Alberto Jaume Torres*
El próximo 1 de julio de 2018 los mexicanos tendremos la oportunidad de elegir quien será presidente de la República, 128 senadores y 500 diputados federales; adicionalmente en 30 estados se elegirán 8 gobernadores, un Jefe de Gobierno, 983 diputaciones locales, mil 798 Cargos de alcaldías, síndicos, regidores y Juntas Municipales.
Aunque el Proceso Electoral Federal inició formalmente el 8 de septiembre, fue este pasado 30 de marzo cuando iniciaron las campañas para elegir al presidente de los Estados Unidos Mexicanos, y concluirán el día 27 de junio; con este inicio de las campañas la actividad Política en el país se podrá observar en toda su magnitud; habrá quienes manifiestan hartazgo por los excesos desplegados por los diferentes partidos políticos y candidatos, habrá otros que vean las campañas electorales como herramientas válidas de los candidatos para posicionar sus planteamientos ante la ciudadanía, y a la democracia como la forma de resolver conflictos y lograr la representación mediante el principio de la mayoría.
La elección de ese cuantioso número de cargos es un gran reto para cualquier institución, no solo en México sino en cualquier parte del mundo, y más aun resolverlas con el mínimo de violencia, tal y como ha sido en los últimos años
Las elecciones en México han sido cuestionadas en los últimos procesos electorales, pareciera que nadie recuerda de cómo funcionaba el Sistema Político Mexicano antes del Instituto Federal Electoral (IFE) y bajo los lineamientos del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) de 1990. Si lograr la confianza en México ha sido caro, la desconfianza siempre será de mayor costo y mayor riesgo, no faltan quienes opinan que la democracia en México es la más cara del mundo, sin preguntarnos si quiera qué sería si no la tuviéramos, ¿acaso sería más barato? Es algo que dejamos a la reflexión del lector.
Para esta jornada electoral se prevén resultados muy cerrados entre los candidatos a la Presidencia, pero lo único real es que solo tendremos un ganador y la frustración y el enojo de quienes no obtengan la representación no debería ser causa de división entre la sociedad mexicana; sin duda tendremos de todos los colores en los diferentes cargos de representación y eso es algo que se le debe a la tan cuestionada democracia.
Hoy por hoy la moneda está en el aire, pues esta elección, la más grande en la historia de México, sin duda pondrá a prueba a todos las instituciones del país, incluyendo a las partidistas; la sociedad mexicana debe estar consciente de los riesgos que existe en la no participación y más en la no aceptación de resultados obtenidos en las urnas.
En esta Elección participamos todos: INE, los Organismos Públicos Locales (OPL), Partidos Políticos, Candidatos, autoridades gubernamentales, ciudadanos en sus diversas modalidades (Funcionarios de casilla, ciudadanos con derecho a votar y Observadores Electorales), todos somos responsables de los resultados y más de lo que queremos para nuestro país.
Por lo anterior, invito a todos candidatos que participan en esta elección a conducirse dentro de la legalidad, respetando espacios y personas; a la ciudadanía en general a participar, ya que de una u otra manera todos somos responsables de fortalecer a nuestras instituciones y la vida democrática del país. A los mexicanos que residen fuera del país hacerles hincapié en que hoy pueden votar desde el extranjero, todos tenemos la oportunidad de aportar en el futuro que queremos para México.
Vocal Ejecutivo de la Junta Distrital 03
