/ martes 21 de junio de 2022

Tintero | La transparencia, una simulación

La transparencia en el manejo del dinero público sirve para dos cosas: para nada

El Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Tlaxcala que es un organismo público autónomo, especializado, independiente, imparcial y colegiado, con personalidad jurídica y patrimonio propios, con plena autonomía técnica, de gestión, capacidad para decidir sobre el ejercicio de su presupuesto y determinar su organización interna, responsable de garantizar, en el ámbito de su competencia, el ejercicio de los derechos de acceso a la información y la protección de datos personales íntegrado con el fin de vigilar el manejo del dinero público, no ha complido su propósito.

El problema es que ninguna autoridad lo respeta, sus recomendaciones son como los llamados a misa, cada quien acude cuando quiere.

No se trata solo de tener un ente de autoridad moral, sino de una institución que garantice el respeto a la ley, pues ahora solo sirve para dar empleo a algunas personas recomendadas por el Congreso del Estado.

Sus reglamentos no tienen “dientes”, es decir, no puede aplicar sanciones a los sujetos supervisados en el manejo del dinero público.

Luego entonces, nadie las atiende. Por ejemplo, más del 50 % de los municipios no publica en su página oficial la nómina de los empleados y en qué aplican el dinero público que manejan del estado.

A diferencia del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones, este ente sí debería desaparecer, porque no abona a la transparencia del recurso económico

Para qué sostener una institución que no sirve para nada. Ese dinero arrojado al cesto de la basura.

La ley es clara, obliga a los municipios, Poderes y organismos a entregar cuentas claras, para eso está el Ógano de Fiscalización del Estado de Tlaxcala.

  • Es innecesario tener una institución que no ayuda en nada, si nadie la respeta y paga salarios muy altos a los comisionados y trabajadores.

La transparencia es responsabilidad de cada autoridad y no debería ser uma simulación.

Casa vez más, circulan versiones de presuntos actos de corrupción y nepotismo, principalmente en municipios. Nadie los sanciona.

Es evidente que ninguna autoridad está dispuesta a transparentar lo que hace.

El temor es que no gusta decir a la gente lo que hacen y cuánto pagan a sus funciomarios y colaboradores.

El sistema de revisión del dinero público invertido en programas de interés social, debe cambiar.

Es necesario crear desde el Congreso del Estado, un organismo que tenga más que autoridad moral, legal

De otra forma seguiremos en los mismo, creyendo que se cumple con la ley, pero no.

Suena complicado porque a nadie le agrada la transparencia, la mayoría de las autoridades es omisa por que no le interesa imformar su forma de operar usar lo que es público.

Pero mientras no haya leyes que castiguen a quienes abusen de los recursos públicos, seguirá la impunidad. Al tiempo

La transparencia en el manejo del dinero público sirve para dos cosas: para nada

El Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Tlaxcala que es un organismo público autónomo, especializado, independiente, imparcial y colegiado, con personalidad jurídica y patrimonio propios, con plena autonomía técnica, de gestión, capacidad para decidir sobre el ejercicio de su presupuesto y determinar su organización interna, responsable de garantizar, en el ámbito de su competencia, el ejercicio de los derechos de acceso a la información y la protección de datos personales íntegrado con el fin de vigilar el manejo del dinero público, no ha complido su propósito.

El problema es que ninguna autoridad lo respeta, sus recomendaciones son como los llamados a misa, cada quien acude cuando quiere.

No se trata solo de tener un ente de autoridad moral, sino de una institución que garantice el respeto a la ley, pues ahora solo sirve para dar empleo a algunas personas recomendadas por el Congreso del Estado.

Sus reglamentos no tienen “dientes”, es decir, no puede aplicar sanciones a los sujetos supervisados en el manejo del dinero público.

Luego entonces, nadie las atiende. Por ejemplo, más del 50 % de los municipios no publica en su página oficial la nómina de los empleados y en qué aplican el dinero público que manejan del estado.

A diferencia del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones, este ente sí debería desaparecer, porque no abona a la transparencia del recurso económico

Para qué sostener una institución que no sirve para nada. Ese dinero arrojado al cesto de la basura.

La ley es clara, obliga a los municipios, Poderes y organismos a entregar cuentas claras, para eso está el Ógano de Fiscalización del Estado de Tlaxcala.

  • Es innecesario tener una institución que no ayuda en nada, si nadie la respeta y paga salarios muy altos a los comisionados y trabajadores.

La transparencia es responsabilidad de cada autoridad y no debería ser uma simulación.

Casa vez más, circulan versiones de presuntos actos de corrupción y nepotismo, principalmente en municipios. Nadie los sanciona.

Es evidente que ninguna autoridad está dispuesta a transparentar lo que hace.

El temor es que no gusta decir a la gente lo que hacen y cuánto pagan a sus funciomarios y colaboradores.

El sistema de revisión del dinero público invertido en programas de interés social, debe cambiar.

Es necesario crear desde el Congreso del Estado, un organismo que tenga más que autoridad moral, legal

De otra forma seguiremos en los mismo, creyendo que se cumple con la ley, pero no.

Suena complicado porque a nadie le agrada la transparencia, la mayoría de las autoridades es omisa por que no le interesa imformar su forma de operar usar lo que es público.

Pero mientras no haya leyes que castiguen a quienes abusen de los recursos públicos, seguirá la impunidad. Al tiempo