/ jueves 18 de febrero de 2021

Espacio INE | Reforma constitucional y legal 2014, eliminación de cuotas de género

  • Mirna Eugenia Garduño Ruiz*

La reforma constitucional y legal de 2014, eliminó la idea de las cuotas de género, y transitamos a la paridad en las candidaturas, al menos en lo que hace a las disposiciones legales.

Actualmente el artículo 232 numeral 3 de la ley electoral establece que, "Los partidos políticos promoverán y garantizarán la paridad entre los géneros en la postulación de candidaturas a los cargos de elección popular para la integración del Congreso de la Unión, los Congresos de las Entidades Federativas, las planillas de Ayuntamientos y de las Alcaldías".

Llegamos a la tan ansiada paridad de género y parece que con reglas claras y las que no son tan claras, el Consejo General del INE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se han ido encargando. Probablemente, con la tendencia que hemos observado en las últimas elecciones federales, podemos pensar que en 2021 la conformación de las diputaciones en el congreso federal será con el 50 % de mujeres y el 50% de hombres.

Entonces, ¿ya se acabó? La ruta que inició con la lucha de tantas mujeres en lo individual y muchos colectivos ¿llegó a su fin? ¿Sus objetivos fueron colmados?

Siempre que estemos ante el estudio de cualquiera de los derechos humanos la respuesta debe ser: no basta. Cada objetivo que se alcanza nos permite tener la suficiente altura como para darnos cuenta de que hay nuevos desafíos. ¿Cómo lograr la paridad total, la paridad en todo? No sólo en candidaturas, también en la conformación de los órganos de poder, de elección popular y de designación directa. Y una vez que se alcance ese objetivo, ¿habrá terminado la carrera? No, no es así.

Porque no se trata sólo de paridad, sino de paridad sin violencia.

En este tema específico, el 28 de octubre pasado, el INE aprobó los Lineamientos para que los partidos políticos nacionales y, en su caso, los partidos políticos locales, prevengan, atiendan, sancionen, reparen y erradiquen la violencia política contra las mujeres en razón de género.

¿Por qué se aprueban estos lineamientos en la época en donde más cerca hemos estado de la paridad en cuanto a legisladoras y legisladores federales?

Considero que es precisamente por eso, porque ya nos hemos dado cuenta de que, la paridad no es el fin del camino, hay que transitar a la paridad sí, pero sin violencia política por razón del género.

Y este problema de la violencia política en razón de género y la igualdad de oportunidades no se va a resolver con una reforma después de cada proceso electoral que intenta corregir los defectos de la anterior ni con lineamientos que llenan vacíos legales, sino con más hombres dispuestos a renunciar a sus privilegios, particularmente los que inciden en que la igualdad sustantiva no sea una realidad en nuestro país.

  • *Vocal de Organización Electoral / Junta Local Ejecutiva del INE en Tlaxcala
  • Mirna Eugenia Garduño Ruiz*

La reforma constitucional y legal de 2014, eliminó la idea de las cuotas de género, y transitamos a la paridad en las candidaturas, al menos en lo que hace a las disposiciones legales.

Actualmente el artículo 232 numeral 3 de la ley electoral establece que, "Los partidos políticos promoverán y garantizarán la paridad entre los géneros en la postulación de candidaturas a los cargos de elección popular para la integración del Congreso de la Unión, los Congresos de las Entidades Federativas, las planillas de Ayuntamientos y de las Alcaldías".

Llegamos a la tan ansiada paridad de género y parece que con reglas claras y las que no son tan claras, el Consejo General del INE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se han ido encargando. Probablemente, con la tendencia que hemos observado en las últimas elecciones federales, podemos pensar que en 2021 la conformación de las diputaciones en el congreso federal será con el 50 % de mujeres y el 50% de hombres.

Entonces, ¿ya se acabó? La ruta que inició con la lucha de tantas mujeres en lo individual y muchos colectivos ¿llegó a su fin? ¿Sus objetivos fueron colmados?

Siempre que estemos ante el estudio de cualquiera de los derechos humanos la respuesta debe ser: no basta. Cada objetivo que se alcanza nos permite tener la suficiente altura como para darnos cuenta de que hay nuevos desafíos. ¿Cómo lograr la paridad total, la paridad en todo? No sólo en candidaturas, también en la conformación de los órganos de poder, de elección popular y de designación directa. Y una vez que se alcance ese objetivo, ¿habrá terminado la carrera? No, no es así.

Porque no se trata sólo de paridad, sino de paridad sin violencia.

En este tema específico, el 28 de octubre pasado, el INE aprobó los Lineamientos para que los partidos políticos nacionales y, en su caso, los partidos políticos locales, prevengan, atiendan, sancionen, reparen y erradiquen la violencia política contra las mujeres en razón de género.

¿Por qué se aprueban estos lineamientos en la época en donde más cerca hemos estado de la paridad en cuanto a legisladoras y legisladores federales?

Considero que es precisamente por eso, porque ya nos hemos dado cuenta de que, la paridad no es el fin del camino, hay que transitar a la paridad sí, pero sin violencia política por razón del género.

Y este problema de la violencia política en razón de género y la igualdad de oportunidades no se va a resolver con una reforma después de cada proceso electoral que intenta corregir los defectos de la anterior ni con lineamientos que llenan vacíos legales, sino con más hombres dispuestos a renunciar a sus privilegios, particularmente los que inciden en que la igualdad sustantiva no sea una realidad en nuestro país.

  • *Vocal de Organización Electoral / Junta Local Ejecutiva del INE en Tlaxcala