/ miércoles 9 de junio de 2021

Resiliencia | La importancia de los Datos Abiertos en materia electoral

En el marco de la discusión sobre una Política Nacional de Datos Abiertos, Transparencia Mexicana planteó la necesidad de ajustar el modelo de información pública disponible para las y los electores en México, la información sobre la forma en la que funciona nuestra democracia debe ser parte central de una Política de Datos Abiertos, la organización civil identificó vacíos importantes en la información pública a la que acceden los electores.

Podemos decir que las democracias viven hoy de los flujos de información; la información pública es necesariamente relevante porque contiene el abuso de propaganda y verdades a medias, cuando hay ausencia de información sobre los candidatos y candidatas, sobre los caracteres y comportamiento de los partidos políticos, sobre el desempeño previo de quienes buscan, por ejemplo su reelección, las y los electores no pueden ejercer cabalmente su derecho a un voto libre e informado.

Desde enero de 2021, Transparencia Mexicana realizó una observación electoral sobre la información disponible para las y los electores en la elección, en el primer corte de la observación electoral que hizo, detectó información escasa para que los electores puedan elegir entre los candidatos y candidatas en el país.

Al participar en la Conferencia Nacional de Datos Abiertos DATACON-2021, el cual es un espacio para el diálogo y la colaboración entre personas e instituciones de distintos sectores, nacionales e internacionales interesadas en la generación, publicación, uso y aprovechamiento de datos abiertos, Transparencia Mexicana insistió en que la Política Nacional de Datos Abiertos debe considerar expresamente la materia electoral, para ello, Transparencia Mexicana activará un grupo de trabajo para que a partir del lunes 14 de junio proponga directrices y elementos para una nueva arquitectura de información electoral que considere datos abiertos para las y los electores.

Transparencia Mexicana identificó algunos diques para el acceso a la información pública en materia electoral.

En relación a la forma en que se publicó la información relevante para las y los electores:

Falta de seguimiento a la normatividad vigente en transparencia, acceso a la información y datos abiertos.

La información no se publicó en multiformato; quienes publicaron información lo hacen principalmente en formatos cerrados como PDF o documentos escaneados, lo que dificulta la extracción y análisis de información para la sociedad y los electores.

La inexistencia de reglas claras para el diseño de bases de datos y sistemas de información pública en materia electoral, dificulta la consulta de información a las y los electores y limita su uso en aplicaciones que faciliten a los electores conocer y comparar a los candidatos.

Respecto a la arquitectura de la información pública en materia electoral:

La existencia de sistemas de información diferentes para cada uno de los estados en donde hubo procesos electorales concurrentes reduce la posibilidad de ser consultada fácilmente por los y las electoras.

Los formatos que los partidos y los y las candidatas utilizaron presentaron problemas de diseño y captura, lo que reduce la calidad de la información de candidatos y candidatas.

Sobre accesibilidad y pertinencia cultural de la información pública en materia electoral:

Los y las votantes tienen treinta y tres usuarios diferentes al consultar información relativa al proceso electoral, por lo que, cada instituto electoral local y el Instituto Nacional Electoral tienen interfaces gráficas diferentes, exhibiendo una gran brecha en niveles de accesibilidad y disponibilidad de información.

Es delicada la falta de uso de lenguaje y formatos culturalmente pertinentes para una nación pluricultural y diversa que habita en un mismo territorio.

Sobre la existencia, apertura y accesibilidad de la información pública en materia electoral:

La lógica de la publicidad y apertura de información electoral está pensada desde y para los partidos políticos, no por, ni para la ciudadanía.

La información publicada en materia electoral está incompleta o, en muchos casos, es inexistente pese a existir obligaciones de ley en la materia.

La observación electoral ha identificado información clasificada como pública, de enorme relevancia para los electores, que está en poder de las autoridades y no se comparte con la ciudadanía.

Finalmente Transparencia Mexicana planteó ajustar el modelo de información para el electorado hacia 2024, toda vez que identifico vacíos importantes de información para las y los electores en 2021, por ello, planteará una revisión integral de la información disponible para el electorado en futuras elecciones, toda vez que si la información es la materia prima de la democracia, debemos asegurarnos de que exista, sea confiable, accesible y culturalmente pertinente para las y los electores.

En el marco de la discusión sobre una Política Nacional de Datos Abiertos, Transparencia Mexicana planteó la necesidad de ajustar el modelo de información pública disponible para las y los electores en México, la información sobre la forma en la que funciona nuestra democracia debe ser parte central de una Política de Datos Abiertos, la organización civil identificó vacíos importantes en la información pública a la que acceden los electores.

Podemos decir que las democracias viven hoy de los flujos de información; la información pública es necesariamente relevante porque contiene el abuso de propaganda y verdades a medias, cuando hay ausencia de información sobre los candidatos y candidatas, sobre los caracteres y comportamiento de los partidos políticos, sobre el desempeño previo de quienes buscan, por ejemplo su reelección, las y los electores no pueden ejercer cabalmente su derecho a un voto libre e informado.

Desde enero de 2021, Transparencia Mexicana realizó una observación electoral sobre la información disponible para las y los electores en la elección, en el primer corte de la observación electoral que hizo, detectó información escasa para que los electores puedan elegir entre los candidatos y candidatas en el país.

Al participar en la Conferencia Nacional de Datos Abiertos DATACON-2021, el cual es un espacio para el diálogo y la colaboración entre personas e instituciones de distintos sectores, nacionales e internacionales interesadas en la generación, publicación, uso y aprovechamiento de datos abiertos, Transparencia Mexicana insistió en que la Política Nacional de Datos Abiertos debe considerar expresamente la materia electoral, para ello, Transparencia Mexicana activará un grupo de trabajo para que a partir del lunes 14 de junio proponga directrices y elementos para una nueva arquitectura de información electoral que considere datos abiertos para las y los electores.

Transparencia Mexicana identificó algunos diques para el acceso a la información pública en materia electoral.

En relación a la forma en que se publicó la información relevante para las y los electores:

Falta de seguimiento a la normatividad vigente en transparencia, acceso a la información y datos abiertos.

La información no se publicó en multiformato; quienes publicaron información lo hacen principalmente en formatos cerrados como PDF o documentos escaneados, lo que dificulta la extracción y análisis de información para la sociedad y los electores.

La inexistencia de reglas claras para el diseño de bases de datos y sistemas de información pública en materia electoral, dificulta la consulta de información a las y los electores y limita su uso en aplicaciones que faciliten a los electores conocer y comparar a los candidatos.

Respecto a la arquitectura de la información pública en materia electoral:

La existencia de sistemas de información diferentes para cada uno de los estados en donde hubo procesos electorales concurrentes reduce la posibilidad de ser consultada fácilmente por los y las electoras.

Los formatos que los partidos y los y las candidatas utilizaron presentaron problemas de diseño y captura, lo que reduce la calidad de la información de candidatos y candidatas.

Sobre accesibilidad y pertinencia cultural de la información pública en materia electoral:

Los y las votantes tienen treinta y tres usuarios diferentes al consultar información relativa al proceso electoral, por lo que, cada instituto electoral local y el Instituto Nacional Electoral tienen interfaces gráficas diferentes, exhibiendo una gran brecha en niveles de accesibilidad y disponibilidad de información.

Es delicada la falta de uso de lenguaje y formatos culturalmente pertinentes para una nación pluricultural y diversa que habita en un mismo territorio.

Sobre la existencia, apertura y accesibilidad de la información pública en materia electoral:

La lógica de la publicidad y apertura de información electoral está pensada desde y para los partidos políticos, no por, ni para la ciudadanía.

La información publicada en materia electoral está incompleta o, en muchos casos, es inexistente pese a existir obligaciones de ley en la materia.

La observación electoral ha identificado información clasificada como pública, de enorme relevancia para los electores, que está en poder de las autoridades y no se comparte con la ciudadanía.

Finalmente Transparencia Mexicana planteó ajustar el modelo de información para el electorado hacia 2024, toda vez que identifico vacíos importantes de información para las y los electores en 2021, por ello, planteará una revisión integral de la información disponible para el electorado en futuras elecciones, toda vez que si la información es la materia prima de la democracia, debemos asegurarnos de que exista, sea confiable, accesible y culturalmente pertinente para las y los electores.