Los extraños sucesos ocurridos en la infancia de Salvador Dalí le llevaron a desarrollar esa peculiar y estrafalaria personalidad reflejada en su genialidad artística, que lo llevó a convertirse en uno de los máximos exponentes del surrealismo.
La vida del español estuvo marcada por la tragedia, incluso antes de su nacimiento en 1904; pues un año antes, su hermano Salvador Galo Anselmo falleció de una infección estomacal, por lo que los padres del artista le implantaron la idea de que él era su reencarnación.
Este hecho trastocaría profundamente la psique de Dalí, pues a lo largo de su vida esta idea le representaría una obsesión, incluso sus biógrafos han mencionado que su excéntrica personalidad se debe a que el artista siempre luchó por demostrar que era una persona independiente a su hermano muerto.
“Nos parecíamos como dos gotas de agua, pero dábamos reflejos diferentes. Mi hermano probablemente era una visión de mí mismo, pero según una concepción demasiado absoluta”, llegó a afirmar el artista, de acuerdo con sus biógrafos.
A sus 17 años falleció su madre, Felipa Domènech i Ferrés, golpe del cual el artista nunca pudo recuperarse, y que también le sirvió de inspiración en sus obras.
“Fue el golpe más fuerte que he recibido en mi vida. La adoraba. No podía resignarme a la pérdida del ser con quien contaba para hacer invisibles las inevitables manchas de mi alma”, afirmó el pintor durante una entrevista.
Marcado por los infortunios, en 1963 realizó una de sus obras más oscuras, llamada “Retrato de mi hermano muerto” que, de acuerdo con especialistas de arte, la pieza refleja la forma en que su consanguíneo fue una especie de espectro que lo acompañó durante toda su vida.
“El buitre, según los egipcios y Freud, representa el retrato de mi madre. Las cerezas representan las moléculas, las cerezas oscuras crean el rostro de mi hermano muerto, las cerezas iluminadas por el sol crean la imagen de Salvador viviendo, repitiendo así el gran mito de Dioscures Castor y Pollux “, esto fue la explicación que escribió Salvador Dalí sobre esta pieza.
De acuerdo con la descripción que hace el Salvador Dalí Museum, sobre esta obra, se cree que la cara del hermano fue obtenida por el artista de una fotografía de periódico.
Diversos especialistas en arte coinciden en que la pieza es una alegoría a la muerte del hermano, que ayudaría a Dalí a deshacerse de su fantasma.
Yo nací doble, con un hermano de más, que tuve que matar para ocupar mi propio lugar, para obtener mi propio derecho a la muerte
Salvador Dalí / Pintor
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