/ lunes 27 de enero de 2020

“Día internacional de la educación”

  • Estimados tlaxcaltecas, los saluda su amigo Joel Molina Ramírez.La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 24 de enero “Día Internacional de la Educación”, en celebración del papel que la educación desempeña en la paz y el desarrollo.

Esta fecha, recientemente celebrada en el mundo, nos ofrece una oportunidad para reflexionar acerca de la importancia de la educación, sus avances, y sus múltiples beneficios, en nuestra sociedad.

Ciertamente, la educación es un derecho humano, pero también un bien público y, sobre todo, una responsabilidad colectiva.

Todos entendemos que necesitamos educación de calidad para el desarrollo de los pueblos, pero las circunstancias del mundo actual demandan que además sea inclusiva y equitativa, para que todas las personas, sin excepción, tengan la oportunidad del aprendizaje como un medio para alcanzar su realización personal, y lograr una contribución al avance social.

No se pueden conseguir objetivos como la igualdad de género o la disminución de la pobreza sin apostar por la educación, sin ofrecer a niños, jóvenes y adultos, la posibilidad del estudio.

Por eso, para la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), la celebración del “Día Internacional de la Educación” del año 2020 colocó a la educación y al aprendizaje como el mejor recurso renovable de la humanidad, y reafirmó su papel como derecho humano fundamental que conduce al empoderamiento de los pueblos, a la preservación del planeta y a la promoción de la paz.

El año pasado, en el Senado de la República, dimos un paso importante en esa dirección, al reorientar el Sistema Educativo Nacional hacia el desarrollo humano integral del educando, y la programación estratégica de la formación docente y directiva, la infraestructura, los métodos y materiales educativos en el país, porque aprobamos importantes modificaciones a la legislación en materia educativa que garantizan el carácter universal, obligatorio, público, inclusivo, gratuito, laico e intercultural de la educación en México, bajo un nuevo modelo, el de la Nueva Escuela Mexicana.

Pero con estas modificaciones no solo pensamos en los alumnos que merecen una mejor educación, sino además en los maestros, que son pieza clave del aprendizaje, con un sistema abierto y transparente para su acceso a plazas, y en la mejora continua de la educación, con criterios claros para su evaluación diagnóstica, no punitiva.

Estimados tlaxcaltecas: sin duda, se han logrado modificaciones notables al sistema educativo de nuestro país, como la abrogación de la reforma educativa del sexenio pasado, y la aprobación de tres relevantes instrumentos: la Ley General de Educación, la Ley General del Sistema para la Carrera de Maestras y Maestros, y la Ley del Organismo para la Mejora Continua de la Educación.

Sin embargo, aún están pendientes aspectos fundamentales para su plena implementación, y ello implica que haya sectores de la población que aun vean limitado su derecho a la educación en los términos que establece la Constitución y las leyes en la materia. Los gobiernos estatales tienen que armonizar su legislación y demás disposiciones aplicables en el tema educativo, tal y como se estableció en la nueva reforma educativa, para cumplir este compromiso con el pueblo de México.

Como lo ha expresado el presidente Andrés Manuel López Obrador: “la educación no es un privilegio, es un derecho del pueblo”, y a ello obedece el interés del gobierno federal por seguir ampliando el programa de becas para preescolar, primaria, secundaria, preparatoria y universidad, a favor de las familias de escasos recursos económicos; de implementar un programa para la rehabilitación y mantenimiento de escuelas que fueron abandonadas por años, y de seguir construyendo más universidades “Benito Juárez” en zonas marginadas: para permitir que más mexicanos, sin distinción, puedan aprender y acceder al bienestar.

En Morena, estamos comprometidos con la educación de calidad en la libertad y para la libertad, para renovar las esperanzas en un futuro mejor, más humano y más igualitario, y como senadores comprometidos con la consolidación del proyecto de la Cuarta Transformación, seguiremos pugnando por el fortalecimiento de este derecho, que es fundamental para construir una sociedad libre, justa, solidaria, democrática y fraterna.

Muchas gracias por su atención. Hasta la próxima entrega.

  • Estimados tlaxcaltecas, los saluda su amigo Joel Molina Ramírez.La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 24 de enero “Día Internacional de la Educación”, en celebración del papel que la educación desempeña en la paz y el desarrollo.

Esta fecha, recientemente celebrada en el mundo, nos ofrece una oportunidad para reflexionar acerca de la importancia de la educación, sus avances, y sus múltiples beneficios, en nuestra sociedad.

Ciertamente, la educación es un derecho humano, pero también un bien público y, sobre todo, una responsabilidad colectiva.

Todos entendemos que necesitamos educación de calidad para el desarrollo de los pueblos, pero las circunstancias del mundo actual demandan que además sea inclusiva y equitativa, para que todas las personas, sin excepción, tengan la oportunidad del aprendizaje como un medio para alcanzar su realización personal, y lograr una contribución al avance social.

No se pueden conseguir objetivos como la igualdad de género o la disminución de la pobreza sin apostar por la educación, sin ofrecer a niños, jóvenes y adultos, la posibilidad del estudio.

Por eso, para la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), la celebración del “Día Internacional de la Educación” del año 2020 colocó a la educación y al aprendizaje como el mejor recurso renovable de la humanidad, y reafirmó su papel como derecho humano fundamental que conduce al empoderamiento de los pueblos, a la preservación del planeta y a la promoción de la paz.

El año pasado, en el Senado de la República, dimos un paso importante en esa dirección, al reorientar el Sistema Educativo Nacional hacia el desarrollo humano integral del educando, y la programación estratégica de la formación docente y directiva, la infraestructura, los métodos y materiales educativos en el país, porque aprobamos importantes modificaciones a la legislación en materia educativa que garantizan el carácter universal, obligatorio, público, inclusivo, gratuito, laico e intercultural de la educación en México, bajo un nuevo modelo, el de la Nueva Escuela Mexicana.

Pero con estas modificaciones no solo pensamos en los alumnos que merecen una mejor educación, sino además en los maestros, que son pieza clave del aprendizaje, con un sistema abierto y transparente para su acceso a plazas, y en la mejora continua de la educación, con criterios claros para su evaluación diagnóstica, no punitiva.

Estimados tlaxcaltecas: sin duda, se han logrado modificaciones notables al sistema educativo de nuestro país, como la abrogación de la reforma educativa del sexenio pasado, y la aprobación de tres relevantes instrumentos: la Ley General de Educación, la Ley General del Sistema para la Carrera de Maestras y Maestros, y la Ley del Organismo para la Mejora Continua de la Educación.

Sin embargo, aún están pendientes aspectos fundamentales para su plena implementación, y ello implica que haya sectores de la población que aun vean limitado su derecho a la educación en los términos que establece la Constitución y las leyes en la materia. Los gobiernos estatales tienen que armonizar su legislación y demás disposiciones aplicables en el tema educativo, tal y como se estableció en la nueva reforma educativa, para cumplir este compromiso con el pueblo de México.

Como lo ha expresado el presidente Andrés Manuel López Obrador: “la educación no es un privilegio, es un derecho del pueblo”, y a ello obedece el interés del gobierno federal por seguir ampliando el programa de becas para preescolar, primaria, secundaria, preparatoria y universidad, a favor de las familias de escasos recursos económicos; de implementar un programa para la rehabilitación y mantenimiento de escuelas que fueron abandonadas por años, y de seguir construyendo más universidades “Benito Juárez” en zonas marginadas: para permitir que más mexicanos, sin distinción, puedan aprender y acceder al bienestar.

En Morena, estamos comprometidos con la educación de calidad en la libertad y para la libertad, para renovar las esperanzas en un futuro mejor, más humano y más igualitario, y como senadores comprometidos con la consolidación del proyecto de la Cuarta Transformación, seguiremos pugnando por el fortalecimiento de este derecho, que es fundamental para construir una sociedad libre, justa, solidaria, democrática y fraterna.

Muchas gracias por su atención. Hasta la próxima entrega.