Aunque pareciera un episodio más de una serie de Netflix, lo que ocurre en el municipio de San Damián Texoloc es la cruda realidad.
Información oficial revela que la familia Covarrubias Cervantes, que ha mantenido el poder por 10 años y 8 meses mediante los hermanos Miguel Ángel y Arturo, además de su madre Maribel, en su conjunto han acumulado un probable daño patrimonial superior a los 22 millones 649 mil 029.14 pesos sin que hasta ahora haya consecuencia legal alguna.
Esa cantidad no incluye los montos de una probable afectación a la hacienda pública que pudo causar Miguel Ángel Covarrubias en el trienio 2014-2016, pues la información ya no está disponible en la página web del Órgano de Fiscalización Superior (OFS) y tampoco la revisión correspondiente a los meses enero-agosto de 2024, que aún está en proceso.
Pese a ello, el todavía diputado local Miguel Ángel Covarrubias Cervantes se aventó la puntada de decir que los legisladores no fiscalizan nada y “todo es una jalada y pérdida de tiempo”, pues ya está cuadrado por el OFS.
El camaleónico diputado tiene la libertad de decir todo lo que considere pertinente,pero hablar cuando ya se va y sólo porque a su hermano Arturo le reprobaron su cuenta pública por observaciones que suman tres millones 326 mil 909 pesos, suena a uno más de sus despechos y resentimientos por no lograr la reelección.
El todavía diputado local Miguel Ángel Covarrubias Cervantes se aventó la puntada de decir que los legisladores no fiscalizan nada y “todo es una jalada y pérdida de tiempo”