No solo medios nacionales, sino de países de América, Europa y Asia, se han interesado en difundir que, por primera vez, se logró la reproducción de un león blanco en el Zoológico del Altiplano.
Y es que este acontecimiento resulta relevante, no solo por tratarse de una especie en peligro de extinción, sino porque las probabilidades de supervivencia del ejemplar eran mínimas, de modo que ofrecerle esperanzas de vida representó un importante logro de los cuidadores de este zoológico, y el éxito de su Programa de Conservación y Reproducción de Especies.
Ayer se hizo oficial la presentación al público del famoso leoncito, tras la premiación del concurso infantil organizado por el gobierno estatal para ponerle nombre.
El pequeño felino se llamará “Xonotli”, que significa “maíz blanco”, lo que es acorde al hecho de haber nacido en la tierra del “pan de maíz”, y a que sus padres, Metztli y Tonatiuh, también tienen nombre náhuatl (por cierto, tomado de las antiguas deidades de la Luna y el Sol).
Evidentemente, el nacimiento del león blanco le brinda al Zoológico del Altiplano la oportunidad de consolidarse como un atractivo turístico regional, pues tras lanzarse la convocatoria del certamen para ponerle nombre, ha crecido el interés del público por conocerlo de cerca.
Además, la administración estatal ha hecho un buen trabajo para garantizar su buen estado de salud, y seguramente seguirán los cuidados especiales para su adecuado desarrollo y crecimiento, a fin de que llegue a una edad adulta y pueda ser admirado por muchos más visitantes.
Sin duda, “Xonotli” representa un símbolo de lo bueno que tiene Tlaxcala y de lo que como estado podemos compartir.
Es un motivo de orgullo de nuestro presente, un motivo para hablar bien de nuestro estado.
Pertenecemos a una entidad con condiciones de progreso y futuro promisorio: hay avances en competitividad, transparencia, combate a la pobreza, inversión y generación de empleo, que deben movernos como pueblo a ir por más.
Esto no significa que neguemos nuestros problemas, pero necesitamos tener un panorama balanceado de la verdad de nuestras circunstancias, que son favorables en términos de expectativa de desarrollo.
Hay pluralidad y diversidad de ideas que enriquecen y ayudan, pero vale la pena recobrar los valores que consideramos positivos y nos ofrecen orgullo y pertenencia para marchar más cohesionados, realmente unidos.
Y un ejemplo muy claro de ello es el nombre elegido para el cachorro de león blanco, que considera las raíces del significado de nuestro querido estado: “Tlaxcala”.
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El nacimiento del león blanco le brinda al Zoológico del Altiplano la oportunidad de consolidarse como un atractivo turístico regional, pues tras lanzarse la convocatoria del certamen para ponerle nombre, ha crecido el interés del público por conocerlo de cerca.
