/ miércoles 31 de marzo de 2021

Renovar el Congreso para frenar el autoritarismo

Nunca antes ha habido tal necesidad de ejercer los contrapesos de los tres poderes del Estado, como ocurre en tiempos de la cuarta transformación.

Pese a que se decían distinto, resultaron ser un gobierno ineficiente, opaco, corrupto y violatorio del Estado de Derecho.

La mayoría en el Congreso de la Unión le dio al Presidente una oportunidad inmejorable para establecer mecanismos desde la constitución, para mejorar las condiciones de vida de las y los mexicanos, pese a este escenario, ocurrió exactamente lo contrario.

De muy poco ha servido ganar el debate en la cámara, jurídicamente de nada. Poco puede hacer la oposición frente una bancada repleta de aliados que han sido incapaces de levantar la voz, y proponer modificaciones a las reformas que provienen de Palacio Nacional, aún cuando éstas sean en detrimento de las y los ciudadanos y las instituciones.

Dicho sea de paso, las reformas que el Presidente ha planteado, tienen una estricta visión política-electoral, alejada de la política pública y del bienestar para las y los mexicanos.

Han dejado sin recursos al campo, desaparecido fideicomisos, recortado programas sociales como Prospera y Estancias Infantiles; literalmente desahuciaron al campo y redujeron el presupuesto en salud, en pleno año de la pandemia por Covid-19.

Hoy no hay medicinas ni tratamientos; desaparecieron también los refugios de apoyo a mujeres víctimas de violencia dejándolas en el desamparo. Este gobierno ha preferido ser ciego, sordo y mudo ante la violencia contra las mujeres.

Para nadie es desconocido que el Congreso de la Unión se ha convertido en una especie de ventanilla de trámite, en la que la bancada mayoritaria no quiere tocar las iniciativas del Presidente ni con el pétalo de una coma.

México requiere más que nunca contrapesos, necesita que la defensa desde la máxima tribuna de la nación, no sea solamente en el debate, sino que se traduzca en una realidad que permita contener las ocurrencias que vienen desde Palacio Nacional.

Al Propósito…

Este fin de semana tomaron protesta la y los candidatos a diputados federales por la coalición Va por México, integrada por el Partido Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática.

Mi respaldo a cada uno de ellos, quienes en próximos días recorrerán el estado, buscando ganar la confianza de las y los tlaxcaltecas. ¡Enhorabuena!

El INE

No podía dejar pasar la oportunidad, apreciado lector, de reiterar mi respaldo al Instituto Nacional Electoral, atacado desde el gobierno, por el simple hecho de hacer cumplir la ley.

Quienes participamos en política estamos obligados a acatar las reglas establecidas en las normas, no cumplirlas, no nos da derecho alguno para difamar a una institución, que tanto nos ha costado construir a las y los ciudadanos mexicanos.

Mi respeto absoluto al INE, ante los cobardes ataques y calumnias de las que ha sido objeto.

  • *Senadora de la República

Nunca antes ha habido tal necesidad de ejercer los contrapesos de los tres poderes del Estado, como ocurre en tiempos de la cuarta transformación.

Pese a que se decían distinto, resultaron ser un gobierno ineficiente, opaco, corrupto y violatorio del Estado de Derecho.

La mayoría en el Congreso de la Unión le dio al Presidente una oportunidad inmejorable para establecer mecanismos desde la constitución, para mejorar las condiciones de vida de las y los mexicanos, pese a este escenario, ocurrió exactamente lo contrario.

De muy poco ha servido ganar el debate en la cámara, jurídicamente de nada. Poco puede hacer la oposición frente una bancada repleta de aliados que han sido incapaces de levantar la voz, y proponer modificaciones a las reformas que provienen de Palacio Nacional, aún cuando éstas sean en detrimento de las y los ciudadanos y las instituciones.

Dicho sea de paso, las reformas que el Presidente ha planteado, tienen una estricta visión política-electoral, alejada de la política pública y del bienestar para las y los mexicanos.

Han dejado sin recursos al campo, desaparecido fideicomisos, recortado programas sociales como Prospera y Estancias Infantiles; literalmente desahuciaron al campo y redujeron el presupuesto en salud, en pleno año de la pandemia por Covid-19.

Hoy no hay medicinas ni tratamientos; desaparecieron también los refugios de apoyo a mujeres víctimas de violencia dejándolas en el desamparo. Este gobierno ha preferido ser ciego, sordo y mudo ante la violencia contra las mujeres.

Para nadie es desconocido que el Congreso de la Unión se ha convertido en una especie de ventanilla de trámite, en la que la bancada mayoritaria no quiere tocar las iniciativas del Presidente ni con el pétalo de una coma.

México requiere más que nunca contrapesos, necesita que la defensa desde la máxima tribuna de la nación, no sea solamente en el debate, sino que se traduzca en una realidad que permita contener las ocurrencias que vienen desde Palacio Nacional.

Al Propósito…

Este fin de semana tomaron protesta la y los candidatos a diputados federales por la coalición Va por México, integrada por el Partido Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática.

Mi respaldo a cada uno de ellos, quienes en próximos días recorrerán el estado, buscando ganar la confianza de las y los tlaxcaltecas. ¡Enhorabuena!

El INE

No podía dejar pasar la oportunidad, apreciado lector, de reiterar mi respaldo al Instituto Nacional Electoral, atacado desde el gobierno, por el simple hecho de hacer cumplir la ley.

Quienes participamos en política estamos obligados a acatar las reglas establecidas en las normas, no cumplirlas, no nos da derecho alguno para difamar a una institución, que tanto nos ha costado construir a las y los ciudadanos mexicanos.

Mi respeto absoluto al INE, ante los cobardes ataques y calumnias de las que ha sido objeto.

  • *Senadora de la República