/ lunes 14 de junio de 2021

Nada Personal | Legitimidad

Con 305 mil 468 votos, Lorena Cuéllar Cisneros es la gobernadora más votada de la historia de Tlaxcala. Ni el mandatario más admirado por la clase política, Emilio Sánchez Piedras (que ayer cumplió un aniversario luctuoso más) y mucho menos la primera gobernante mujer de la entidad, Beatriz Paredes Rangel, alcanzaron tal porcentaje de legitimidad.

La expectativa es alta y con la constancia que la acredita como Gobernadora Electa -la número 50 desde que el 9 de junio de 1857 asumió el cargo Guillermo Valle- Lorena Cuéllar Cisneros tiene ante sí el gran reto de cumplir todos y cada uno de sus compromisos.

Constancia en mano, la nieta de los exgobernadores Joaquín Cisneros Molina (15 de enero de 1957-14 de enero de 1963) y Crisanto Cuéllar Abaroa (1 de enero de 1970-14 de mayo de 1970) sentenció que desde este 13 de junio habrá “un antes y un después” en Tlaxcala.

Lo dicho por la expriista, experredista, expetista y actual morenista contiene una enorme carga emocional política que deberá legitimar a partir del próximo 1 de septiembre, fecha en la que formalmente asumirá el cargo en sesión solemne del Poder Legislativo.

Sin más, Lorena Cuéllar recibió 49.94 % del total de votos (611 mil 663) emitidos en la jornada comicial del pasado 6 de junio.

Muy atrás quedó su más cercana adversaria, Anabell Ávalos Zempoalteca, quien encabezó la alianza “Unidos por Tlaxcala”, al alcanzar 37.83 %, que representan 231 mil 424 de los sufragios.

De Juan Carlos Sánchez García, Eréndira Jiménez Montiel, Viviana Barbosa Bonola, Liliana Becerril Rojas y Evangelina Paredes Zamora mejor ni hablamos, pues su porcentaje de votación apenas fue de 6.33 %, 2.39 %, 1.99 %, 0.87 % y 0.67 %, respectivamente.

Restan cuatro días para que “Unidos por Tlaxcala” o cualquiera de los contendientes a la gubernatura impugnen, aunque así como se observa, seguramente nadie lo hará.

Y “a toro pasado” algunas de las preguntas son: ¿y las cacareadas adhesiones? ¿Y las encuestas que daban el empate técnico o una ligera ventaja sobre Morena? ¿Y las declinaciones de Becerril y Paredes? ¿Y el apoyo de diputados como el mentado “Chema” Méndez, Rafael Ortega y Víctor Báez? ¿Y la estratega “pierdecampañas” Gisela Rubach? Cuestionamientos todos que en un futuro no muy lejano tendrán respuesta.

Sin duda, Anabell Ávalos Zempoalteca fue una buena candidata, pero en una circunstancia adversa y con una estrategia que, desde el inicio de su campaña, no le favoreció.

Por cierto: ¿de quién habrá sido la idea de salir a las 18:01 horas del 6 de junio a declarar con una ventaja de tres puntos a Anabell Ávalos, a pesar de que aún muchas personas se encontraban votando, así como festejar frente a Palacio de Gobierno un triunfo inexistente? Ya se mencionan nombres.

Seguramente a una semana de la elección para renovar el Poder Ejecutivo, la presidenta municipal capitalina con licencia ha reflexionado lo bueno y lo malo de esta campaña y se repondrá para continuar en el servicio público, pues su currículum es envidiable para cualquier político tlaxcalteca. Tiempo al tiempo.

SIN PENA NI GLORIA

A partir de este lunes, el excandidato de la alianza “Va por México” en el Distrito Electoral Federal 01, Julio César Hernández Mejía, retoma el cargo de Presidente Municipal Constitucional de Apizaco, al no resultar favorecido con el voto popular.

Su regreso al Despacho principal del edificio de 16 de Septiembre, esquina con Cuauhtémoc, sin duda representa un aliciente para muchísimas personas tras el desastroso papel de Carlos Hernández Castillo como alcalde interino, cuyos tres meses de administración pasaron sin pena ni gloria.

Basta observar los servicios básicos como recolección de basura, alumbrado público, inseguridad y bacheo para conocer el pésimo papel de Carlos Hernández quien, eso sí, en sus redes sociales presume a los cuatro vientos lo digno que fue para él ser alcalde por un corto tiempo.

PLURI EN RIESGO

Y ya que hablamos de Apizaco, ojalá el doctor Juan Bernardo López Alducin (excandidato del PRD) le recete a Reyes Ruiz Peña (excandidato del PT) una dosis de vitacilina por aquello de su dolor por la nueva derrota electoral y el riesgo de su hija, Lorena Ruiz, de perder la diputación "pluri" por pedir licencia a destiempo y cometer un presunto delito electoral.

Es claro: en las elecciones se gana o se pierde, pero lamentablemente la mayoría se prepara para ganar y no para perder.

Con 305 mil 468 votos, Lorena Cuéllar Cisneros es la gobernadora más votada de la historia de Tlaxcala. Ni el mandatario más admirado por la clase política, Emilio Sánchez Piedras (que ayer cumplió un aniversario luctuoso más) y mucho menos la primera gobernante mujer de la entidad, Beatriz Paredes Rangel, alcanzaron tal porcentaje de legitimidad.

La expectativa es alta y con la constancia que la acredita como Gobernadora Electa -la número 50 desde que el 9 de junio de 1857 asumió el cargo Guillermo Valle- Lorena Cuéllar Cisneros tiene ante sí el gran reto de cumplir todos y cada uno de sus compromisos.

Constancia en mano, la nieta de los exgobernadores Joaquín Cisneros Molina (15 de enero de 1957-14 de enero de 1963) y Crisanto Cuéllar Abaroa (1 de enero de 1970-14 de mayo de 1970) sentenció que desde este 13 de junio habrá “un antes y un después” en Tlaxcala.

Lo dicho por la expriista, experredista, expetista y actual morenista contiene una enorme carga emocional política que deberá legitimar a partir del próximo 1 de septiembre, fecha en la que formalmente asumirá el cargo en sesión solemne del Poder Legislativo.

Sin más, Lorena Cuéllar recibió 49.94 % del total de votos (611 mil 663) emitidos en la jornada comicial del pasado 6 de junio.

Muy atrás quedó su más cercana adversaria, Anabell Ávalos Zempoalteca, quien encabezó la alianza “Unidos por Tlaxcala”, al alcanzar 37.83 %, que representan 231 mil 424 de los sufragios.

De Juan Carlos Sánchez García, Eréndira Jiménez Montiel, Viviana Barbosa Bonola, Liliana Becerril Rojas y Evangelina Paredes Zamora mejor ni hablamos, pues su porcentaje de votación apenas fue de 6.33 %, 2.39 %, 1.99 %, 0.87 % y 0.67 %, respectivamente.

Restan cuatro días para que “Unidos por Tlaxcala” o cualquiera de los contendientes a la gubernatura impugnen, aunque así como se observa, seguramente nadie lo hará.

Y “a toro pasado” algunas de las preguntas son: ¿y las cacareadas adhesiones? ¿Y las encuestas que daban el empate técnico o una ligera ventaja sobre Morena? ¿Y las declinaciones de Becerril y Paredes? ¿Y el apoyo de diputados como el mentado “Chema” Méndez, Rafael Ortega y Víctor Báez? ¿Y la estratega “pierdecampañas” Gisela Rubach? Cuestionamientos todos que en un futuro no muy lejano tendrán respuesta.

Sin duda, Anabell Ávalos Zempoalteca fue una buena candidata, pero en una circunstancia adversa y con una estrategia que, desde el inicio de su campaña, no le favoreció.

Por cierto: ¿de quién habrá sido la idea de salir a las 18:01 horas del 6 de junio a declarar con una ventaja de tres puntos a Anabell Ávalos, a pesar de que aún muchas personas se encontraban votando, así como festejar frente a Palacio de Gobierno un triunfo inexistente? Ya se mencionan nombres.

Seguramente a una semana de la elección para renovar el Poder Ejecutivo, la presidenta municipal capitalina con licencia ha reflexionado lo bueno y lo malo de esta campaña y se repondrá para continuar en el servicio público, pues su currículum es envidiable para cualquier político tlaxcalteca. Tiempo al tiempo.

SIN PENA NI GLORIA

A partir de este lunes, el excandidato de la alianza “Va por México” en el Distrito Electoral Federal 01, Julio César Hernández Mejía, retoma el cargo de Presidente Municipal Constitucional de Apizaco, al no resultar favorecido con el voto popular.

Su regreso al Despacho principal del edificio de 16 de Septiembre, esquina con Cuauhtémoc, sin duda representa un aliciente para muchísimas personas tras el desastroso papel de Carlos Hernández Castillo como alcalde interino, cuyos tres meses de administración pasaron sin pena ni gloria.

Basta observar los servicios básicos como recolección de basura, alumbrado público, inseguridad y bacheo para conocer el pésimo papel de Carlos Hernández quien, eso sí, en sus redes sociales presume a los cuatro vientos lo digno que fue para él ser alcalde por un corto tiempo.

PLURI EN RIESGO

Y ya que hablamos de Apizaco, ojalá el doctor Juan Bernardo López Alducin (excandidato del PRD) le recete a Reyes Ruiz Peña (excandidato del PT) una dosis de vitacilina por aquello de su dolor por la nueva derrota electoral y el riesgo de su hija, Lorena Ruiz, de perder la diputación "pluri" por pedir licencia a destiempo y cometer un presunto delito electoral.

Es claro: en las elecciones se gana o se pierde, pero lamentablemente la mayoría se prepara para ganar y no para perder.