/ miércoles 10 de noviembre de 2021

Visión Empresarial | La inseguridad no debe tolerarse

Un derecho inalienable de los ciudadanos es exigir a sus autoridades el cumplimiento de su mandato constitucional, el de brindar seguridad para todos. A cualquier nivel, sea municipal, estatal o federal la incidencia delictiva no debe tolerarse.

Sin duda, existe preocupación por parte del sector empresarial de la inseguridad pública que prevalece, día con día, y en nuestro estado no debe desbordarse delito alguno por mínimo que éste sea, pues al final lacera a nuestra sociedad. Por ello, el llamado a las autoridades para que se evalúe desde distintas perspectivas y dimensiones, la incidencia delictiva y proponer soluciones en la materia, insistimos que la estrategia gubernamental de seguridad sea siempre revisada.

En la Coparmex Tlaxcala consideramos que es importante hablar del tema de la inseguridad, escuchar las voces de las víctimas y de sus familias. Así como todos estamos obligados, aún más las autoridades, para que este mal se combata en lugar de que se tolere, también debemos proponer soluciones y abonar para que esta situación cambie. Los ciudadanos en Tlaxcala y en todo México queremos un territorio en paz, donde podamos trasladarnos sin temor alguno.

En este sentido, nos resulta importante que la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, encabece las mesas de trabajo para la Construcción de Paz y Seguridad, pues denota no sólo su compromiso con la ciudadanía de que la seguridad es un tema fundamental en su agenda de trabajo, sino que también hay un mensaje claro para los presidentes municipales para comprometerse a reducir los índices de inseguridad desde sus comunas.

En el análisis de la incidencia delictiva, consideramos que debe abordarse en tres dimensiones: su evolución regional, no solo estatal; su evolución temporal a lo largo de los años y la evolución de políticas públicas para el combate de los delitos.

Asimismo, es menester saber ¿dónde estamos en materia de seguridad?, contar con datos duros y tener en cuenta información obtenida de la percepción ciudadana; integrar un comparativo de la evolución que han tenido los últimos tres sexenios los delitos de alto impacto social y empresarial como son: homicidio doloso, feminicidio, secuestro, extorsión, robo a negocio y robo a transportistas.

En esta nueva historia para Tlaxcala que encabeza la titular del Ejecutivo, consideramos que es clave fortalecer las acciones que contribuyan a la paz y tranquilidad de las familias tlaxcaltecas. La violencia se debe combatir con inteligencia, con instituciones sólidas y confiables, con la aplicación de las leyes, pero también con sensibilidad social para que cada ciudadano pueda sentirse seguro en cada rincón de nuestro estado sin temor a ser victimizado.

Confiamos en que la nueva historia para Tlaxcala traiga consigo, un alto y real compromiso de las autoridades de seguridad ciudadana y de procuración de justicia, sumando al Poder Judicial con el propósito de prevenir los delitos, procurar e impartir justicia para que los delitos no queden en el mar de la impunidad; confiamos que se desarraigará de raíz los males y malas prácticas al interior de las corporaciones. Uno de los retos para el gobierno local, será disminuir la cifra negra, la cual indica que de los delitos cometidos, el 94.3 por ciento no se denuncia.

Sin duda, es lamentable y condenamos las extorsiones que últimamente, han sufrido los servidores públicos en el estado, a lo cual es importante que se hagan las denuncias correspondientes para que se investigue y se lleve a los culpables ante la justicia. En este aspecto, no está de más decir las afectaciones que también se registran de la inseguridad al sector privado a nivel nacional, pues durante el 2020 este rubro costó siete mil 155 pesos a cada mexicano. Un total de 277.6 mil millones de pesos, cifra que equivale al 1.85 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB). Además, en el país la extorsión contra los empresarios creció un 58 por ciento de 2017 a 2019, donde mil 821 de cada 10 mil empresas fueron extorsionadas. El pago de extorsiones costó a las víctimas seis mil 942 millones de pesos, según cifras de México Evalúa.

La seguridad pública merece total atención, requiere revisar la estrategia estatal de seguridad para detener y disminuir cualquier acto delictivo, lograr una coordinación institucional y el compromiso de cada presidente municipal. El objetivo es claro, lograr que Tlaxcala se mantenga como un estado en paz.

  • * Presidente de la COPARMEX Tlaxcala.

Un derecho inalienable de los ciudadanos es exigir a sus autoridades el cumplimiento de su mandato constitucional, el de brindar seguridad para todos. A cualquier nivel, sea municipal, estatal o federal la incidencia delictiva no debe tolerarse.

Sin duda, existe preocupación por parte del sector empresarial de la inseguridad pública que prevalece, día con día, y en nuestro estado no debe desbordarse delito alguno por mínimo que éste sea, pues al final lacera a nuestra sociedad. Por ello, el llamado a las autoridades para que se evalúe desde distintas perspectivas y dimensiones, la incidencia delictiva y proponer soluciones en la materia, insistimos que la estrategia gubernamental de seguridad sea siempre revisada.

En la Coparmex Tlaxcala consideramos que es importante hablar del tema de la inseguridad, escuchar las voces de las víctimas y de sus familias. Así como todos estamos obligados, aún más las autoridades, para que este mal se combata en lugar de que se tolere, también debemos proponer soluciones y abonar para que esta situación cambie. Los ciudadanos en Tlaxcala y en todo México queremos un territorio en paz, donde podamos trasladarnos sin temor alguno.

En este sentido, nos resulta importante que la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, encabece las mesas de trabajo para la Construcción de Paz y Seguridad, pues denota no sólo su compromiso con la ciudadanía de que la seguridad es un tema fundamental en su agenda de trabajo, sino que también hay un mensaje claro para los presidentes municipales para comprometerse a reducir los índices de inseguridad desde sus comunas.

En el análisis de la incidencia delictiva, consideramos que debe abordarse en tres dimensiones: su evolución regional, no solo estatal; su evolución temporal a lo largo de los años y la evolución de políticas públicas para el combate de los delitos.

Asimismo, es menester saber ¿dónde estamos en materia de seguridad?, contar con datos duros y tener en cuenta información obtenida de la percepción ciudadana; integrar un comparativo de la evolución que han tenido los últimos tres sexenios los delitos de alto impacto social y empresarial como son: homicidio doloso, feminicidio, secuestro, extorsión, robo a negocio y robo a transportistas.

En esta nueva historia para Tlaxcala que encabeza la titular del Ejecutivo, consideramos que es clave fortalecer las acciones que contribuyan a la paz y tranquilidad de las familias tlaxcaltecas. La violencia se debe combatir con inteligencia, con instituciones sólidas y confiables, con la aplicación de las leyes, pero también con sensibilidad social para que cada ciudadano pueda sentirse seguro en cada rincón de nuestro estado sin temor a ser victimizado.

Confiamos en que la nueva historia para Tlaxcala traiga consigo, un alto y real compromiso de las autoridades de seguridad ciudadana y de procuración de justicia, sumando al Poder Judicial con el propósito de prevenir los delitos, procurar e impartir justicia para que los delitos no queden en el mar de la impunidad; confiamos que se desarraigará de raíz los males y malas prácticas al interior de las corporaciones. Uno de los retos para el gobierno local, será disminuir la cifra negra, la cual indica que de los delitos cometidos, el 94.3 por ciento no se denuncia.

Sin duda, es lamentable y condenamos las extorsiones que últimamente, han sufrido los servidores públicos en el estado, a lo cual es importante que se hagan las denuncias correspondientes para que se investigue y se lleve a los culpables ante la justicia. En este aspecto, no está de más decir las afectaciones que también se registran de la inseguridad al sector privado a nivel nacional, pues durante el 2020 este rubro costó siete mil 155 pesos a cada mexicano. Un total de 277.6 mil millones de pesos, cifra que equivale al 1.85 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB). Además, en el país la extorsión contra los empresarios creció un 58 por ciento de 2017 a 2019, donde mil 821 de cada 10 mil empresas fueron extorsionadas. El pago de extorsiones costó a las víctimas seis mil 942 millones de pesos, según cifras de México Evalúa.

La seguridad pública merece total atención, requiere revisar la estrategia estatal de seguridad para detener y disminuir cualquier acto delictivo, lograr una coordinación institucional y el compromiso de cada presidente municipal. El objetivo es claro, lograr que Tlaxcala se mantenga como un estado en paz.

  • * Presidente de la COPARMEX Tlaxcala.