La Diócesis de Tlaxcala convocó a la feligresía para que estos días sean de reflexión, unión familiar y para fortalecer los valores como una forma de combatir las condiciones de violencia y crisis que se vive de manera generalizada en el país,
El vocero de la Diócesis, Cristóbal Gaspariano Tela, llamó a la reflexión pues qué mejor que en estos días se prioricen los valores familiares, que la paz, y la armonía hagan que la Nación se anteponga ante los actos violentos que se viven día a día.
Señaló que la creencia de la comunidad católica está orientada al reencuentro entree vivos y muertos, al tener la firme creencia de que tienen la autorización de salir “del reino celestial”, para lograr un momento de cercanía.
Hoy en día el concepto de familia que tenemos se está debilitando, es tiempo que al sentirnos cerca de nuestros fieles difuntos y de los santos, que podamos unirnos para que se refleje en la sociedad, subrayó.
Invitó a que los padres de familia no permitan que otras culturas invadan y dejen en el olvido las costumbres mexicanas es necesario cuidar esta tradición que tenemos en nuestra iglesia, que se siga conservando Todos los Santos, que no introduzcan a sus hijos tradiciones que vienen de otros países, como es el Halloween.
VISITA A LOS PANTEONES
Cada región tiene una forma diferente de conmemorar a la muerte, algunos acuden a los panteones para velar y acompañar a quienes ahí descansan, otros colocan altares en sus hogares en espera de que sus fieles difuntos puedan disfrutar de los manjares que les ofrecen, momentos que, de acuerdo con Gaspariano Tela, no se deben perder.
Explicó que el 2 de noviembre celebramos a nuestros fieles difuntos, es decir, recordamos a todos aquellos familiares como abuelos tíos hermanos, hijos y papás que murieron, por lo que consideró que es necesario elevar una oración por todos ellos.
Resaltó que la visita de los panteones, adornar con flores los sepulcros y dedicar un momento a la oración, enriquece las expresiones locales y la unidad en los hogares es muy bello que podamos conservarlos en nuestra memoria.
Esta celebración es una invitación para todos los católicos a que podamos vivir de la mejor manera y así un día también podamos gozar de la patria celestial
Cristóbal Gaspariano / Vocero de la Diócesis
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