El Presidente elegido del vecino país del norte, Joe Biden, hace patente un deseo admirable cuando ejerza funciones oficiales, se trata de una disposición de gran contenido humano al defender el derecho de los niños y padres de familia de estar unidos. Derecho humano quebrantado en forma brutal por el actual presidente de los Estados Unidos al ordenar la separación de niños de sus padres (entre ellos muchos mexicanos) los que a la fecha no saben del paradero ni de los padres de sus hijos y mucho menos de los hijos de sus padres. Se sabe en primer lugar por las noticias que los niños fueron confinados en celdas sin la protección de su madre o de su padre, los que a la fecha (en el caso de los niños) están confinados en diferentes lugares de la Unión Americana, lejos del amor materno. Los ciudadanos que han visitado a grupos de niños separados de sus padres informan que existen muchos infantes que con un llanto profundamente triste imploran la presencia de su madre o de su padre, sin que ésta dicha imploración tenga respuesta. El aspecto humano del señor Biden lo ha expuesto ante su pueblo prometiendo regresar al seno familiar, tanto a padres como a hijos que ahora se encuentran separados, y se da por medio de una comisión gubernamental, la que se ocupe por la búsqueda tanto de padres como de hijos para poder unificarlos, por lo tanto, dicha comisión tendrá el oficio de buscar la educación tanto de los hijos para ser entregados a su respectiva madre o padre. Es un mensaje halagador lleno de fraternidad y de amor hacia el núcleo familiar del ser humano.
Los medios que han comunicado hechos históricos han documentado de las atrocidades cometidas por la Alemania nazi durante la II Guerra Mundial, las que dejan huella indeleble en la memoria de quien se ha enterado. Memoria histórica que reseña uno de los actos más deleznables que se cometieron contra la humanidad al separar a sus tiernos hijos de los padres, los que todavía merecían protección maternal, niños que ignoraron que sus padres eran conducidos hacia la muerte mediante metralla o por medio de gases letales para ser posteriormente conducidos a hornos crematorios.
¡Increíble! A 75 años de distancia se ejerce en Estados Unidos la separación de familias violando los Derechos Humanos proclamados por la Organización de Naciones Unidas, acciones negativas que no deben repetirse jamás porque actualmente existen leyes protectoras de los Derechos Humanos entre ellos el derecho de crear una familia.
Lo notable de esta acción reprobable del actual gobierno del norte del país es que no hubo alguna manifestación de parte de los países para protestar por dicha acción numinosa en contra de la humanidad.
Otra acción positiva que pretende el Señor Biden llevar a acabo es la aceptación de eliminar de la industria de ese país las fabricas que emiten gases venenosos, los que han destruido la capa de ozono, cuyos orificios han producido por medio de rayos solares enfermedades letales que padecen todos los seres vivientes de la tierra.
El citado personaje se integrará a los países que combaten la producción de los gases destructores del ozono comprometiéndose y utilizar otros medios fabriles para sanear la atmósfera. La propuesta del presidente electo es a todas luces de gran beneficio para todos los seres vivientes de nuestro globo terráqueo, la decisión gubernamental del señor Biden es ejemplo para otras naciones que continúan violando a la naturaleza.
México, así como otros países cuyos nacionales padecen el mismo martirio de la separación de sus seres queridos, se encuentran a la expectativa de la llegada de la aplicación humana vigente en el vecino país del norte.
Se sabe que las emigraciones hacia otros países son obligadas por la miseria, el hambre y la injusticia que prevalecen en sus áreas nacionales, la mayor parte de emigrantes que solicitan entrar a Norteamérica es por motivo de trabajo y de ninguna manera para dedicarse al patrocinio o al trafico de enervantes. Su aspiración es satisfacer sus necesidades elementales con el propósito de darle mejoría a la vida familiar.
