/ lunes 28 de septiembre de 2020

Visibilicemos el significado de la discapacidad

Estimados tlaxcaltecas, los saluda su amigo Joel Molina Ramírez La situación de las niñas, niños y adolescentes con discapacidad es un tema que debe ocuparnos a todos.

Representa un grupo de la población mayormente vulnerable, y por ello requiere especial atención.

Los resultados de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018 indican que, en estos menores, actividades como aprender, recordar o concentrarse (40.1%), ver (32.6%) y hablar o comunicarse (30.2%) son las de mayor prevalencia de discapacidad, aunque también se encuentran las relacionadas con escuchar (11.3%) o realizar actividades motrices, como mover o usar brazos o manos (10.9%).

Además, 13 de cada 100 niñas, niños y adolescentes con discapacidad no cuentan con afiliación a una institución de servicios de salud.

Esta situación nos muestra que, como sociedad, tenemos importantes retos que enfrentar para garantizar la dignidad y el respeto a los derechos de las niñas, niños y adolescentes, especialmente, quienes sufren una discapacidad.

Por encima de diferencias de pensamiento, cultura o educación, tenemos que visibilizarlos, al igual que sus desafíos, para integrar iniciativas y plantear proyectos que mejoren su calidad de vida y las de sus familias.

Reconocemos la lucha que todos los días hacen los hogares que tienen algún integrante con discapacidad, y les manifestamos nuestra solidaridad y apoyo.

Entendemos que se requieren políticas públicas transversales, en las que participen todas las dependencias involucradas con programas específicos que respondan a sus necesidades en materia de salud, educación, trasporte, infraestructura y servicios, entre otros.

Por eso, necesitamos trabajar mucho más fuerte y con más compromiso para lograr entornos de inclusión y oportunidad para su desarrollo. Y esto significa ir más allá de eliminar las barreras físicas: tenemos que abatir las barreras culturales que limitan su bienestar.

Estimados amigos: Nuestro compromiso con la sociedad es amplio, y por eso estamos recogiendo la voz de todos los sectores que demandan atención.

En lugar de dividir y excluir, queremos aprovechar la riqueza de la diversidad para generar oportunidades de crecimiento y beneficio para todos.

La discapacidad es un tema de todos, de mujeres y hombres, de jóvenes y adultos, que formamos parte de la sociedad, por eso es fundamental enfrentar la discriminación y la exclusión, las ideas de rechazo, hacia quienes merecen todo nuestro respeto y respaldo.

Recientemente, el Senado de la República, exhortamos a los gobiernos de las 32 entidades federativas a que salvaguarden los derechos humanos de las personas con discapacidad, y que impulsen campañas de sensibilización sobre el respeto a los derechos humanos de este sector, a fin de hacer conciencia sobre su problemática.

Es lamentable, pero las políticas relativas a la atención de personas con discapacidad son insuficientes, y carecen de una perspectiva de inclusión.

Es indispensable visibilizar el significado de la discapacidad y generar un cambio en los distintos ámbitos para lograr esa inclusión en igualdad de condiciones que asegure la participación efectiva y equitativa de las personas con discapacidad en nuestra sociedad.

Muchas gracias por su atención. Hasta la próxima entrega.

Estimados tlaxcaltecas, los saluda su amigo Joel Molina Ramírez La situación de las niñas, niños y adolescentes con discapacidad es un tema que debe ocuparnos a todos.

Representa un grupo de la población mayormente vulnerable, y por ello requiere especial atención.

Los resultados de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018 indican que, en estos menores, actividades como aprender, recordar o concentrarse (40.1%), ver (32.6%) y hablar o comunicarse (30.2%) son las de mayor prevalencia de discapacidad, aunque también se encuentran las relacionadas con escuchar (11.3%) o realizar actividades motrices, como mover o usar brazos o manos (10.9%).

Además, 13 de cada 100 niñas, niños y adolescentes con discapacidad no cuentan con afiliación a una institución de servicios de salud.

Esta situación nos muestra que, como sociedad, tenemos importantes retos que enfrentar para garantizar la dignidad y el respeto a los derechos de las niñas, niños y adolescentes, especialmente, quienes sufren una discapacidad.

Por encima de diferencias de pensamiento, cultura o educación, tenemos que visibilizarlos, al igual que sus desafíos, para integrar iniciativas y plantear proyectos que mejoren su calidad de vida y las de sus familias.

Reconocemos la lucha que todos los días hacen los hogares que tienen algún integrante con discapacidad, y les manifestamos nuestra solidaridad y apoyo.

Entendemos que se requieren políticas públicas transversales, en las que participen todas las dependencias involucradas con programas específicos que respondan a sus necesidades en materia de salud, educación, trasporte, infraestructura y servicios, entre otros.

Por eso, necesitamos trabajar mucho más fuerte y con más compromiso para lograr entornos de inclusión y oportunidad para su desarrollo. Y esto significa ir más allá de eliminar las barreras físicas: tenemos que abatir las barreras culturales que limitan su bienestar.

Estimados amigos: Nuestro compromiso con la sociedad es amplio, y por eso estamos recogiendo la voz de todos los sectores que demandan atención.

En lugar de dividir y excluir, queremos aprovechar la riqueza de la diversidad para generar oportunidades de crecimiento y beneficio para todos.

La discapacidad es un tema de todos, de mujeres y hombres, de jóvenes y adultos, que formamos parte de la sociedad, por eso es fundamental enfrentar la discriminación y la exclusión, las ideas de rechazo, hacia quienes merecen todo nuestro respeto y respaldo.

Recientemente, el Senado de la República, exhortamos a los gobiernos de las 32 entidades federativas a que salvaguarden los derechos humanos de las personas con discapacidad, y que impulsen campañas de sensibilización sobre el respeto a los derechos humanos de este sector, a fin de hacer conciencia sobre su problemática.

Es lamentable, pero las políticas relativas a la atención de personas con discapacidad son insuficientes, y carecen de una perspectiva de inclusión.

Es indispensable visibilizar el significado de la discapacidad y generar un cambio en los distintos ámbitos para lograr esa inclusión en igualdad de condiciones que asegure la participación efectiva y equitativa de las personas con discapacidad en nuestra sociedad.

Muchas gracias por su atención. Hasta la próxima entrega.