Hasta el momento solo cinco mujeres latinoamericanas han sido nominadas a la categoría Mejor Actriz en los premios Oscar. Una de ellas es la veracruzana Salma Hayek Jiménez.
Nació el dos de septiembre de 1966 en Coatzacoalcos. Es hija del empresario libanés Sami Hayek Domínguez y de la cantante de ópera Diana Jiménez. Creció en el marco de una familia católica y adinerada, incluso llegó a ser educada en Luisiana, regresó a México y posteriormente se mudó a Texas.
Comenzó la carrera de Relaciones Internacionales, sin embargo, la abandonó para perseguir el sueño de ser actriz. Su primer trabajo actoral fue en 1988 en una obra de teatro llamada Aladino y la lámpara maravillosa, gracias a ello fue invitada a colaborar en la telenovela Primer Amanecer. El éxito llegaría con el protagónico Teresa un año después.
Pese a su evidente ascenso, Hayek dejó México para irse a vivir a Los Ángeles y estudiar actuación. Al principio solo obtuvo papeles pequeños en la televisión y películas. La perseverancia es parte fundamental del éxito. En 1995 Hayek protagonizó junto a Antonio Banderas la película Desesperado de Robert Rodríguez.
A partir de ese momento las oportunidades llovieron y la actriz compartió escena con actores como Penélope Cruz, Matt Damon, Edward Norton.
En 2002 llegó uno de sus éxitos más grandes cuando produjo y protagonizó la película ‘Frida, matices de una pasión’. Gracias a este papel fue nominada como mejor actriz en los premios Oscar, BAFTA y Globo de Oro. No cabe duda de que Hayek es una de las mexicanas más influyentes en Hollywood.
