un aforo mayor para la participación del equipo Coyotes de Tlaxcala en la Liga de Expansión MX.

Esta nueva infraestructura viene paralela a un proyecto deportivo que coloca a Tlaxcala ante los ojos de todo México así como de Estados Unidos y Sudamérica.

Está segunda etapa vendrá a redondear una obra que colocará al estadio Tlahuicole entre los 25 más importantes del país.

El sueño de ver a un club estatal en niveles importantes en el plano profesional se ha hecho una realidad en este atropellado 2020 y el siguiente paso será en un mediano plazo llegar a la máxima categoría que dará un realce de impacto para Tlaxcala en toda la República Mexicana.

Lo más importante de este proyecto es que surge con el trabajo hecho por tlaxcaltecas y que le da identidad a su afición y al estado.

Coyotes no es ninguna improvisación y su nombre se oye en todos los rincones de México, eso es positivo ya que es un embajador importante de esta entidad, que depende mucho de sus resultados en cancha para que su impacto sea mayor.

Muy probablemente la obra de las cabeceras concluirá antes de que finalice la gestión del gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez por lo que para 2021 el estadio Tlahuicole lúcida con nueva vestimenta en su infraestructura. ¡Enhorabuena!

INCONFORMIDAD

El Premio Estatal del Deporte en la categoría de fomento, promoción o protección a la práctica de los deportes, otorgado a un empleado del Instituto del Deporte de Tlaxcala (Idet), despertó inconformidad en la comunidad deportiva, ya que consideraron que no se puede ser juez y parte, y menos en una elección importante.

Resulta que Miguel Muñoz es el psicólogo del Idet, pero paralelo a ello cumple la función de presidente de la asociación estatal de judo donde trabaja como entrenador.

La queja es que él debió participar en la categoría a mejor entrenador, ya que es su función complementaria a su trabajo administrativo de la dependencia estatal.

Ante esta situación hay que preguntar por qué el Idet permitió la candidatura de Muñoz en una categoría ajena a lo que hace y también está el cuestionamiento de por qué el jurado lo permitió y peor aún, que votó por él con ocho de 10 votos posibles.

El gobierno del Estado ha iniciado los trabajos de construcción de las cabeceras del estadio Tlahuicole, por lo que el inmueble capitalino tendrá un aforo mayor para la participación del equipo Coyotes de Tlaxcala en la Liga de Expansión MX.

Esta nueva infraestructura viene paralela a un proyecto deportivo que coloca a Tlaxcala ante los ojos de todo México así como de Estados Unidos y Sudamérica.

Está segunda etapa vendrá a redondear una obra que colocará al estadio Tlahuicole entre los 25 más importantes del país.

El sueño de ver a un club estatal en niveles importantes en el plano profesional se ha hecho una realidad en este atropellado 2020 y el siguiente paso será en un mediano plazo llegar a la máxima categoría que dará un realce de impacto para Tlaxcala en toda la República Mexicana.

Lo más importante de este proyecto es que surge con el trabajo hecho por tlaxcaltecas y que le da identidad a su afición y al estado.

Coyotes no es ninguna improvisación y su nombre se oye en todos los rincones de México, eso es positivo ya que es un embajador importante de esta entidad, que depende mucho de sus resultados en cancha para que su impacto sea mayor.

Muy probablemente la obra de las cabeceras concluirá antes de que finalice la gestión del gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez por lo que para 2021 el estadio Tlahuicole lúcida con nueva vestimenta en su infraestructura. ¡Enhorabuena!

INCONFORMIDAD

El Premio Estatal del Deporte en la categoría de fomento, promoción o protección a la práctica de los deportes, otorgado a un empleado del Instituto del Deporte de Tlaxcala (Idet), despertó inconformidad en la comunidad deportiva, ya que consideraron que no se puede ser juez y parte, y menos en una elección importante.

Resulta que Miguel Muñoz es el psicólogo del Idet, pero paralelo a ello cumple la función de presidente de la asociación estatal de judo donde trabaja como entrenador.

La queja es que él debió participar en la categoría a mejor entrenador, ya que es su función complementaria a su trabajo administrativo de la dependencia estatal.

Ante esta situación hay que preguntar por qué el Idet permitió la candidatura de Muñoz en una categoría ajena a lo que hace y también está el cuestionamiento de por qué el jurado lo permitió y peor aún, que votó por él con ocho de 10 votos posibles.