/ sábado 30 de noviembre de 2019

Los Avatares de Nuestro Tiempo | Un año entre presiones

La inauguración de la modernidad marca la pauta del ingreso del humanismo y con ello la apertura para centrar al “hombre” en el estudio y la generación de conocimiento desde la perspectiva fáctica, también desde la óptica del poder, se inaugura a través de Nicolás Maquiavelo el estudio metódico de la política.

Por ello, está demás decir que es un despropósito y error -por demás evidente- reducir la obra de este autor a un símil de manual o guía para obtener fines y objetivos sin la consideración ética de los medios o mecanismos para hacerlo. Empero, es real que Maquiavelo, tras su experiencia como funcionario de los “Médici” en Florencia entró a la descripción real -no así idea- de lo que es la política; y rescató -entro muchos puntos relevantes- que el reformador enfrenta problemas y el puerto de éxito está en relativa imposibilidad, en tanto que: “Nada hay más difícil de llevar a cabo, ni de éxito más dudoso, ni más peligroso de manejar, que iniciar un nuevo orden de cosas. El reformador encuentra enemigos en todos aquéllos que no se beneficien del nuevo orden, y sólo tibios partidarios en aquellos que podrían beneficiarse de aquél”.

Justo en esta dimensión argumentativa, se explica el estado actual de la política en México tras la elección del Presidente Andrés Manuel López Obrador. Hoy, tras un año de su toma de protesta, se pueden señalar múltiples aciertos, así como errores; pero sobre todo ruido ante los cambios y la movilización de las élites políticas ante la perdida de espacios de incidencia y participación real.

También resulta ilusorio pensar que el cambio es siempre positivo, la oposición ante el reformador no necesariamente es impulsado por grupos fácticos en contra del desarrollo social y económico del país, sino también por la organización de la sociedad civil que pugna por causas legítimas y argumenta ante la acción u omisión de las organizaciones gubernamentales. Por ello, los cambios que se han generado enfrentan oposiciones férreas que defienden sus intereses y demandas.

  • Hoy, tras un año de su toma de protesta, se pueden señalar múltiples aciertos, así como errores; pero sobre todo ruido ante los cambios y la movilización de las élites políticas.

Por ello es factible aseverar que este primer año de gobierno ha estado repleto de presiones no solamente por la confrontación con grupos políticos, sino por los tópicos en materia de políticas públicas que se han constituido como problema. El mayor, seguramente es la seguridad pública y el crecimiento de los delitos de alto impacto, en los que las estadísticas demuestran la falta de elementos estratégicos para hacer frente a esta condición social.

Además, en el tema económico hay una multiplicad de retos, algunos de los cuales en los que escapan del ámbito de acción nacional, por ejemplo, el caso del renovado Tratado de Libre Comercio de América del Norte (T-MEC), el cual está pendiente de aprobación en los respectivos congresos de Estados Unidos y Canadá.

Es verídico señalar que simultáneamente a una oposición genuina, hay una oposición a los proyectos estratégicos de este gobierno en virtud de que afecta intereses que se encontraban enquistados en el seno de las instituciones públicas. En tanto, este año bien puede definirse como el año de las presiones.

Facebook: Luis Enrique Bermúdez Cruz

Twitter: @EnriqueBermC

La inauguración de la modernidad marca la pauta del ingreso del humanismo y con ello la apertura para centrar al “hombre” en el estudio y la generación de conocimiento desde la perspectiva fáctica, también desde la óptica del poder, se inaugura a través de Nicolás Maquiavelo el estudio metódico de la política.

Por ello, está demás decir que es un despropósito y error -por demás evidente- reducir la obra de este autor a un símil de manual o guía para obtener fines y objetivos sin la consideración ética de los medios o mecanismos para hacerlo. Empero, es real que Maquiavelo, tras su experiencia como funcionario de los “Médici” en Florencia entró a la descripción real -no así idea- de lo que es la política; y rescató -entro muchos puntos relevantes- que el reformador enfrenta problemas y el puerto de éxito está en relativa imposibilidad, en tanto que: “Nada hay más difícil de llevar a cabo, ni de éxito más dudoso, ni más peligroso de manejar, que iniciar un nuevo orden de cosas. El reformador encuentra enemigos en todos aquéllos que no se beneficien del nuevo orden, y sólo tibios partidarios en aquellos que podrían beneficiarse de aquél”.

Justo en esta dimensión argumentativa, se explica el estado actual de la política en México tras la elección del Presidente Andrés Manuel López Obrador. Hoy, tras un año de su toma de protesta, se pueden señalar múltiples aciertos, así como errores; pero sobre todo ruido ante los cambios y la movilización de las élites políticas ante la perdida de espacios de incidencia y participación real.

También resulta ilusorio pensar que el cambio es siempre positivo, la oposición ante el reformador no necesariamente es impulsado por grupos fácticos en contra del desarrollo social y económico del país, sino también por la organización de la sociedad civil que pugna por causas legítimas y argumenta ante la acción u omisión de las organizaciones gubernamentales. Por ello, los cambios que se han generado enfrentan oposiciones férreas que defienden sus intereses y demandas.

  • Hoy, tras un año de su toma de protesta, se pueden señalar múltiples aciertos, así como errores; pero sobre todo ruido ante los cambios y la movilización de las élites políticas.

Por ello es factible aseverar que este primer año de gobierno ha estado repleto de presiones no solamente por la confrontación con grupos políticos, sino por los tópicos en materia de políticas públicas que se han constituido como problema. El mayor, seguramente es la seguridad pública y el crecimiento de los delitos de alto impacto, en los que las estadísticas demuestran la falta de elementos estratégicos para hacer frente a esta condición social.

Además, en el tema económico hay una multiplicad de retos, algunos de los cuales en los que escapan del ámbito de acción nacional, por ejemplo, el caso del renovado Tratado de Libre Comercio de América del Norte (T-MEC), el cual está pendiente de aprobación en los respectivos congresos de Estados Unidos y Canadá.

Es verídico señalar que simultáneamente a una oposición genuina, hay una oposición a los proyectos estratégicos de este gobierno en virtud de que afecta intereses que se encontraban enquistados en el seno de las instituciones públicas. En tanto, este año bien puede definirse como el año de las presiones.

Facebook: Luis Enrique Bermúdez Cruz

Twitter: @EnriqueBermC