/ jueves 19 de noviembre de 2020

Espacio ITE | Judicializar la paridad y las masculinidades

Norberto Sánchez Briones*

Tlaxcala debe dar forma a una democracia que impacte en la familia, los roles sociales y los cargos o responsabilidades de las personas que se adquieran en procesos electorales, analizando conductas que deban fortalecerse desde la infancia hasta el ejercicio de sus derechos político electorales de las personas. En el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones tenemos acciones encaminadas a la paridad de género y en capacitar en masculinidades a la población en general para compartir una reflexión conjunta de cómo se define la democracia y su relación con la defensa de derechos para todas y todos los que integramos una sociedad, que, además, da pasos firmes en la construcción de una cultura, que la constitución política manifiesta claramente para nuestro país.

Es necesario diseñar mecanismos de convivencia que sean apegados a la igualdad y la no discriminación, además de erradicar la violencia contra las mujeres en un entorno de masculinidades distintas, que cada día se configuran y conviven tratando de ser resilientes a obstáculos, pero buscando ser también asertivas y empáticas con el nuevo entorno y las nuevas relaciones sociales dentro de una comunidad que desea tener rasgos democráticos en la forma en como tomamos decisiones y resolvemos conflictos.

La igualdad y la no violencia contra las mujeres, va de la mano de la nueva conformación de una estructura o arquitectura social del hombre, llamada actualmente como nuevas masculinidades que hay que estudiar, analizar y reflexionar en conjunto. Recordemos que la generación de nuestros abuelos tenía impregnado una serie de conductas machistas que eran propias del devenir histórico, hay que entender el contexto en el que se desenvolvieron, después ese diagnóstico, ya muy comentado, ahora toca enseñarnos a realizar tareas de manera compartida observando empáticamente las actividades que conllevan a responsabilidades y derechos dentro del espacio público al igual que del espacio privado.

Recapacitar la masculinidad puede ser una salida para encontrar la verdadera igualdad y sobre todo la erradicación de la violencia en contra de las mujeres. De acuerdo con diferentes autores,no existe una sola forma de ser hombre, pues, aunque existen conductas que son generalizadas, cada persona va adquiriendo sus propias formas de ser, por lo que no se puede hablar de masculinidad, si no de masculinidades. Para Elisabeth Badinter, filósofa y experta en temas de género, la identidad masculina se adquiere por oposición, negando el lado femenino, es decir, el hombre debe convencer a los demás una situación viril que ha generado violencia y discriminación que se sustentan en dichos y acciones cada vez más agresivas y que a veces no vemos.

Según la doctora Nancy Chodorow, el origen de la identidad masculina sería más negativoque positivo, pues pone el acento en la diferenciación, en la distancia que establece con respecto a las demás personas y en la carencia de una relación afectiva. Se buscanmodelos de masculinidad basados en una concepción igualitaria y no jerárquica, cuyo sentido se mida "no en sus éxitos personales, sino en la manera en que su labor revierta en la mejora de la sociedad a la que se sienta responsablemente vinculado". Por lo cual, hay que llevar este nuevo concepto a la imaginación para crear masculinidades positivas que impliquen situaciones reales de incidencia directa, pero con una orientación realmente democrática, para resolver diferencias, encontrar consensos o decidir sobre la nueva conformación de identidad masculina que sea ejemplo para los individuos basados en la igualdad y la sana convivencia.

Así que judicializar el tema de la paridad es a mi parecer adecuado para que se determine, (no quién tiene la razón) cuales son los criterios más progresistas en torno al tema que resalten derechos a la luz de interpretaciones distintas, lo que es adecuado, pues está en las reglas y normas la idea de que esos temas se determinen por medio de análisis imparciales de órganos autónomos jurisdiccionales que nos den pautas para tomar un rumbo que esté lo más apegado a la legalidad y a la vez a la defensa de los derechos político electorales de la ciudadanía.

Ejercitar la vida en democracia y legitimar las decisiones de un colectivo judicializando temas y acciones de diferentes actores y autoridades es lo correcto, y nos dará certeza en la actividad a realizar para que tengan la confianza, de que no hay confrontación y si hay propuesta el diálogo y construcción de criterios que ayuden al proceso electoral.

  • *Consejero electoral

Norberto Sánchez Briones*

Tlaxcala debe dar forma a una democracia que impacte en la familia, los roles sociales y los cargos o responsabilidades de las personas que se adquieran en procesos electorales, analizando conductas que deban fortalecerse desde la infancia hasta el ejercicio de sus derechos político electorales de las personas. En el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones tenemos acciones encaminadas a la paridad de género y en capacitar en masculinidades a la población en general para compartir una reflexión conjunta de cómo se define la democracia y su relación con la defensa de derechos para todas y todos los que integramos una sociedad, que, además, da pasos firmes en la construcción de una cultura, que la constitución política manifiesta claramente para nuestro país.

Es necesario diseñar mecanismos de convivencia que sean apegados a la igualdad y la no discriminación, además de erradicar la violencia contra las mujeres en un entorno de masculinidades distintas, que cada día se configuran y conviven tratando de ser resilientes a obstáculos, pero buscando ser también asertivas y empáticas con el nuevo entorno y las nuevas relaciones sociales dentro de una comunidad que desea tener rasgos democráticos en la forma en como tomamos decisiones y resolvemos conflictos.

La igualdad y la no violencia contra las mujeres, va de la mano de la nueva conformación de una estructura o arquitectura social del hombre, llamada actualmente como nuevas masculinidades que hay que estudiar, analizar y reflexionar en conjunto. Recordemos que la generación de nuestros abuelos tenía impregnado una serie de conductas machistas que eran propias del devenir histórico, hay que entender el contexto en el que se desenvolvieron, después ese diagnóstico, ya muy comentado, ahora toca enseñarnos a realizar tareas de manera compartida observando empáticamente las actividades que conllevan a responsabilidades y derechos dentro del espacio público al igual que del espacio privado.

Recapacitar la masculinidad puede ser una salida para encontrar la verdadera igualdad y sobre todo la erradicación de la violencia en contra de las mujeres. De acuerdo con diferentes autores,no existe una sola forma de ser hombre, pues, aunque existen conductas que son generalizadas, cada persona va adquiriendo sus propias formas de ser, por lo que no se puede hablar de masculinidad, si no de masculinidades. Para Elisabeth Badinter, filósofa y experta en temas de género, la identidad masculina se adquiere por oposición, negando el lado femenino, es decir, el hombre debe convencer a los demás una situación viril que ha generado violencia y discriminación que se sustentan en dichos y acciones cada vez más agresivas y que a veces no vemos.

Según la doctora Nancy Chodorow, el origen de la identidad masculina sería más negativoque positivo, pues pone el acento en la diferenciación, en la distancia que establece con respecto a las demás personas y en la carencia de una relación afectiva. Se buscanmodelos de masculinidad basados en una concepción igualitaria y no jerárquica, cuyo sentido se mida "no en sus éxitos personales, sino en la manera en que su labor revierta en la mejora de la sociedad a la que se sienta responsablemente vinculado". Por lo cual, hay que llevar este nuevo concepto a la imaginación para crear masculinidades positivas que impliquen situaciones reales de incidencia directa, pero con una orientación realmente democrática, para resolver diferencias, encontrar consensos o decidir sobre la nueva conformación de identidad masculina que sea ejemplo para los individuos basados en la igualdad y la sana convivencia.

Así que judicializar el tema de la paridad es a mi parecer adecuado para que se determine, (no quién tiene la razón) cuales son los criterios más progresistas en torno al tema que resalten derechos a la luz de interpretaciones distintas, lo que es adecuado, pues está en las reglas y normas la idea de que esos temas se determinen por medio de análisis imparciales de órganos autónomos jurisdiccionales que nos den pautas para tomar un rumbo que esté lo más apegado a la legalidad y a la vez a la defensa de los derechos político electorales de la ciudadanía.

Ejercitar la vida en democracia y legitimar las decisiones de un colectivo judicializando temas y acciones de diferentes actores y autoridades es lo correcto, y nos dará certeza en la actividad a realizar para que tengan la confianza, de que no hay confrontación y si hay propuesta el diálogo y construcción de criterios que ayuden al proceso electoral.

  • *Consejero electoral