/ jueves 30 de enero de 2020

Espacio ITE | 2020: Un año electoral

EDGAR ALFONSO ALDAVE AGUILAR*

  • Me atrevo a escribir que todos hablamos de política, tenemos percepciones propias o adquiridas de las actividades diarias de nuestra calle, comunidad, municipio, estado o país, y eso no es malo, de hecho lo considero muy bueno; tanto que los medios de comunicación locales en este primer mes del año ocupan sus columnas en comentar sobre los partidos políticos y sus acciones preparatorias para las elecciones del 2021: fuerzas políticas, personas candidateables, movimientos intrapartidistas, estructuras, posibles coaliciones, entre otros tantos tópicos que sin duda alguna establecen a este año, como año electoral.

Lo que pasa desapercibido es que si efectivamente, a partir del mes de enero estamos tan metidos en temas y pláticas electorales, la ciudadanía y las autoridades no lo consideran así para las acciones que se realizan en las autoridades electorales administrativas, pues pareciera que la política está separada de los comicios electorales, la información de la ciudadanía en general es que con la impresión de boletas y el día de la jornada electoral, se realiza un proceso electoral.

La verdad es más que eso, para el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones, así como para los partidos políticos y los medios de comunicación este es un año electoral, y no solamente porque ya se hable de ello sino porque la legislación en la materia así lo establece. Nuestra Ley Local en varios artículos establece que es responsabilidad del ITE la preparación, organización, desarrollo, vigilancia y validez de las elecciones en el Estado, lo que en términos más complejos y articulado con las disposiciones reglamentarias del INE (al estar insertos en el modelo de elecciones concurrentes) muchas actividades se realizan y realizarán este año.

  • Es importante hablar de la política local, pero más importante sobre los procesos electorales, pues para validar el triunfo de una persona como representante popular, y del que se estará comentando posteriormente, es innegable que tuvo que pasar por un proceso que se desconoce generalmente...

Actividades como elaboración de documentación electoral y para capacitación (no solo boletas), convocatorias del proceso electoral y candidaturas independientes, y un sinfín de reglamentos y lineamientos para formalizar registros de candidaturas, operatividad de órganos desconcentrados, sistemas informáticos, entre otros; el desarrollo de sistemas informáticos como el de cómputos distritales y municipales, registro de candidaturas, resultados electorales preliminares; acciones de promoción del voto y muchas más.

Por eso creo que es importante hablar de la política local, pero más importante sobre los procesos electorales, pues para validar el triunfo de una persona como representante popular, y del que se estará comentando posteriormente, es innegable que tuvo que pasar por un proceso que se desconoce generalmente (proceso interno partidista o manifestación de intención a una candidatura independiente, registro de la candidatura, campañas electorales, representación ante el consejo que corresponda, etc.), que transita con el árbitro de manera silenciosa y casi imperceptible, y así sucede con la ciudadanía que participa en las mesas de casilla u otro órgano electoral.

Creo firmemente en que el mejor árbitro es el que no participa de manera activa en el juego hasta que exista una falta a las reglas, pero también que es muy importante conocer las reglas y las funciones del árbitro para que el juego salga de la mejor manera, sin especulaciones o falsas perspectivas.

  • *Consejero del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones


EDGAR ALFONSO ALDAVE AGUILAR*

  • Me atrevo a escribir que todos hablamos de política, tenemos percepciones propias o adquiridas de las actividades diarias de nuestra calle, comunidad, municipio, estado o país, y eso no es malo, de hecho lo considero muy bueno; tanto que los medios de comunicación locales en este primer mes del año ocupan sus columnas en comentar sobre los partidos políticos y sus acciones preparatorias para las elecciones del 2021: fuerzas políticas, personas candidateables, movimientos intrapartidistas, estructuras, posibles coaliciones, entre otros tantos tópicos que sin duda alguna establecen a este año, como año electoral.

Lo que pasa desapercibido es que si efectivamente, a partir del mes de enero estamos tan metidos en temas y pláticas electorales, la ciudadanía y las autoridades no lo consideran así para las acciones que se realizan en las autoridades electorales administrativas, pues pareciera que la política está separada de los comicios electorales, la información de la ciudadanía en general es que con la impresión de boletas y el día de la jornada electoral, se realiza un proceso electoral.

La verdad es más que eso, para el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones, así como para los partidos políticos y los medios de comunicación este es un año electoral, y no solamente porque ya se hable de ello sino porque la legislación en la materia así lo establece. Nuestra Ley Local en varios artículos establece que es responsabilidad del ITE la preparación, organización, desarrollo, vigilancia y validez de las elecciones en el Estado, lo que en términos más complejos y articulado con las disposiciones reglamentarias del INE (al estar insertos en el modelo de elecciones concurrentes) muchas actividades se realizan y realizarán este año.

  • Es importante hablar de la política local, pero más importante sobre los procesos electorales, pues para validar el triunfo de una persona como representante popular, y del que se estará comentando posteriormente, es innegable que tuvo que pasar por un proceso que se desconoce generalmente...

Actividades como elaboración de documentación electoral y para capacitación (no solo boletas), convocatorias del proceso electoral y candidaturas independientes, y un sinfín de reglamentos y lineamientos para formalizar registros de candidaturas, operatividad de órganos desconcentrados, sistemas informáticos, entre otros; el desarrollo de sistemas informáticos como el de cómputos distritales y municipales, registro de candidaturas, resultados electorales preliminares; acciones de promoción del voto y muchas más.

Por eso creo que es importante hablar de la política local, pero más importante sobre los procesos electorales, pues para validar el triunfo de una persona como representante popular, y del que se estará comentando posteriormente, es innegable que tuvo que pasar por un proceso que se desconoce generalmente (proceso interno partidista o manifestación de intención a una candidatura independiente, registro de la candidatura, campañas electorales, representación ante el consejo que corresponda, etc.), que transita con el árbitro de manera silenciosa y casi imperceptible, y así sucede con la ciudadanía que participa en las mesas de casilla u otro órgano electoral.

Creo firmemente en que el mejor árbitro es el que no participa de manera activa en el juego hasta que exista una falta a las reglas, pero también que es muy importante conocer las reglas y las funciones del árbitro para que el juego salga de la mejor manera, sin especulaciones o falsas perspectivas.

  • *Consejero del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones