/ jueves 2 de agosto de 2018

La participación ciudadana en el Proceso Electoral Federal 2017-2018

César Lara Cano*

La participación de la ciudadanía es fundamental en un sistema democrático que promueve la construcción de una sociedad activa que ayuda a impulsar cualquier aspecto de la vida social, económica, cultural o política, enriquece la acción del gobierno y la dota de eficacia; al mismo tiempo, este derecho ciudadano ayuda a generar un equipo de gobierno más exigente y de más calidad.

La acción participativa de la sociedad se construye en una interacción entre la ciudadanía y las instituciones con la finalidad de que la primera pueda llevar un seguimiento del trabajo y las actividades de los gobernantes, así como de los asuntos públicos, además de colaborar en la formación de una mejor sociedad. Con los procesos participativos las decisiones de los gobernantes generan legitimidad, así como el respeto entre la administración y la ciudadanía.

Durante el Proceso Electoral Federal 2017- 2018, el Instituto Nacional Electoral (INE) promovió la participación ciudadana, primeramente, para desempeñar el cargo de Capacitador Asistente-Electoral (CAE), de Supervisor Electoral (SE) a miles de ciudadanos que se desempeñaron como funcionarios de mesas directivas de casillas electorales, a ciudadanos que actuaron como observadores electorales y llegar así al día de la jornada electoral del pasado primero de julio en que se registró una amplia participación ciudadana en el país, en que según las estadísticas 56.4 millones de la ciudadanía ejerció su derecho al sufragio, con lo que se alcanzó la cifra más alta en las elecciones presidenciales de 1994 a 2012.

De los datos aportados en las actas electorales se deduce que se registró una participación ciudadana del 63.4 por ciento de la Lista Nominal de Electores que se integra por 89.1 millones de ciudadanos. Ahora el reto es disminuir ese poco más del 30 por ciento de ciudadanos inscritos en la Lista Nominal que se abstiene de ejercer su derecho al sufragio, reto en el que se debe involucrar a diversas instituciones gubernamentales, académicas, organizaciones de la sociedad civil, así como los partidos políticos.

Por tal razón, una de las tareas del INE es la construcción de ciudadanía que, con la colaboración de diversas instituciones, deberá desarrollar las actividades correspondientes con la finalidad de que la ciudadanía tenga el conocimiento que le ayude a tomar buenas decisiones en el desarrollo de diversas estrategias en que se promueva el voto, se disminuya el nivel de abstencionismo y se consolide nuestro sistema democrático.


*Vocal Ejecutivo de la Junta Distrital 02

Instituto Nacional Electoral en Tlaxcala


César Lara Cano*

La participación de la ciudadanía es fundamental en un sistema democrático que promueve la construcción de una sociedad activa que ayuda a impulsar cualquier aspecto de la vida social, económica, cultural o política, enriquece la acción del gobierno y la dota de eficacia; al mismo tiempo, este derecho ciudadano ayuda a generar un equipo de gobierno más exigente y de más calidad.

La acción participativa de la sociedad se construye en una interacción entre la ciudadanía y las instituciones con la finalidad de que la primera pueda llevar un seguimiento del trabajo y las actividades de los gobernantes, así como de los asuntos públicos, además de colaborar en la formación de una mejor sociedad. Con los procesos participativos las decisiones de los gobernantes generan legitimidad, así como el respeto entre la administración y la ciudadanía.

Durante el Proceso Electoral Federal 2017- 2018, el Instituto Nacional Electoral (INE) promovió la participación ciudadana, primeramente, para desempeñar el cargo de Capacitador Asistente-Electoral (CAE), de Supervisor Electoral (SE) a miles de ciudadanos que se desempeñaron como funcionarios de mesas directivas de casillas electorales, a ciudadanos que actuaron como observadores electorales y llegar así al día de la jornada electoral del pasado primero de julio en que se registró una amplia participación ciudadana en el país, en que según las estadísticas 56.4 millones de la ciudadanía ejerció su derecho al sufragio, con lo que se alcanzó la cifra más alta en las elecciones presidenciales de 1994 a 2012.

De los datos aportados en las actas electorales se deduce que se registró una participación ciudadana del 63.4 por ciento de la Lista Nominal de Electores que se integra por 89.1 millones de ciudadanos. Ahora el reto es disminuir ese poco más del 30 por ciento de ciudadanos inscritos en la Lista Nominal que se abstiene de ejercer su derecho al sufragio, reto en el que se debe involucrar a diversas instituciones gubernamentales, académicas, organizaciones de la sociedad civil, así como los partidos políticos.

Por tal razón, una de las tareas del INE es la construcción de ciudadanía que, con la colaboración de diversas instituciones, deberá desarrollar las actividades correspondientes con la finalidad de que la ciudadanía tenga el conocimiento que le ayude a tomar buenas decisiones en el desarrollo de diversas estrategias en que se promueva el voto, se disminuya el nivel de abstencionismo y se consolide nuestro sistema democrático.


*Vocal Ejecutivo de la Junta Distrital 02

Instituto Nacional Electoral en Tlaxcala