/ viernes 4 de septiembre de 2020

El PRI, en ruta hacia el 2021

El domingo pasado se renovó el Consejo Político Estatal del PRI, pero a diferencia de antaño esta vez no constituyó un acto inercial, sino un evento de enorme relevancia dado el escenario político que se vive en Tlaxcala.

El Revolucionario Institucional se está reagrupando para dar pelea rumbo a las elecciones de 2021.

Paulatinamente, ha llevado a cabo en los últimos meses un proceso de reorganización y restructuración que lo está fortaleciendo internamente, y la militancia está percibiendo la importancia de asumir su responsabilidad partidista por el bien del estado y de México.

En este contexto, resultó sumamente relevante la intervención del gobernador Marco Mena, quien destacó la necesidad de lograr la unidad del partido, de cara al próximo proceso comicial.

Sin duda, el PRI está ante el mayor desafío de su historia, tras la elección del 2018, cuando el sistema de partidos, y los propios partidos, sufrieron una gran fragmentación, trayendo consigo incertidumbre en todos los territorios políticos del país. Y por ello, la unidad resulta la piedra angular del gran proyecto que pueda emprender el PRI.

Marco Mena entiende bien que no pueden repetirse los errores del pasado, fraguados al calor de la desunión, y por ello se pronunció por acordar métodos, procedimientos y calendarios, lo que implica que prive el consenso. Evidentemente, no será fácil, pero si el primer priista en el estado se asume como factor de unidad, y señala los riesgos de determinaciones que ponen al PRI en posición vulnerable, es posible facilitar procesos que, por su propia naturaleza, son complicados, como la forma de elección interna de los candidatos.

En este punto, Mena también consideró importante elegir candidatos de manera competitiva, especialmente para el cargo de gobernador, lo que significa que el candidato o candidata surja de quien tenga el mayor apoyo popular, para que sea su competitividad el principal factor de unidad. Ello no significa que los procesos de elección interna vayan a carecer de condiciones de equidad. Por supuesto, la participación será importante, pero como militantes será preciso anteponer los intereses del partido y la posibilidad de que continúe en el gobierno para seguir ofreciendo resultados a la ciudadanía

Resultados como el crecimiento económico, el desarrollo industrial, el aumento del empleo, el sistema estatal de becas, el financiamiento de obras regionales y municipales, o el programa de combate a la pobreza "Supérate" podrían detenerse si, internamente, el PRI no postula y apoya con todo a quien le asegure triunfos, no solo en la gubernatura, sino también en los cargos de diputados, y presidentes municipales y de comunidades, donde también ha habido trabajo a favor de la gente.

Y finalmente, como lo planteó Marco Mena, vale la pena reconocer la necesidad de construir alianzas con otras fuerzas políticas, porque el escenario se vislumbra de alta competencia, pero también de oportunidades. Hay que observar que cada vez más mexicanos ponen en duda la eficacia del gobierno federal y la credibilidad de Morena.

Es por todo lo anterior que el líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, reconoció el liderazgo y capacidad de Marco Mena, quien, con seguridad, tendrá voz y voto en la toma de decisiones relacionadas con la conducción del partido durante el proceso electoral venidero.

Es así que, rumbo al 2021, el PRI se encuentra ante un panorama muy retador, pero con los elementos necesarios para realizar un trabajo político inteligente y con verdadera visión de futuro, apegado a la legalidad y a los valores de la democracia.

El domingo pasado se renovó el Consejo Político Estatal del PRI, pero a diferencia de antaño esta vez no constituyó un acto inercial, sino un evento de enorme relevancia dado el escenario político que se vive en Tlaxcala.

El Revolucionario Institucional se está reagrupando para dar pelea rumbo a las elecciones de 2021.

Paulatinamente, ha llevado a cabo en los últimos meses un proceso de reorganización y restructuración que lo está fortaleciendo internamente, y la militancia está percibiendo la importancia de asumir su responsabilidad partidista por el bien del estado y de México.

En este contexto, resultó sumamente relevante la intervención del gobernador Marco Mena, quien destacó la necesidad de lograr la unidad del partido, de cara al próximo proceso comicial.

Sin duda, el PRI está ante el mayor desafío de su historia, tras la elección del 2018, cuando el sistema de partidos, y los propios partidos, sufrieron una gran fragmentación, trayendo consigo incertidumbre en todos los territorios políticos del país. Y por ello, la unidad resulta la piedra angular del gran proyecto que pueda emprender el PRI.

Marco Mena entiende bien que no pueden repetirse los errores del pasado, fraguados al calor de la desunión, y por ello se pronunció por acordar métodos, procedimientos y calendarios, lo que implica que prive el consenso. Evidentemente, no será fácil, pero si el primer priista en el estado se asume como factor de unidad, y señala los riesgos de determinaciones que ponen al PRI en posición vulnerable, es posible facilitar procesos que, por su propia naturaleza, son complicados, como la forma de elección interna de los candidatos.

En este punto, Mena también consideró importante elegir candidatos de manera competitiva, especialmente para el cargo de gobernador, lo que significa que el candidato o candidata surja de quien tenga el mayor apoyo popular, para que sea su competitividad el principal factor de unidad. Ello no significa que los procesos de elección interna vayan a carecer de condiciones de equidad. Por supuesto, la participación será importante, pero como militantes será preciso anteponer los intereses del partido y la posibilidad de que continúe en el gobierno para seguir ofreciendo resultados a la ciudadanía

Resultados como el crecimiento económico, el desarrollo industrial, el aumento del empleo, el sistema estatal de becas, el financiamiento de obras regionales y municipales, o el programa de combate a la pobreza "Supérate" podrían detenerse si, internamente, el PRI no postula y apoya con todo a quien le asegure triunfos, no solo en la gubernatura, sino también en los cargos de diputados, y presidentes municipales y de comunidades, donde también ha habido trabajo a favor de la gente.

Y finalmente, como lo planteó Marco Mena, vale la pena reconocer la necesidad de construir alianzas con otras fuerzas políticas, porque el escenario se vislumbra de alta competencia, pero también de oportunidades. Hay que observar que cada vez más mexicanos ponen en duda la eficacia del gobierno federal y la credibilidad de Morena.

Es por todo lo anterior que el líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, reconoció el liderazgo y capacidad de Marco Mena, quien, con seguridad, tendrá voz y voto en la toma de decisiones relacionadas con la conducción del partido durante el proceso electoral venidero.

Es así que, rumbo al 2021, el PRI se encuentra ante un panorama muy retador, pero con los elementos necesarios para realizar un trabajo político inteligente y con verdadera visión de futuro, apegado a la legalidad y a los valores de la democracia.