/ jueves 7 de febrero de 2019

El futuro del INE

Alberto Jaume Torres*

Los nuevos tiempos hacen que los cambios suenen atractivos y que la ola de la novedad arrase con todo lo hecho. Los países se construyen por generaciones y más nos vale cambiar solo aquello que no funciona y cuidar y valorar aquello indispensable para la vida democrática de nuestro país.

  • Elaborar un estudio serio del costo de las elecciones y atarlo a un porcentaje del presupuesto total, puede ser una herramienta que dé certidumbre e independencia de los dineros. Así sería un costo razonable y no politizado del presupuesto.

La autonomía del Instituto Nacional Electoral (INE) es una condición indispensable para su buen funcionamiento, el fragor de la lucha política y su coyuntura no puede estar en las decisiones ni depender de los humores de los gobernantes en turno. La idea de la independencia supone que las acciones del Instituto sean precisamente libres de injerencias del poder y de los intereses políticos y las presiones queden al margen de la vida interna de las decisiones y quehaceres de la propia institución.

Uno de los puntos clave para el buen funcionamiento es la estructura profesional del INE ya que los funcionarios no dependen de quien gane o pierda las elecciones, la independencia de los poderes es real y la permanencia tiene que ver con el cumplimiento de las obligaciones técnicas y profesionales que la propia actividad supone; la capacitación permanente hace que los funcionarios estén al día y su experiencia y capacidad son los elementos que se evalúan para mantener un servicio activo y con seguridad laboral. A los miembros del Servicio Profesional Electoral del organismo les da igual quién gane las elecciones, su actividad no depende de esos cambios y creo que esa es su verdadera fortaleza.

El presupuesto que tiene el INE es un asunto que me parece muy delicado. Elaborar un estudio serio del costo de las elecciones y atarlo a un porcentaje del presupuesto total, puede ser una herramienta que dé certidumbre e independencia de los dineros. Así sería un costo razonable y no politizado del presupuesto.

Dentro de las múltiples actividades que tradicionalmente tiene el Instituto además de la promoción de la cultura cívica a través de diferentes proyectos y programas a lo largo y ancho del país, la cartografía electoral, la credencialización que, además de ser el documento para votar, en los hechos es la identificación de los mexicanos.

A lo anterior, ahora se anuncian más de 100 organizaciones que buscaran ser un partido político, esto supondrá un enorme trabajo para la institución, ya que estas organizaciones tienen que celebrar asambleas que tienen que ser supervisadas y validadas por el organismo electoral nacional; se realizarán además de las elecciones, las consultas de interés nacional que están tan de moda, pero con los requisitos y estándares profesionales para que tengan efectos vinculantes con su resultado.

Asimismo, se tienen que supervisar los gastos de los partidos políticos a lo largo y ancho del país…en fin, son un cumulo de actividades que garantizan la transmisión pacifica del poder, por la vía electoral y ese solo hecho que parece muy simple, es una columna indispensable en para el desarrollo y crecimiento sostenido de México. Y eso más valdría valorarlo y cuidarlo.

*Vocal Ejecutivo de la Junta Distrital 03

Instituto Nacional Electoral en Tlaxcala


Alberto Jaume Torres*

Los nuevos tiempos hacen que los cambios suenen atractivos y que la ola de la novedad arrase con todo lo hecho. Los países se construyen por generaciones y más nos vale cambiar solo aquello que no funciona y cuidar y valorar aquello indispensable para la vida democrática de nuestro país.

  • Elaborar un estudio serio del costo de las elecciones y atarlo a un porcentaje del presupuesto total, puede ser una herramienta que dé certidumbre e independencia de los dineros. Así sería un costo razonable y no politizado del presupuesto.

La autonomía del Instituto Nacional Electoral (INE) es una condición indispensable para su buen funcionamiento, el fragor de la lucha política y su coyuntura no puede estar en las decisiones ni depender de los humores de los gobernantes en turno. La idea de la independencia supone que las acciones del Instituto sean precisamente libres de injerencias del poder y de los intereses políticos y las presiones queden al margen de la vida interna de las decisiones y quehaceres de la propia institución.

Uno de los puntos clave para el buen funcionamiento es la estructura profesional del INE ya que los funcionarios no dependen de quien gane o pierda las elecciones, la independencia de los poderes es real y la permanencia tiene que ver con el cumplimiento de las obligaciones técnicas y profesionales que la propia actividad supone; la capacitación permanente hace que los funcionarios estén al día y su experiencia y capacidad son los elementos que se evalúan para mantener un servicio activo y con seguridad laboral. A los miembros del Servicio Profesional Electoral del organismo les da igual quién gane las elecciones, su actividad no depende de esos cambios y creo que esa es su verdadera fortaleza.

El presupuesto que tiene el INE es un asunto que me parece muy delicado. Elaborar un estudio serio del costo de las elecciones y atarlo a un porcentaje del presupuesto total, puede ser una herramienta que dé certidumbre e independencia de los dineros. Así sería un costo razonable y no politizado del presupuesto.

Dentro de las múltiples actividades que tradicionalmente tiene el Instituto además de la promoción de la cultura cívica a través de diferentes proyectos y programas a lo largo y ancho del país, la cartografía electoral, la credencialización que, además de ser el documento para votar, en los hechos es la identificación de los mexicanos.

A lo anterior, ahora se anuncian más de 100 organizaciones que buscaran ser un partido político, esto supondrá un enorme trabajo para la institución, ya que estas organizaciones tienen que celebrar asambleas que tienen que ser supervisadas y validadas por el organismo electoral nacional; se realizarán además de las elecciones, las consultas de interés nacional que están tan de moda, pero con los requisitos y estándares profesionales para que tengan efectos vinculantes con su resultado.

Asimismo, se tienen que supervisar los gastos de los partidos políticos a lo largo y ancho del país…en fin, son un cumulo de actividades que garantizan la transmisión pacifica del poder, por la vía electoral y ese solo hecho que parece muy simple, es una columna indispensable en para el desarrollo y crecimiento sostenido de México. Y eso más valdría valorarlo y cuidarlo.

*Vocal Ejecutivo de la Junta Distrital 03

Instituto Nacional Electoral en Tlaxcala