Ambientalistas del grupo “Salvemos la vida” denunciaron que al parecer con consentimiento de la Comisión Nacional Forestal, en el ejido Nanacamilpa y en el paraje “Los Colgados”, en Tepuente, que son parte del sendero de avistamiento del Santuario de la Luciérnaga, se lleva a cabo la tala indiscriminada de árboles de ocote y sabino.
Lo anterior luego de que por invitación de vecinos de ese municipio y que conocen el trabajo de este grupo de cuidado ambiental, realizaron un recorrido para constatar lo que pasa en los lugares antes referidos.
Juan Rafael Rodríguez Rasgado, uno de los integrantes, dijo que están cortando árboles sanos de gran valor comercial por el tamaño -de más de 20 metros de altura- pero al tumbarlos no tienen una estrategia que proteja a los árboles pequeños, pues los troncos son bajados rodando y eso destruye flora y la fauna.
“Desconozco el volumen, pero por lo que se ha observado es considerable y esto lleva varios meses. Según están cortando árboles que presentan alguna enfermedad, árboles que los leñadores les quitan la resina y que van adelgazando el tronco hasta que se caen solos”.
Sin embargo, comentó que los vecinos aseguran que están tirando árboles sanos de ocote y sabino, principalmente, y que es probable que sea en todo el bosque, por lo que piden a las autoridades correspondientes tomar cartas en el asunto.
“Lo que me llama la atención es que me comentan que los ‘ingenieros’ en una lógica de lo que es ‘aprovechable’ dicen, tal árbol no sirve y entonces al tirar los maderables no cuidan los de otras especies y terminan cortándolos o dañándolos, por eso nos preocupa pues sabemos que toda especie que pueda estar dentro del bosque es parte de un sistema ecológico y cumple una función dentro de ese ecosistema”, finalizó.
Lo que les preocupa es porque este bosque es el Santuario de las Luciérnagas, y como se lleva técnicamente el corte afecta el ecosistema y particularmente el ciclo de vida de la luciérnaga
Rafael Rodríguez / Ambientalista