Han pasado casi ocho meses desde que los tlaxcaltecas, obligados por la pandemia de Covid-19, cambiaron su manera de trabajar, estudiar y hasta sus costumbres y tradiciones.
Con dificultades y complicaciones, desde el 16 de marzo, cuando el gobernador Marco Mena anunció la suspensión de clases en todos los niveles educativos, el cierre de atractivos turísticos y decretó la cancelación de todo tipo de eventos masivos, como medida precautoria para evitar contagios por ese nuevo coronavirus, los tlaxcaltecas se adaptaron a la nueva realidad dictada por esa enfermedad.
La Diócesis de Tlaxcala también determinó la cancelación de todo tipo de celebraciones religiosas y las comunas debieron asumir una postura acorde con los esos lineamientos, ya que tenían la corresponsabilidad de cuidar de sus ciudadanos.
Y al ser decretado el distanciamiento social, los 60 alcaldes anunciaron la suspensión de fiestas, reuniones y toda aquella actividad que congregara personas, pero en los velorios, cortejos fúnebres y sepelios esas disposiciones fueron poco respetadas, pues las personas querían dar el último adiós a sus seres queridos.
De esa forma, festividades religiosas de gran arraigo en la entidad como la Semana Santa o las fiestas patronales fueron suspendidas o realizadas a puerta cerrada y transmitidas en forma remota, y en un escenario similar podrían estar las fiestas carnestolendas ya que algunas comunas han anunciado la cancelación de sus carnavales para 2021.
EL COMPORTAMIENTO
Fue la capital de Tlaxcala la comuna que registró el primer contagio de ese coronavirus, una mujer que viajó a Nueva York, Estados Unidos de América, y que no requirió hospitalización al encontrarse estable, dicho anuncio, el miércoles 25 de marzo, fue hecho por el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez.
Además, por ser sede de los Podres Públicos, albergar decenas de oficinas de dependencias estatales, instituciones, escuelas, mercados y plazas, Tlaxcala ha sido la comuna con el mayor número de contagios, pues hay en ella una mayor movilidad.
En Santa Cruz Quilehtla ocurrió el primer deceso el 8 de abril (14 días después del primer caso positivo), se trató de un hombre de 52 años de edad que padecía diabetes, según informó el gobierno estatal.
Mazatecochco, Xiloxoxtla y Tepeyanco determinaron como obligatorio el uso de cubrebocas entre sus pobladores y visitantes.
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