/ martes 11 de enero de 2022

Los retos del 2022

El país enfrenta retos importantes en materia de economía, seguridad y salud, retos agravados por la incapacidad para ejercer un gobierno coherente y a la altura que demanda México.

No estamos mejor y ya sabemos por quién. Durante más de doce años, el hoy presidente de México se dedicó a recorrer el territorio nacional con un mensaje combativo, que afirmaba que las cosas no se estaban haciendo bien. López Obrador comprometió su palabra diciendo que, de ganar la elección del 2018, las cosas cambiarían para bien en México. ¡Nada más falso!

Nuestra economía enfrenta hoy la inflación más alta de los últimos 20 años. Los mexicanos no veíamos un alza de precios tan estruendosa como la que tenemos ahora.

  • Ha faltado una correcta dirección de las finanzas en México, el dispendio del dinero público, los egresos por encima de los ingresos y la incertidumbre en los mercados a partir la política hacendaria y fiscal de este gobierno han estancado al país desde adentro, en un momento complejo para la economía internacional a causa de la pandemia.

No ha habido medidas contracíclicas que permitan retomar el camino, al contrario, la toma de decisiones continúa siendo populista y basada en los “otros datos” ajenos a la realidad que vivimos.

Abrazos y balazos

No ha servido de nada “acusar a los delincuentes con sus mamás”. Las cifras de homicidios dolosos en México siguen en aumento, la política de “abrazos, no balazos” solo sirvió como una tregua entre el gobierno de la república y la delincuencia organizada.

Tan solo en lo que va de este 2022 las cifras ya rebasan los 475 homicidios dolosos en México, y el número de víctimas en comparación con los sexenios anteriores, es visiblemente más alto.

Es urgente un replanteamiento de la estrategia de seguridad, pero también es fundamental que la Fiscalía General de Justicia deje de ser el operador político del gobierno en turno, para enfocarse en resolver la inseguridad que va en franco ascenso.

Más abrazos, más contagios

A poco más de 660 días de la primera defunción en México por Covid-19 y con al menos 300 mil víctimas mortales de esta pandemia, el gobierno de México sigue sin tomar las medidas necesarias para enfrentar la emergencia de una mejor manera.

Pese al avance de Ómicron, sigue habiendo falta de medidas más estrictas en nuestras fronteras, no hay el número de pruebas suficientes, ni se han tomado decisiones pertinentes para evitar la propagación del virus, lo que pone una vez más en riesgo al sistema de salud pública frente a la tercera ola de SarsCov2.

Estamos pues, ante un gobierno superado por las circunstancias. Los mexicanos merecemos tener Estado con visión y claridad del rumbo que debe tomar nuestro país, que no se base en ocurrencias y que se aleje del populismo, pero eso no ocurrirá mientras la 4T continúe gobernando.

  • Agradezco el favor de su lectura.

El país enfrenta retos importantes en materia de economía, seguridad y salud, retos agravados por la incapacidad para ejercer un gobierno coherente y a la altura que demanda México.

No estamos mejor y ya sabemos por quién. Durante más de doce años, el hoy presidente de México se dedicó a recorrer el territorio nacional con un mensaje combativo, que afirmaba que las cosas no se estaban haciendo bien. López Obrador comprometió su palabra diciendo que, de ganar la elección del 2018, las cosas cambiarían para bien en México. ¡Nada más falso!

Nuestra economía enfrenta hoy la inflación más alta de los últimos 20 años. Los mexicanos no veíamos un alza de precios tan estruendosa como la que tenemos ahora.

  • Ha faltado una correcta dirección de las finanzas en México, el dispendio del dinero público, los egresos por encima de los ingresos y la incertidumbre en los mercados a partir la política hacendaria y fiscal de este gobierno han estancado al país desde adentro, en un momento complejo para la economía internacional a causa de la pandemia.

No ha habido medidas contracíclicas que permitan retomar el camino, al contrario, la toma de decisiones continúa siendo populista y basada en los “otros datos” ajenos a la realidad que vivimos.

Abrazos y balazos

No ha servido de nada “acusar a los delincuentes con sus mamás”. Las cifras de homicidios dolosos en México siguen en aumento, la política de “abrazos, no balazos” solo sirvió como una tregua entre el gobierno de la república y la delincuencia organizada.

Tan solo en lo que va de este 2022 las cifras ya rebasan los 475 homicidios dolosos en México, y el número de víctimas en comparación con los sexenios anteriores, es visiblemente más alto.

Es urgente un replanteamiento de la estrategia de seguridad, pero también es fundamental que la Fiscalía General de Justicia deje de ser el operador político del gobierno en turno, para enfocarse en resolver la inseguridad que va en franco ascenso.

Más abrazos, más contagios

A poco más de 660 días de la primera defunción en México por Covid-19 y con al menos 300 mil víctimas mortales de esta pandemia, el gobierno de México sigue sin tomar las medidas necesarias para enfrentar la emergencia de una mejor manera.

Pese al avance de Ómicron, sigue habiendo falta de medidas más estrictas en nuestras fronteras, no hay el número de pruebas suficientes, ni se han tomado decisiones pertinentes para evitar la propagación del virus, lo que pone una vez más en riesgo al sistema de salud pública frente a la tercera ola de SarsCov2.

Estamos pues, ante un gobierno superado por las circunstancias. Los mexicanos merecemos tener Estado con visión y claridad del rumbo que debe tomar nuestro país, que no se base en ocurrencias y que se aleje del populismo, pero eso no ocurrirá mientras la 4T continúe gobernando.

  • Agradezco el favor de su lectura.