Elizabeth Piedras Martínez*
Esta semana iniciaron las campañas electorales de las y los candidatos a diputados locales del Proceso Electoral Local Ordinario 2018. Esto significa que partir de, y durante los próximos 30 días, los partidos políticos, coaliciones, candidatura común, candidatas y candidatos independientes y simpatizantes, desarrollarán una serie de actividades orientadas a promover sus candidaturas con el fin de obtener el voto del electorado.
En este momento, la ley cede la voz a la propuesta política y ordena la suspensión de la propaganda gubernamental, por lo que durante el tiempo que comprendan las campañas y hasta la conclusión de la jornada electoral, las autoridades deben observar este precepto, con el fin de evitar inequidad en la contienda y contribuir a que las y los electores decidan por quién votar con absoluta libertad. Es importante recordar que hay excepción en lo que se refiere a información de servicios educativos, de salud y de protección civil en caso de emergencia.
¿Qué pueden hacer y no hacer las candidatas y candidatos durante las campañas electorales locales? Tienen permitido realizar y participar en reuniones públicas, asambleas, mítines, marchas, visitas y debates para difundir sus propuestas entre la ciudadanía.
Además, dispersar su propaganda, que conforme a la ley electoral local, se considera la dirigida a la ciudadanía a través de escritos, publicaciones, imágenes, impresos, pinta de bardas, publicidad por internet, grabaciones sonoras o de video, graffiti, proyecciones o expresiones orales o visuales.
En este punto, es importante subrayar para la elaboración de materiales propagandísticos debe procurarse el uso de elementos biodegradables, reutilizables o reciclables; nunca emplear sustancias toxicas ni materiales que produzcan un riesgo directo para la salud de las personas o que contaminen el medio ambiente.
Estos productos podrán ser colocados en inmuebles de propiedad privada, previo permiso por escrito del propietario, en la vía pública y transporte público; en cambio, evitar colocarla, fijarla, pintarla o grabarla en elementos de equipamiento urbano, carretero o ferroviario, accidentes geográficos, ni en el entorno ecológico, así como en monumentos y edificios públicos, ni distribuirla al interior de estos edificios.
La propaganda debe respetar a las personas, a las y los candidatos, autoridades, instituciones y valores democráticos y debe servir para difundir planes y propuestas contenidas en plataformas electorales; por tanto, está prohibido difamar, calumniar o denigrar a oponentes partidos, instituciones o cualquier persona. Tampoco está permitido llamar al voto mediante imágenes, símbolos o en eventos religiosos.
De igual forma, las y los candidatos deben abstenerse de comprar, coaccionar o presionar para que las y los ciudadanos voten de determinada manera, pues esas actividades constituyen un delito electoral y pueden ser denunciados. Asimismo, no podrán realizar campaña electoral durante los tres días previos a la jornada electoral, ni durante ésta.
En cuanto a recursos económicos, no deben rebasar los topes de gastos de campaña aprobados por el Consejo General del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones, ni recibir aportaciones o donativos en dinero o especie de los poderes federales o estatales, ni de ninguna dependencia u oficina de gobierno, de organismos autónomos, partidos políticos, personas físicas o morales extranjeras, organismos internacionales, ministros de culto religioso o agrupaciones religiosas, y de personas que vivan o trabajen en el extranjero, mucho menos recibir aportaciones y donaciones en efectivo, así como metales y piedras preciosas de cualquier persona física o moral.
Por lo tanto las reglas electorales están dadas; las y los candidatos deben conducirse con pleno respeto a éstas, ser responsables en sus expresiones; evitar un clima de violencia, división y enfrentamiento y propiciar un ambiente de armonía que permita comicios en sana competencia y en un ambiente de paz y convivencia democrática.
Las y los contendientes tienen la gran resposanbilidad de construir y fortalecer la confianza del electorado, pues será la única manera en que saldrá a participar en la fiesta democrática del próximo 1 de julio.
*Consejera Presidenta del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones
