Después de dos años que no se disfrutaba de la vida social debido a las restricciones por la pandemia del nuevo Coronavirus, las tardes se disfrutan en los portales con la bebida favorita y amigos.
Ya sea para gozar de una taza de té, un exquisito bocadillo o una bebida con cafeína dulce o amarga, los asistentes manifestaron su tranquilidad ante nuestra lente.
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Antes de la pandemia solía venir frecuentemente a este lugar para tomar mi café amargo. Claro que hay que saber cómo tomarlo y cómo degustarlo de la manera correcta, hoy vuelvo a retomar mi vida social, comentó Alberto Padilla de Tizatlán.
Otros disfrutaban su tarde con los tradicionales capuchinos acompañados con una rebanada de pastel o pay, mientras que otras personas preferían los cafés fríos.
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María celeste Calva dijo extrañaba estos momentos en que puedes venir a los Portales a disfrutar de un día tranquilo, acompañados de amigos, familia o simplemente solos, disfrutar de los cafés aquí, es una delicia.
Mientras que, para Martha, las tardes de café en los portales es una maravilla y retomar su vida social es lo mejor, además, dijo que extrañaba las saliditas con sus amigas.
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Aunque es diferente la convivencia y la vida social, porque ahora tenemos que cuidarnos más, hay que ser responsables en esto, sigamos acatando las indicaciones de las autoridades para no regresar al encierro, estamos empezando a rehacer nuestra vida social, hay que tener cuidado en todo y por mucho que esté pasando la pandemia no dejemos de usar el cubrebocas
Visitantes de otras ciudades también disfrutaron de un día especial en Tlaxcala, no sólo en Los Portales, si no en algunas plazas que se ubican en el corazón de la ciudad de Tlaxcala.
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Andrés Morales es de Querétaro y decidió salir con su familia para pasar unos días en la entidad y celebrar la primavera. Expresó que después de un buen tiempo de no poder viajar con sus seres queridos, está vez no lo dudaron y decidieron darse un tiempo de alegría y que mejor que en Tlaxcala.
Comentó que Tlaxcala es bella y nos gusta venir aquí, nos gustan porque es colonial y que su gastronomía nos encanta, el mole y pipián es lo que más de gustamos, además de los muéganos. Dijo Andrés.
Visitantes de otros estados también disfrutan las apacibles tardes en el primer cuadro de la ciudad.
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