/ jueves 5 de agosto de 2021

Mujeres que saben latín | La descubridora del Francio

Marguerite Catherine Perey nació el 19 de octubre de 1909, fue una química francesa que trabajó junto a la doctora Marie Curie.

Realizó sus estudios en la Facultad de Ciencias Físicas donde obtuvo un doctorado en Ciencias Físicas con honores.

En 1929 comenzó a trabajar como secretaria particular de Curie en el Instituto de Radio de París. Posteriormente pasó a formar parte del Centro Nacional de Investigaciones como agregada de investigación.

De ahí pasó al Instituto de Investigaciones Nucleares donde trabajó como profesora tutelar de química nuclear. Después de la muerte de la doctora Curie, es nombrada radioquímico y comenzó a colaborar con el físisco André-Louis Debierne y la científica Irene Juliot Curie.

Durante este periodo observó una radiación anómala en el elemento actinio, lo cual se consideró que era un nuevo elemento, el número 87 que presentó propiedades correspondientes a un alcalino y que en un principio de denominó Actinio K.

Para poder publicar su descubrimiento como una tesis doctoral se matriculó en la Sorbona, primero asistió al preparatorio de medicina y a módulos de química, física, biología y fisiología, en la universidad esto se consideraba equivalentes a la licenciatura. En su tesis de 1946 renombró el elemento, ya no era Actinio K, sino Francio.

Perey se enfocó en investigar las propiedades físicas, químicas, biológicas de diferentes sustancias radioactivas naturales y artificiales.

Su carrera fue recompensada al obtener el Gran Premio Científico de Paris en 1960 también fue laureada por la Academia de Ciencias de Francia en 1950 y 1969, de igual forma recibió la medalla de plata Lavossier otorgada por la Sociedad de Química de Francia.

En 1962 fue elegida como miembro de la Academia de Ciencias Francesas, fue la primera mujer en conseguirlo. En 1975 murió víctima de cáncer debido al trabajo y manipulación que realizó de sustancias radiactivas

Marguerite Catherine Perey nació el 19 de octubre de 1909, fue una química francesa que trabajó junto a la doctora Marie Curie.

Realizó sus estudios en la Facultad de Ciencias Físicas donde obtuvo un doctorado en Ciencias Físicas con honores.

En 1929 comenzó a trabajar como secretaria particular de Curie en el Instituto de Radio de París. Posteriormente pasó a formar parte del Centro Nacional de Investigaciones como agregada de investigación.

De ahí pasó al Instituto de Investigaciones Nucleares donde trabajó como profesora tutelar de química nuclear. Después de la muerte de la doctora Curie, es nombrada radioquímico y comenzó a colaborar con el físisco André-Louis Debierne y la científica Irene Juliot Curie.

Durante este periodo observó una radiación anómala en el elemento actinio, lo cual se consideró que era un nuevo elemento, el número 87 que presentó propiedades correspondientes a un alcalino y que en un principio de denominó Actinio K.

Para poder publicar su descubrimiento como una tesis doctoral se matriculó en la Sorbona, primero asistió al preparatorio de medicina y a módulos de química, física, biología y fisiología, en la universidad esto se consideraba equivalentes a la licenciatura. En su tesis de 1946 renombró el elemento, ya no era Actinio K, sino Francio.

Perey se enfocó en investigar las propiedades físicas, químicas, biológicas de diferentes sustancias radioactivas naturales y artificiales.

Su carrera fue recompensada al obtener el Gran Premio Científico de Paris en 1960 también fue laureada por la Academia de Ciencias de Francia en 1950 y 1969, de igual forma recibió la medalla de plata Lavossier otorgada por la Sociedad de Química de Francia.

En 1962 fue elegida como miembro de la Academia de Ciencias Francesas, fue la primera mujer en conseguirlo. En 1975 murió víctima de cáncer debido al trabajo y manipulación que realizó de sustancias radiactivas