/ miércoles 22 de mayo de 2019

CARAS Y MÁSCARAS

La civilización hispánica

Cesáreo Teroba Lara

Cultura no es sinónimo de civilización. La cultura es el conjunto de creencias, costumbres, conocimientos, prácticas, normas, ritos, tecnologías, artes y maneras de ser que predominan en el común de la gente que la integra. La identidad cultural, por tanto, se puede definir como el agregado de valores, símbolos, tradiciones y modos de comportamiento que cohesiona a un grupo social, es el sustrato en el que los individuos que lo forman basan su sentimiento de pertenencia.

Civilización, en cambio, se denomina al pueblo o comunidad que dispone de una historia, una cultura definida y que, a través del tiempo, ha adquirido un desarrollo importante. Civilización es el fenómeno mediante el cual una sociedad progresa, no sólo en cuestiones materiales sino también en valores, en su visión de la vida.

Una característica de las civilizaciones es el desarrollo de un sistema cultural que influye en otras sociedades: en el idioma, la religión, la ciencia, la tecnología y las formas del poder. Una civilización puede existir por sí misma, aunque normalmente integra varias culturas. La historia de la humanidad es la historia de las civilizaciones: la china, la romana, la islámica y la occidental, hoy la más pujante, que se compone de varias subcivilizaciones nacionales y supranacionales: la anglosajona, la francesa y la rusa, como ejemplos.

Fechado en abril de 2018 apareció en las librerías de Madrid, México, Buenos Aires y Santiago, el libro titulado “La civilización hispánica. El encuentro de dos mundos”, cuyo autor es Borja Cardelús y Muñoz-Seca. La oportunidad de la aparición de esta obra es innegable: su producción y difusión sin duda se planearon con motivo del V Centenario de la presencia masiva de los españoles en América.

El autor, hombre polifacético en el mundo de la ciencia y la cultura, es licenciado en Derecho y Ciencias Económicas, ha dedicado gran parte de su actividad, en los ámbitos televisivo y editorial, a los temas relacionados con la conservación de la naturaleza, que le han valido para obtener en España el Premio Nacional de Medio Ambiente. Recientemente, sin embargo, sus afanes laborales se han orientado a la investigación y difusión de la cultura hispana, cuyos resultados se encuentran en los libros: “La huella de España en Estados Unidos”, “España en el Pacífico”, “La Florida española”, “El Camino Real de Tierra Adentro” y “El Gran Camino Inca”, entre otros.

La presentación que se hace del libro “La civilización hispánica. El encuentro de dos mundos”, resume la visión actual -desde el otro lado del Atlántico- de la interinfluencia cultural resultante del descubrimiento y la conquista de una parte del continente americano por los castellanos. Dado el interés que implica conocer el punto de vista “del otro” sobre el episodio más dramático que dio origen a la nación mexicana, se transcribe dicha presentación:

“España acudió a América no para formar un imperio, sino para construir una nueva civilización, integrándose con los nativos en un intenso proceso de mestizaje, que ha dado lugar a la creación de la comunidad hispana, la cual alberga a más de quinientos millones de personas en todo el planeta.

“Este ámbito cultural es la Civilización Hispánica, compuesta por un rico arsenal de ingredientes materiales e intangibles. Entre los primeros cabe citar el trasiego de elementos entre ambas orillas del Atlántico, que revolucionó la alimentación mundial; el traslado de ganado al continente americano, así como el modelo ganadero y ecuestre de las Marismas del Guadalquivir, que se extendió por las Américas de norte a sur; la arquitectura y el urbanismo, con el diseño rectangular de las ciudades americanas y la plaza mayor como centro y nervio de la vida ciudadana y la música, con el romance castellano como armazón de gran parte de la música americana.

“En el aspecto inmaterial, la civilización hispánica presenta elementos de relevancia máxima, como la lengua española, el tercer idioma del mundo tras el chino mandarín y el inglés; la religión, ya que España expande el catolicismo hasta hacerlo universal; y todo el conjunto de caracteres comunes a las gentes hispánicas, derivadas del mestizaje, como la solidaridad y la generosidad, la familia amplia, la facilidad de comunicación de unos con otros, la atención puesta sobre el presente y la afición a la fiesta.

“Pese a lo que de modo insistente ha reiterado la Leyenda Negra, y a pesar de que existen casos de abusos individuales, la obra de España en América es altamente positiva y humanitaria, ya que las Leyes de Indias, protectoras y hasta paternalistas hacia el indio americano, llevaron a la supervivencia a la larga de las razas indias –como es visible hoy- y a la creación de una nueva raza híbrida, mestiza, que en su conjunto ha labrado esa cultura hispana, compuesta por un rico contenido de ingredientes materiales e inmateriales, unas mismas costumbres, tradiciones y fiestas y, sobre todo, una común filosofía vital, resumida en la pasión por vivir. Todo ello conforma una de las grandes culturas actuales del mundo occidental: la Civilización Hispánica.”

Al referirse a esta obra Javier Navascués el 01/12/2018 escribe en elespañoldigital.com: “El descubrimiento, conquista, evangelización y civilización de América por España, es uno, si no el mayor, de los hitos históricos de la humanidad. Nunca suficientemente loado y ensalzado por los propios españoles, y que ha sido denostado hasta el ridículo. Por eso es necesario volver a poner las cosas en su sitio. Por eso la importancia de aportaciones tan documentadas, certeras y lúcidas como la del insigne escritor Borja Cardelús.”

La efeméride de los 500 años del encuentro de dos culturas obliga a leer este libro que, indudablemente, generará debates y polémicas.

La civilización hispánica

Cesáreo Teroba Lara

Cultura no es sinónimo de civilización. La cultura es el conjunto de creencias, costumbres, conocimientos, prácticas, normas, ritos, tecnologías, artes y maneras de ser que predominan en el común de la gente que la integra. La identidad cultural, por tanto, se puede definir como el agregado de valores, símbolos, tradiciones y modos de comportamiento que cohesiona a un grupo social, es el sustrato en el que los individuos que lo forman basan su sentimiento de pertenencia.

Civilización, en cambio, se denomina al pueblo o comunidad que dispone de una historia, una cultura definida y que, a través del tiempo, ha adquirido un desarrollo importante. Civilización es el fenómeno mediante el cual una sociedad progresa, no sólo en cuestiones materiales sino también en valores, en su visión de la vida.

Una característica de las civilizaciones es el desarrollo de un sistema cultural que influye en otras sociedades: en el idioma, la religión, la ciencia, la tecnología y las formas del poder. Una civilización puede existir por sí misma, aunque normalmente integra varias culturas. La historia de la humanidad es la historia de las civilizaciones: la china, la romana, la islámica y la occidental, hoy la más pujante, que se compone de varias subcivilizaciones nacionales y supranacionales: la anglosajona, la francesa y la rusa, como ejemplos.

Fechado en abril de 2018 apareció en las librerías de Madrid, México, Buenos Aires y Santiago, el libro titulado “La civilización hispánica. El encuentro de dos mundos”, cuyo autor es Borja Cardelús y Muñoz-Seca. La oportunidad de la aparición de esta obra es innegable: su producción y difusión sin duda se planearon con motivo del V Centenario de la presencia masiva de los españoles en América.

El autor, hombre polifacético en el mundo de la ciencia y la cultura, es licenciado en Derecho y Ciencias Económicas, ha dedicado gran parte de su actividad, en los ámbitos televisivo y editorial, a los temas relacionados con la conservación de la naturaleza, que le han valido para obtener en España el Premio Nacional de Medio Ambiente. Recientemente, sin embargo, sus afanes laborales se han orientado a la investigación y difusión de la cultura hispana, cuyos resultados se encuentran en los libros: “La huella de España en Estados Unidos”, “España en el Pacífico”, “La Florida española”, “El Camino Real de Tierra Adentro” y “El Gran Camino Inca”, entre otros.

La presentación que se hace del libro “La civilización hispánica. El encuentro de dos mundos”, resume la visión actual -desde el otro lado del Atlántico- de la interinfluencia cultural resultante del descubrimiento y la conquista de una parte del continente americano por los castellanos. Dado el interés que implica conocer el punto de vista “del otro” sobre el episodio más dramático que dio origen a la nación mexicana, se transcribe dicha presentación:

“España acudió a América no para formar un imperio, sino para construir una nueva civilización, integrándose con los nativos en un intenso proceso de mestizaje, que ha dado lugar a la creación de la comunidad hispana, la cual alberga a más de quinientos millones de personas en todo el planeta.

“Este ámbito cultural es la Civilización Hispánica, compuesta por un rico arsenal de ingredientes materiales e intangibles. Entre los primeros cabe citar el trasiego de elementos entre ambas orillas del Atlántico, que revolucionó la alimentación mundial; el traslado de ganado al continente americano, así como el modelo ganadero y ecuestre de las Marismas del Guadalquivir, que se extendió por las Américas de norte a sur; la arquitectura y el urbanismo, con el diseño rectangular de las ciudades americanas y la plaza mayor como centro y nervio de la vida ciudadana y la música, con el romance castellano como armazón de gran parte de la música americana.

“En el aspecto inmaterial, la civilización hispánica presenta elementos de relevancia máxima, como la lengua española, el tercer idioma del mundo tras el chino mandarín y el inglés; la religión, ya que España expande el catolicismo hasta hacerlo universal; y todo el conjunto de caracteres comunes a las gentes hispánicas, derivadas del mestizaje, como la solidaridad y la generosidad, la familia amplia, la facilidad de comunicación de unos con otros, la atención puesta sobre el presente y la afición a la fiesta.

“Pese a lo que de modo insistente ha reiterado la Leyenda Negra, y a pesar de que existen casos de abusos individuales, la obra de España en América es altamente positiva y humanitaria, ya que las Leyes de Indias, protectoras y hasta paternalistas hacia el indio americano, llevaron a la supervivencia a la larga de las razas indias –como es visible hoy- y a la creación de una nueva raza híbrida, mestiza, que en su conjunto ha labrado esa cultura hispana, compuesta por un rico contenido de ingredientes materiales e inmateriales, unas mismas costumbres, tradiciones y fiestas y, sobre todo, una común filosofía vital, resumida en la pasión por vivir. Todo ello conforma una de las grandes culturas actuales del mundo occidental: la Civilización Hispánica.”

Al referirse a esta obra Javier Navascués el 01/12/2018 escribe en elespañoldigital.com: “El descubrimiento, conquista, evangelización y civilización de América por España, es uno, si no el mayor, de los hitos históricos de la humanidad. Nunca suficientemente loado y ensalzado por los propios españoles, y que ha sido denostado hasta el ridículo. Por eso es necesario volver a poner las cosas en su sitio. Por eso la importancia de aportaciones tan documentadas, certeras y lúcidas como la del insigne escritor Borja Cardelús.”

La efeméride de los 500 años del encuentro de dos culturas obliga a leer este libro que, indudablemente, generará debates y polémicas.