/ lunes 24 de agosto de 2020

Nada Personal | Presunta corrupción

“Como es arriba, es abajo; como es abajo, es arriba”, dice la Ley Universal de Correspondencia y uno de los siete principios de El Kybalión, documento que afirma ser la esencia de las enseñanzas de Hermes Trismegistus -según la leyenda- guía de Abraham en el antiguo Egipto.

Si bien este pensamiento se remonta a miles de años atrás, los principios que describe pueden aplicarse a un escenario moderno. Por ejemplo, a los videoescándalos difundidos a nivel nacional que revelan la presunta corrupción de expresidentes del país, algunos exsenadores y actuales gobernadores, exdiputados federales y secretarios de Estado.

ARRIBA Y ABAJO

Y “como es arriba, es abajo”, a nivel local también existen muchos personajes de la vida política que han incurrido en probables actos de corrupción.

Para no ir lejos ahí está una diputada acusada por dos alcaldes de pedir “moche” en sus gestiones de obra pública. En el Poder Legislativo la lista es larga y para ahorrar espacio únicamente podríamos decir que son varios los apellidos de quienes presuntamente han caído en la antiquísima práctica del influyentismo.

En alcaldes la lista también es larga, pero la joya de la corona la tiene el de Chiautempan, Héctor Domínguez Rugerio, señalado de multiplicar a todas luces su riqueza económica y bienes desde que se convirtió en autoridad.

Basta recordar que en el primer año de gobierno construyó una residencia en la colonia Reforma para vivir ahí con su familia y, al año siguiente, otra casa en la Privada 5 de Mayo de la misma comunidad, la cual se hizo famosa al ser robadas de su interior 330 lámparas LED que serían colocadas en las calles del municipio.

La construcción de un nuevo rastro para su negocio de carnicerías en el Ejido Tepetlapa de Tlaltelulco, obra suspendida por la compra-venta irregular del predio; la demolición y reconstrucción de la que fue su casa por años en la avenida Arquitectos de Loma Bonita, también clausurada al carecer de permisos del gobierno capitalino; la construcción de unas accesorias sobre la avenida Ferrocarril de Xaxala; la adquisición de una casa atrás de los Baños California, en pleno Centro y lotes en venta en Texcacoac, cerca del recinto ferial, se suman al patrimonio de Domínguez.

Sin olvidar la millonaria inversión en maquinaria para su nueva empresa de construcción, usada en obras públicas municipales, como la que se ejecuta en la Avenida La Paz, con una inversión superior a los 9 millones de pesos.

“Las escaleras se barren de arriba hacia abajo”, ha dicho el presidente Andrés Manuel López Obrador y solo resta esperar que la escoba llegue algún día a Chiautempan para las investigaciones correspondientes y sancionar estos actos.

“Como es arriba, es abajo; como es abajo, es arriba”, dice la Ley Universal de Correspondencia y uno de los siete principios de El Kybalión, documento que afirma ser la esencia de las enseñanzas de Hermes Trismegistus -según la leyenda- guía de Abraham en el antiguo Egipto.

Si bien este pensamiento se remonta a miles de años atrás, los principios que describe pueden aplicarse a un escenario moderno. Por ejemplo, a los videoescándalos difundidos a nivel nacional que revelan la presunta corrupción de expresidentes del país, algunos exsenadores y actuales gobernadores, exdiputados federales y secretarios de Estado.

ARRIBA Y ABAJO

Y “como es arriba, es abajo”, a nivel local también existen muchos personajes de la vida política que han incurrido en probables actos de corrupción.

Para no ir lejos ahí está una diputada acusada por dos alcaldes de pedir “moche” en sus gestiones de obra pública. En el Poder Legislativo la lista es larga y para ahorrar espacio únicamente podríamos decir que son varios los apellidos de quienes presuntamente han caído en la antiquísima práctica del influyentismo.

En alcaldes la lista también es larga, pero la joya de la corona la tiene el de Chiautempan, Héctor Domínguez Rugerio, señalado de multiplicar a todas luces su riqueza económica y bienes desde que se convirtió en autoridad.

Basta recordar que en el primer año de gobierno construyó una residencia en la colonia Reforma para vivir ahí con su familia y, al año siguiente, otra casa en la Privada 5 de Mayo de la misma comunidad, la cual se hizo famosa al ser robadas de su interior 330 lámparas LED que serían colocadas en las calles del municipio.

La construcción de un nuevo rastro para su negocio de carnicerías en el Ejido Tepetlapa de Tlaltelulco, obra suspendida por la compra-venta irregular del predio; la demolición y reconstrucción de la que fue su casa por años en la avenida Arquitectos de Loma Bonita, también clausurada al carecer de permisos del gobierno capitalino; la construcción de unas accesorias sobre la avenida Ferrocarril de Xaxala; la adquisición de una casa atrás de los Baños California, en pleno Centro y lotes en venta en Texcacoac, cerca del recinto ferial, se suman al patrimonio de Domínguez.

Sin olvidar la millonaria inversión en maquinaria para su nueva empresa de construcción, usada en obras públicas municipales, como la que se ejecuta en la Avenida La Paz, con una inversión superior a los 9 millones de pesos.

“Las escaleras se barren de arriba hacia abajo”, ha dicho el presidente Andrés Manuel López Obrador y solo resta esperar que la escoba llegue algún día a Chiautempan para las investigaciones correspondientes y sancionar estos actos.