Iniciaron las clases y son a distancia. La pandemia por el nuevo Coronavirus obligó a cerrar las escuelas, pero el ciclo escolar no se detiene. Las clases son a través de la televisión, la radio e internet.
Sin embargo, hay países con niveles extremos de pobreza y muchos niños que regresarán a clases no tienen televisor. Es el caso de algunos alumnos del profesor Lino Sonders Rojas Mori, en Perú, quien al enterarse de la situación se dio a la tarea de conseguir televisores para que sus estudiantes puedan aprender durante esta cuarentena.
“En un principio la idea era repartir solamente a mis alumnos que no contaban con este artefacto, es decir a cuatro menores, pero varias personas me hicieron llegar sus donativos y pude identificar algunos hogares en otros pueblos donde también lo necesitaban”, comenta Rojas Mori en entrevista para El Sol de Tlaxcala.
El docente ha entregado estos equipos en el distrito de Colcamar, en la provincia de Luya, algunos en la provincia de Chachapoyas y uno que otro en Bongará, en la región Amazonas.
La idea surgió al notar la necesidad de sus alumnos, quienes no contaban con una TV para realizar sus clases a distancia, inclusive algunos ni siquiera tenían una radio de pilas. Entonces un día el profesor Lino Sonders Rojas se animó a hacer el pedido públicamente por la emisora “Reina de la Selva”, del señor José David Reina Noriega. Esta radio es una de las más reconocidas en toda la región, por lo que muchas personas hicieron eco a su pedido y gracias a ello recibió varios donativos para apoyar a más niños.
Hasta el momento ha entregado más de 35 televisores y otras personas están organizando colectas para sumarse a esta cadena de solidaridad.
Lino Rojas aclara que la cantidad de televisores recibidos supera los que ha entregado, sin embargo, algunos ya no pudieron ser reparados.
La intención es dotar a los estudiantes con un equipo en perfecto estado de funcionamiento, con sus respectivos controles remotos y antenas, dado que en las comunidades rurales no hay servicio de cable.
Esta tarea aún no termina, ya que la necesidad es inmensa, lamenta el profesor, quien ha recibido peticiones de algunos colegas maestros a los cuales no ha podido apoyar, pero asegura que seguirá en esta noble labor para tratar de llegar a la mayor cantidad de hogares posibles, sin descuidar su tarea como docente.
Pero todo el esfuerzo vale la pena, asegura este héroe sin capa, ya que cuando ve que a los niños “les brillan los ojos de felicidad, es la mayor satisfacción que puede sentir una persona en su corazón. La alegría no solamente es de los niños sino también de los padres de familia quienes no saben cómo agradecer este acto, en fin, es lo más lindo que puedo sentir en mi vida”.
Considera que, como docente, no puede quedarse sentado y de brazos cruzados ante esta situación y desde que inició en esta profesión (hace 18 años) procura que las niñas y niños se eduquen en un ambiente de justicia, de igualdad y respeto mutuo.
“El mensaje para mis colegas sería que ha llegado la hora de demostrar que somos verdaderos maestros y segundos padres de nuestros alumnos, que llegó la hora de poner en práctica nuestro ímpetu, nuestra creatividad pues por algo hemos elegido esta carrera tan noble como la de ser maestros de escuela”.
También lamenta que Perú esté pasando por una “profunda crisis de valores en todos los ámbitos, donde la corrupción y otros males literalmente destruyen el derecho de las personas más humildes, en especial de los niños”, por lo que hace un llamado “a las autoridades, les suplicaría de todo corazón que trabajen pensando en los niños y jóvenes que son el presente y el futuro del mundo”.
Finalmente, Lino Rojas puntualizó que por ahora no está aceptando otro tipo de donativos ya que este trabajo requiere de mucha responsabilidad, tiempo y recursos para su movilización. No obstante, en sus tiempos libres seguirá siendo el intermediario entre los donadores de televisiones y los niños de escasos recursos.
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