/ lunes 7 de mayo de 2018

Estrategia operativa policial

El gobierno estatal dio un importante giro en su estrategia de seguridad pública. No paró en proyectar inversión en tecnología y equipo, ni en la dignificación policial, mucho menos en plantear el endurecimiento de penas. Convocó a la Primera Reunión de la Conferencia Estatal de Directores de Seguridad Pública Municipal.

Se trata de un golpe de timón importante en la lucha contra la delincuencia.

Esta conferencia, la primera que se realiza en el país, es un modelo innovador de coordinación desde los municipios que posibilita el fortalecimiento de las capacidades institucionales para hacer frente a la inseguridad.

Así, la administración de Marco Mena da un paso importante en el diseño de un instrumento para encarar los eventos delincuenciales, los cuales se registran en gran medida en las colonias y las comunidades.

Definitivamente, los gobiernos municipales deben asumir su responsabilidad en las tareas de seguridad, y esta debe articularse con las acciones que desarrollan los gobiernos estatal y federal.

Es así como, con la Conferencia Estatal de Directores de Seguridad Pública Municipal, se podrá avanzar en un esquema de corresponsabilidad en el que las autoridades municipales jugarán un papel fundamental para enfrentar la problemática delictiva.

Por fortuna, ha habido receptividad, por parte de las instituciones federales de seguridad y las fuerzas armadas, para atender los retos específicos, como el robo de hidrocarburo. Pero ahora, con una participación más activa de las comunas, será posible blindar con más efectividad las zonas limítrofes de Tlaxcala.

De cara a este escenario, se espera que los presidentes municipales contribuyan a lograr mejores condiciones en rubros como capacitación y equipamiento de sus fuerzas policiales, y le apuesten al trabajo de prevención del delito, echando mano de los mecanismos a su alcance para garantizar a la población que se castigará a los responsables de cualquier actividad ilícita.

Álvaro Vizcaíno Zamora, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, y Alejandro Chanes Ortiz, jefe de la Oficina de la Comisión Nacional de Seguridad, coincidieron en que este modelo institucionalizado, que cuenta con estatutos sólidos para facilitar la labor de sus miembros, debe ser replicado en otras entidades para reforzar las condiciones de seguridad a corto y largo plazo.

En definitiva, las fuerzas del orden deben contar con las condiciones necesarias para ejercer sus funciones, y con esta conferencia, Tlaxcala avanzar en esa ruta, en la que se tiene claro que la seguridad es una tarea compartida entre los tres órdenes de gobierno en la que debe prevalecer la colaboración, la coordinación y la corresponsabilidad.

La amnistía a los delincuentes no puede ser una opción, cuando los ciudadanos exigen que la justicia debe hacerse presente de manera cotidiana en su vida.

La sola idea del perdón a los criminales resulta ofensiva para las víctimas del delito, de modo que la autoridad tiene que buscar la cohesión y el agrupamiento en torno a una estrategia operativa policial que dé respuesta a la ciudadanía, como se está consiguiendo en Tlaxcala.



HIPER:

Definitivamente, los gobiernos municipales deben asumir su responsabilidad en las tareas de seguridad, y esta debe articularse con las acciones que desarrollan los gobiernos estatal y federal. Es así como, con la Conferencia Estatal de Directores de Seguridad Pública Municipal, se podrá avanzar en un esquema de corresponsabilidad en el que las autoridades municipales jugarán un papel fundamental para enfrentar la problemática delictiva.

El gobierno estatal dio un importante giro en su estrategia de seguridad pública. No paró en proyectar inversión en tecnología y equipo, ni en la dignificación policial, mucho menos en plantear el endurecimiento de penas. Convocó a la Primera Reunión de la Conferencia Estatal de Directores de Seguridad Pública Municipal.

Se trata de un golpe de timón importante en la lucha contra la delincuencia.

Esta conferencia, la primera que se realiza en el país, es un modelo innovador de coordinación desde los municipios que posibilita el fortalecimiento de las capacidades institucionales para hacer frente a la inseguridad.

Así, la administración de Marco Mena da un paso importante en el diseño de un instrumento para encarar los eventos delincuenciales, los cuales se registran en gran medida en las colonias y las comunidades.

Definitivamente, los gobiernos municipales deben asumir su responsabilidad en las tareas de seguridad, y esta debe articularse con las acciones que desarrollan los gobiernos estatal y federal.

Es así como, con la Conferencia Estatal de Directores de Seguridad Pública Municipal, se podrá avanzar en un esquema de corresponsabilidad en el que las autoridades municipales jugarán un papel fundamental para enfrentar la problemática delictiva.

Por fortuna, ha habido receptividad, por parte de las instituciones federales de seguridad y las fuerzas armadas, para atender los retos específicos, como el robo de hidrocarburo. Pero ahora, con una participación más activa de las comunas, será posible blindar con más efectividad las zonas limítrofes de Tlaxcala.

De cara a este escenario, se espera que los presidentes municipales contribuyan a lograr mejores condiciones en rubros como capacitación y equipamiento de sus fuerzas policiales, y le apuesten al trabajo de prevención del delito, echando mano de los mecanismos a su alcance para garantizar a la población que se castigará a los responsables de cualquier actividad ilícita.

Álvaro Vizcaíno Zamora, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, y Alejandro Chanes Ortiz, jefe de la Oficina de la Comisión Nacional de Seguridad, coincidieron en que este modelo institucionalizado, que cuenta con estatutos sólidos para facilitar la labor de sus miembros, debe ser replicado en otras entidades para reforzar las condiciones de seguridad a corto y largo plazo.

En definitiva, las fuerzas del orden deben contar con las condiciones necesarias para ejercer sus funciones, y con esta conferencia, Tlaxcala avanzar en esa ruta, en la que se tiene claro que la seguridad es una tarea compartida entre los tres órdenes de gobierno en la que debe prevalecer la colaboración, la coordinación y la corresponsabilidad.

La amnistía a los delincuentes no puede ser una opción, cuando los ciudadanos exigen que la justicia debe hacerse presente de manera cotidiana en su vida.

La sola idea del perdón a los criminales resulta ofensiva para las víctimas del delito, de modo que la autoridad tiene que buscar la cohesión y el agrupamiento en torno a una estrategia operativa policial que dé respuesta a la ciudadanía, como se está consiguiendo en Tlaxcala.



HIPER:

Definitivamente, los gobiernos municipales deben asumir su responsabilidad en las tareas de seguridad, y esta debe articularse con las acciones que desarrollan los gobiernos estatal y federal. Es así como, con la Conferencia Estatal de Directores de Seguridad Pública Municipal, se podrá avanzar en un esquema de corresponsabilidad en el que las autoridades municipales jugarán un papel fundamental para enfrentar la problemática delictiva.

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