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Las ventas no alcanzan para solventar los gastos propios del negocio y además vivir holgadamente. Sin embargo, para Marcela Gutiérrez, dueña de la librería El Monasterio; Alejandro Ipatzi, de El Toronjil; y Rafael García, propietario de la Librería Donceles, sus negocios representan amor al arte y una oportunidad por contribuir a la formación de nuevos lectores.
Así coincidieron los libreros entrevistados por El Sol de Tlaxcala, a propósito del Día Nacional del Libro, que se festeja cada 12 de noviembre en nuestro país.
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LECTORES ASIDUOS MANTIENEN VIVAS LAS LIBRERÍAS
“La quincena es el momento en el que se incrementan las ventas porque la gente que gusta de leer, y que sabe que aquí va a encontrar los libros que prefiere, es cuando aprovecha para comprar. Ese es el ritmo económico en esta librería”, afirmó Marcela Gutiérrez; y de forma similar ocurre en la Librería Donceles, pues su propietario, Rafael García, señaló que sus clientes asiduos se llevan de uno hasta tres ejemplares por quincena.
De forma parecida ocurre en la librería Educal, que se encuentra en los portales de la ciudad de Tlaxcala, pues su encargada Mayeli Gómez detalló a El Sol de Tlaxcala que este negocio -que cuenta con alrededor de 20 años de existencia- tiene también un grupo de clientes frecuentes.
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“La pandemia afectó las ventas, pero tenemos ya clientes asiduos que vienen a esta librería porque encuentran títulos de literatura que saben que aquí tenemos”, explicó Mayeli Gómez.
JÓVENES, LOS QUE MÁS LEEN
Todas las librerías consultadas para la realización de este trabajo -como lo es El Monasterio, El Toronjil, Educal y Librería Donceles- coincidieron en que los jóvenes es el público que más compra libros, seguido por los padres y madres de familia que adquieren ejemplares para sus hijos.
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“Siempre las nuevas generaciones son las que más leen, creo que esto se debe a que por muy buen lector que seas llega un momento en el que estás satisfecho, y los jóvenes siempre están en búsqueda y eso hace que se ‘coman’ los libros”, opinó Marcela Gutiérrez.
Mientras que Rafael García explica este fenómeno a la falta de una formación en materia de lectura entre las generaciones más grandes.
“Con el fenómeno de Harry Potter, que surgió hace 20 años, así como de otras sagas, muchos niños se iniciaron con la lectura y hoy continúan leyendo. Además, hoy podemos encontrar en Tlaxcala varias librerías, al menos unas ocho o 10, pero hasta hace unos años eran muy pocas”.
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Caso parecido es el de la librería El Toronjil, cuyos títulos se enfocan a la literatura infantil, así como a libros de autores tlaxcaltecas. Alejandro Ipatzi, propietario de esta librería, nos mencionó que a pesar de que los padres y madres de familia no sean lectores regulares, sí consideran importante inculcar este hábito en sus hijos.
“Nosotros no somos vendedores que solo ofrecen una mercancía, somos maestros que sabemos la importancia que tiene un libro en la formación de los niños; esa es nuestra labor, la de mostrar las bondades de cada título”, aseguró Alejando Ipatzi.
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De acuerdo con los resultados del Módulo sobre Lectura (MOLEC) 2022, dados a conocer en febrero de este año por Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los jóvenes de entre 18 y 24 años son el grupo poblacional que más lee en nuestro país.
LIBROS DE MODA, LO MÁS VENDIDO
Las librerías Educal y Donceles coincidieron en que los títulos que más se consumen son aquellos que se encuentran de moda entre la juventud; incluso, Rafael García de la Librería Donceles compartió que le fue necesario cambiar el perfil de su establecimiento para adaptarse a lo más solicitado por la mayoría de sus clientes.
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“Antes los libros clásicos o de autores como Borges, Vargas Llosa o García Márquez se encontraban en los estantes del frente pero, desafortunadamente lo que más buscan los jóvenes son los libros de moda que se vuelven populares en los medios o en las redes sociales, y la verdad es que la mayoría de las veces son materiales de muy poca calidad literaria”, consideró García.
PÚBLICO SIGUE PREFIRIENDO LIBROS IMPRESOS
El estudio MOLEC del Inegi refleja que más del 70 por ciento de los lectores de libros y revistas sigue prefiriendo el papel, dato en el que coinciden los dueños de las librerías tlaxcaltecas consultadas por este Diario.
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“A pesar de ser público joven, muchos coinciden en que resulta mucho más cómoda la lectura en papel porque en dispositivos digitales se cansa la vista; además de que mis clientes son consumidores de libros antiguos que no se encuentran en un formato digital”, detalló Marcela Gutiérrez.
PERSONALIDAD DEL LIBRERO SE TRANSMITE A SU LIBRERÍA
Alejandro Ipatzi, Marcela Gutiérrez y Rafael García tienen una similitud además de ser dueños de librerías, pues son escritores y asiduos lectores; por tanto, sus gustos personales se ven reflejados en sus respectivos negocios.
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Ipatzi, quien es también director de la casa editorial Ediciones el perro, se ha dado a la tarea de recopilar títulos de autores tlaxcaltecas -como es el caso de Tzuyuki Flores, Deyanira Mendieta, Salvador Armas, Gabriela Conde, Efrén Minero, Ramón Ayala, entre otros- pues su premisa es que es necesario contar con un lugar en donde se difunda el trabajo de los escritores de nuestro estado, el cual es de altísima calidad, afirmó.
Mientras que los libros infantiles responden a la preocupación de Angelita Flores, quien es también propietaria de El Toronjil y especialista en pedagogía infantil, por contar con material que ayude a la formación de este grupo poblacional.
Marcela Gutiérrez se ha especializado en la venta de libros antiguos en El Monasterio, así como libros y colecciones que ya no se editan; en géneros que van desde la novela, filosofía y hasta recetas de cocina. Gutiérrez se encarga de hacer un trabajo de curaduría, por lo que sus compradores son en su mayoría lectores ya de trayectoria que van en búsqueda de las joyas perdidas.
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“Mi trabajo lo ejemplifico con los vendedores de ropa de paca quienes buscan entre las prendas de uso aquellas que por su buen estado, buena marca y por su diseño son venta segura entre los clientes conocedores. Me ha pasado que llega un cliente, sobre todo hombres mayores, que me dicen ‘felicita al dueño por su buena selección’, lo cual muestra el prejuicio que aún existe en materia de género”.
Asimismo, Rafael García se ha interesado por la historia de Tlaxcala y en su librería se encuentran títulos sobre esta temática, al igual que los materiales que él mismo escribe y edita. “Para tener una librería es necesario amar a los libros porque aunque no sea muy redituable estar aquí en mi pequeño negocio es un alimento para el alma”, sostuvo Rafael García.
70 por ciento de los lectores de libros y revistas sigue prefiriendo el papel, revela estudio MOLEC del Inegi
Desde 1979, por decreto presidencial, se celebra en México el Día Nacional del Libro.
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