/ jueves 11 de junio de 2020

Deshojando el cempasúchil | Un proyecto de recuperar el poder se convirtió en compló

Debo confesar que a mí en lo personal no deja de sorprenderme la creatividad de AMLO –o ¿será de sus asesores?- que lleva más de un ciento de mañaneras, en las que ha acusado con el pretexto del derecho de réplica, a periódicos, televisoras, emisoras de radio, empresarios, a ricos, y a todo el que se le cruza en el camino, sabedor, que no tiene el mismo peso el de un periodista por muy reconocido que sea, al del poder de la investidura presidencial, habida cuenta que en este sexenio se han roto todos los cánones, empezando con sus presentaciones mañaneras, -ahora sabatinas y dominicales grabadas,- el número de mentiras en las que ha incurrido es infinito, sin embargo precisamente su fortaleza está en quienes votaron por él, clases desprotegidas, desafortunados del destino, los que son la cara de la desigualdad sin oportunidades, muy distintos a los ricos , a los que por decreto ha convertido en enemigos del pueblo.


Cuando presentó –su jefe de prensa- los datos del complot, no es algo ajeno a quienes hemos estudiado comunicación política, y se basa en fortalecer las estructuras propias , porque ¿qué si no otra cosa son los partidos sino buscadores de poder en aras de “servir al pueblo”? , y sí, claro en el proceso siempre deben debilitarse las filas del enemigo, y Morena –gracias a López Obrador- consiguió mayorías espeluznantes, lo que le da licencia de corzo, escuchábamos a Monreal decir que el país está polarizado, está dividido, que se siente el encono, y el periodista le dijo que el que lo estaba propiciando era el presidente, enfrentando a ricos contra pobres, a liberales con conservadores, cosa que Monreal aceptó, en fin esto no es más que otro de los distractores de López para que no reclamemos la cantidad de contagios y de muertos, la crisis económica en que todos estamos viviendo y la creciente y más violenta inseguridad que enfrentamos.


Cuando veo la indefensión de los policías, militares, marinos y guardias nacionales enfrentarse desarmados a las turbas enloquecidas, que se sienten con libertad de agredir, de usar piedras, palos, bombas molotov y líquidos incendiarios, al grado de que las marchas que se llevaron al cabo en las ciudades de México y Guadalajara, por disque grupos de “anarcos”, grupúsculos que parecieran preparados militarmente para agredir y causar destrozos, sabiendo que, aunque destruyan cristales de aparadores de bancos y oficinas y que, cuando pintarrajean con aceite en aerosol monumentos históricos, no va a pasar nada, porque… “abrazos no balazos” son los que recibirán, me pregunto: ¿de qué se trata?, ¿de quién es la mano que mueve los hilos? Y poniéndome en el lugar de los uniformados, me pregunto también: ¿el sueldo miserable que reciben compensa los riesgos que corren cada vez que salen a “enfrentar” a grupos violentos –que cargan grandes mochilas llenas de piedras, metales y bombas molotov, sabiendo que saldrán impunes y que, a los uniformados, ya ni siquiera les permiten los toletes, sino sólo los escudos, y que si devuelven los proyectiles con los que son agredidos, los exhiben públicamente, los cesan y los culpan de no respetar los derechos humanos? Pienso que nuestra policía debería, en los casos de esos grupos minoritarios, dividirlos, encapsularlos y detenerlos, y que no salgan pagando una multa que normalmente el propio gobierno subroga de nuestro dinero;-- 22 millones de pesos costó la manifestación del viernes a comerciantes, particulares y a la ciudad de México, pero no, los dejan libres, los exculpan, no los tocan ni con el pétalo de una rosa, ¿y a los afectados quien les pagará los daños?, ¿quién les resarcirá de las millonarias pérdidas por los saqueos?, ¿quién devolverá su dignidad a policías y militares?, ¿quién hará que vuelvan a ganar el respeto público? Sabiendo que, especialmente los militares, están preparados para responder hasta con fuerza letal -que normalmente no llega a esos extremos-, ¡queremos respeto para los uniformados, no solo de parte de la chusma que los agrede impunemente, sino de las autoridades que deben proporcionales buen sueldo, buen entrenamiento, buenas armas y mucho, mucho respeto!



Nos prestaRÁn mil millones de dólares ¿no que no?


A México le van a dar un crédito de mil millones de dólares que otorgará el Banco Mundial, las declaraciones acerca del destino de ese dinero y de los 28 mil millones de pesos recuperados por el Sat, de acuerdo a declaraciones a la Secretaría de Hacienda, no se utilizará para financiar programas para enfrentar la Covid-19. Supuestamente esa cantidad se usará para financiar la política de Desarrollo de Acceso Financiero, la finalidad: contribuir a los esfuerzos del gobierno (¿?) para apoyar la liquidez y establecer instrumentos para mejorar el acceso al sector financiero. ¿Y de verdad va a ser usado para evitar las graves consecuencias que la situación mundial y el virus traerían indefectiblemente a México? ¿Ya no se aplicará el “que cada quien se rasque con sus uñas”? Ese dinero podría ser utilizado para apoyar con un salario mínimo vital a los 12 millones de desempleados que no tendrán forma de sobrevivir, tomando en cuenta que esto va para largo, si bien nos va, por las predicciones –variables siempre- estaremos en la “nueva normalidad, más bien la nueva realidad, allá por septiembre u octubre.



Nuestro correo: www.susana_fernandez2@yahoo.com.mx


Para leer la columna: www.deshojandoelcempaxuchil.com


Debo confesar que a mí en lo personal no deja de sorprenderme la creatividad de AMLO –o ¿será de sus asesores?- que lleva más de un ciento de mañaneras, en las que ha acusado con el pretexto del derecho de réplica, a periódicos, televisoras, emisoras de radio, empresarios, a ricos, y a todo el que se le cruza en el camino, sabedor, que no tiene el mismo peso el de un periodista por muy reconocido que sea, al del poder de la investidura presidencial, habida cuenta que en este sexenio se han roto todos los cánones, empezando con sus presentaciones mañaneras, -ahora sabatinas y dominicales grabadas,- el número de mentiras en las que ha incurrido es infinito, sin embargo precisamente su fortaleza está en quienes votaron por él, clases desprotegidas, desafortunados del destino, los que son la cara de la desigualdad sin oportunidades, muy distintos a los ricos , a los que por decreto ha convertido en enemigos del pueblo.


Cuando presentó –su jefe de prensa- los datos del complot, no es algo ajeno a quienes hemos estudiado comunicación política, y se basa en fortalecer las estructuras propias , porque ¿qué si no otra cosa son los partidos sino buscadores de poder en aras de “servir al pueblo”? , y sí, claro en el proceso siempre deben debilitarse las filas del enemigo, y Morena –gracias a López Obrador- consiguió mayorías espeluznantes, lo que le da licencia de corzo, escuchábamos a Monreal decir que el país está polarizado, está dividido, que se siente el encono, y el periodista le dijo que el que lo estaba propiciando era el presidente, enfrentando a ricos contra pobres, a liberales con conservadores, cosa que Monreal aceptó, en fin esto no es más que otro de los distractores de López para que no reclamemos la cantidad de contagios y de muertos, la crisis económica en que todos estamos viviendo y la creciente y más violenta inseguridad que enfrentamos.


Cuando veo la indefensión de los policías, militares, marinos y guardias nacionales enfrentarse desarmados a las turbas enloquecidas, que se sienten con libertad de agredir, de usar piedras, palos, bombas molotov y líquidos incendiarios, al grado de que las marchas que se llevaron al cabo en las ciudades de México y Guadalajara, por disque grupos de “anarcos”, grupúsculos que parecieran preparados militarmente para agredir y causar destrozos, sabiendo que, aunque destruyan cristales de aparadores de bancos y oficinas y que, cuando pintarrajean con aceite en aerosol monumentos históricos, no va a pasar nada, porque… “abrazos no balazos” son los que recibirán, me pregunto: ¿de qué se trata?, ¿de quién es la mano que mueve los hilos? Y poniéndome en el lugar de los uniformados, me pregunto también: ¿el sueldo miserable que reciben compensa los riesgos que corren cada vez que salen a “enfrentar” a grupos violentos –que cargan grandes mochilas llenas de piedras, metales y bombas molotov, sabiendo que saldrán impunes y que, a los uniformados, ya ni siquiera les permiten los toletes, sino sólo los escudos, y que si devuelven los proyectiles con los que son agredidos, los exhiben públicamente, los cesan y los culpan de no respetar los derechos humanos? Pienso que nuestra policía debería, en los casos de esos grupos minoritarios, dividirlos, encapsularlos y detenerlos, y que no salgan pagando una multa que normalmente el propio gobierno subroga de nuestro dinero;-- 22 millones de pesos costó la manifestación del viernes a comerciantes, particulares y a la ciudad de México, pero no, los dejan libres, los exculpan, no los tocan ni con el pétalo de una rosa, ¿y a los afectados quien les pagará los daños?, ¿quién les resarcirá de las millonarias pérdidas por los saqueos?, ¿quién devolverá su dignidad a policías y militares?, ¿quién hará que vuelvan a ganar el respeto público? Sabiendo que, especialmente los militares, están preparados para responder hasta con fuerza letal -que normalmente no llega a esos extremos-, ¡queremos respeto para los uniformados, no solo de parte de la chusma que los agrede impunemente, sino de las autoridades que deben proporcionales buen sueldo, buen entrenamiento, buenas armas y mucho, mucho respeto!



Nos prestaRÁn mil millones de dólares ¿no que no?


A México le van a dar un crédito de mil millones de dólares que otorgará el Banco Mundial, las declaraciones acerca del destino de ese dinero y de los 28 mil millones de pesos recuperados por el Sat, de acuerdo a declaraciones a la Secretaría de Hacienda, no se utilizará para financiar programas para enfrentar la Covid-19. Supuestamente esa cantidad se usará para financiar la política de Desarrollo de Acceso Financiero, la finalidad: contribuir a los esfuerzos del gobierno (¿?) para apoyar la liquidez y establecer instrumentos para mejorar el acceso al sector financiero. ¿Y de verdad va a ser usado para evitar las graves consecuencias que la situación mundial y el virus traerían indefectiblemente a México? ¿Ya no se aplicará el “que cada quien se rasque con sus uñas”? Ese dinero podría ser utilizado para apoyar con un salario mínimo vital a los 12 millones de desempleados que no tendrán forma de sobrevivir, tomando en cuenta que esto va para largo, si bien nos va, por las predicciones –variables siempre- estaremos en la “nueva normalidad, más bien la nueva realidad, allá por septiembre u octubre.



Nuestro correo: www.susana_fernandez2@yahoo.com.mx


Para leer la columna: www.deshojandoelcempaxuchil.com