/ viernes 31 de mayo de 2019

Parte del acontecer nacional

En estos últimos días ha habido noticias cuyo contenido es de interés público se refieren al abasto de medicinas para atención en hospitales, la renuncia de la Secretaria del Medio Ambiente, la subasta de vehículos confiscados, el bloqueo de cuentas mal habidas de Emilio Lozoya Austin pago gubernamental a periodistas y comentaristas de radio y televisión.

El gobierno federal por fin inicia las primeras acciones serias contra los funcionarios del pasado que se dedicaron a delinquir utilizando los bienes de la nación. Por medio del Poder Judicial e investigación de la Unidad de Inteligencia Financiera, se detectó en el Sistema Financiero Nacional e Internacional: “que se llevaron a cabo múltiples operaciones con recursos que no proceden de actividades lícitas y derivados de actos de corrupción”. Todas las negociaciones se hicieron por el citado Lozoya Austin, y según datos aportados por la investigación financiera se hicieron en contubernio de Susana Gilda su hermana y del dueño de Altos Hornos de México, S.A. Alonso Ancira Elizondo, los que de acuerdo con los últimos pasos que está dando el poder judicial, es la captura de dichos personajes, quienes tendrán que responder por fraudes cometidos con recursos financieros de la Nación. De momento ya están congeladas sus cuentas millonarias. De la serie de fraudes a la nación el C. Emilio Lozoya es acusado de haber comprado una planta “chatarra” (según peritos en la materia), productora de fertilizantes, pero… la compra en sí no es lo reprobable, sino el haber comprado la planta inservible pero… a precio exorbitante con dineros de México. Así, dicha compra oficial no fue negocio para el país, sino para el comprador. Esperemos que los jueces que lleven el juicio no los liberen siendo victimarios del país, como en otros cientos de casos.

Respecto a las medicinas que empezaron a escasear en los ámbitos hospitalarios, de debe a la falta de abastecimiento por parte de las compañías surtidoras, quienes recibían un margen de ganancias descomunal en venta de productos, desde luego autorizados por autoridades encargadas de dar el “visto bueno” en los contratos de compraventa.

Se ha señalado que solo funcionarios son corruptos en el caso de la medicina, también están coludidos los agentes vendedores de empresas que aportan medicinas. En este negocio con el que se juega la vida de miles de pacientes del IMSSS e ISSSTE, se encontraba en manos de dos personajes: el que autorizaba el sobre precio y el agente de las vendedoras de medicinas que proponía elevar el costo cuya ganancia se dividía entre ambas partes, ganancias millonarias durante hace quien sabe cuántos años. Desde ahora, las empresas de medicinas tendrán contratos de acuerdo a otras licitaciones. Y si se niegan a vender, entonces el gobierno federal adquirirá medicinas en el extranjero. En esta forma se terminará para siempre la corrupción en venta y compra de medicinas. La ausencia de medicinas se debe a la reducción de venta de administradores de las compañías porque deseaban continuar medrando con la actitud corrupta de autoridades encargadas de autorizar compras. Esa práctica comercial se ha terminado.

En relación a autos vendidos en subasta, los miles de pesos serán aplicados para beneficio material de dos municipios del Estado de Oaxaca (los más pobres), con la noticia gubernamental para continuar esta clase de derrama económica con la futura venta de casas y departamentos confiscados.

El escándalo propiciado por la lista de comentaristas de la prensa, radio y televisión quienes recibieron del poder público dinero por maquillar errores y violaciones constitucionales del gobierno, y que ahora dejaron de practicarse en este gobierno. Causa admiración, conocer quienes han sido los más socorridos por autoridades corruptas del inmediato pasado.

La renuncia de la Secretaria del Medio Ambiente por haber empleado representación de la Presidencia de la República para detener el vuelo de un avión comercial por 35 minutos, porque dicha persona estaba retrasada en la toma del ese vuelo. Esa ex ayudante del Presidente López Obrador, manifestó el abuso del poder, conducta contraria a la frase “La honestidad es nuestra tabla de salvación”, tesis sostenida por el actual Ejecutivo Federal. Primero es la autoridad moral y luego la política.

En estos últimos días ha habido noticias cuyo contenido es de interés público se refieren al abasto de medicinas para atención en hospitales, la renuncia de la Secretaria del Medio Ambiente, la subasta de vehículos confiscados, el bloqueo de cuentas mal habidas de Emilio Lozoya Austin pago gubernamental a periodistas y comentaristas de radio y televisión.

El gobierno federal por fin inicia las primeras acciones serias contra los funcionarios del pasado que se dedicaron a delinquir utilizando los bienes de la nación. Por medio del Poder Judicial e investigación de la Unidad de Inteligencia Financiera, se detectó en el Sistema Financiero Nacional e Internacional: “que se llevaron a cabo múltiples operaciones con recursos que no proceden de actividades lícitas y derivados de actos de corrupción”. Todas las negociaciones se hicieron por el citado Lozoya Austin, y según datos aportados por la investigación financiera se hicieron en contubernio de Susana Gilda su hermana y del dueño de Altos Hornos de México, S.A. Alonso Ancira Elizondo, los que de acuerdo con los últimos pasos que está dando el poder judicial, es la captura de dichos personajes, quienes tendrán que responder por fraudes cometidos con recursos financieros de la Nación. De momento ya están congeladas sus cuentas millonarias. De la serie de fraudes a la nación el C. Emilio Lozoya es acusado de haber comprado una planta “chatarra” (según peritos en la materia), productora de fertilizantes, pero… la compra en sí no es lo reprobable, sino el haber comprado la planta inservible pero… a precio exorbitante con dineros de México. Así, dicha compra oficial no fue negocio para el país, sino para el comprador. Esperemos que los jueces que lleven el juicio no los liberen siendo victimarios del país, como en otros cientos de casos.

Respecto a las medicinas que empezaron a escasear en los ámbitos hospitalarios, de debe a la falta de abastecimiento por parte de las compañías surtidoras, quienes recibían un margen de ganancias descomunal en venta de productos, desde luego autorizados por autoridades encargadas de dar el “visto bueno” en los contratos de compraventa.

Se ha señalado que solo funcionarios son corruptos en el caso de la medicina, también están coludidos los agentes vendedores de empresas que aportan medicinas. En este negocio con el que se juega la vida de miles de pacientes del IMSSS e ISSSTE, se encontraba en manos de dos personajes: el que autorizaba el sobre precio y el agente de las vendedoras de medicinas que proponía elevar el costo cuya ganancia se dividía entre ambas partes, ganancias millonarias durante hace quien sabe cuántos años. Desde ahora, las empresas de medicinas tendrán contratos de acuerdo a otras licitaciones. Y si se niegan a vender, entonces el gobierno federal adquirirá medicinas en el extranjero. En esta forma se terminará para siempre la corrupción en venta y compra de medicinas. La ausencia de medicinas se debe a la reducción de venta de administradores de las compañías porque deseaban continuar medrando con la actitud corrupta de autoridades encargadas de autorizar compras. Esa práctica comercial se ha terminado.

En relación a autos vendidos en subasta, los miles de pesos serán aplicados para beneficio material de dos municipios del Estado de Oaxaca (los más pobres), con la noticia gubernamental para continuar esta clase de derrama económica con la futura venta de casas y departamentos confiscados.

El escándalo propiciado por la lista de comentaristas de la prensa, radio y televisión quienes recibieron del poder público dinero por maquillar errores y violaciones constitucionales del gobierno, y que ahora dejaron de practicarse en este gobierno. Causa admiración, conocer quienes han sido los más socorridos por autoridades corruptas del inmediato pasado.

La renuncia de la Secretaria del Medio Ambiente por haber empleado representación de la Presidencia de la República para detener el vuelo de un avión comercial por 35 minutos, porque dicha persona estaba retrasada en la toma del ese vuelo. Esa ex ayudante del Presidente López Obrador, manifestó el abuso del poder, conducta contraria a la frase “La honestidad es nuestra tabla de salvación”, tesis sostenida por el actual Ejecutivo Federal. Primero es la autoridad moral y luego la política.