El Congreso local desechó hoy la solicitud de revocación de mandato en contra de la presidenta municipal de Tlaxcala y el síndico, Anabell Ávalos Zempoalteca y Héctor Martínez García, respectivamente, promovido por la ciudadanía Esperanza Minor Sánchez, supuestamente por el despojo del predio ‘El Potrero’ de la comunidad de San Gabriel Cuauhtla.
En la sesión ordinaria de este día, los diputados locales argumentaron que el despojo acusado es un hecho ilícito que no puede ser materia del Poder Legislativo, y que incluso así es reconocido por la quejosa que ya presentó una querella ante la Procuraduría General de Justicia del Estado, lo que evidencia que es esa la institución la facultada para integrar la carpeta de investigación.
La comisión dictaminadora determinó hoy que esa intención de revocación de mandato por una supuesta omisión para dar respuesta, se desecha por ser "notoriamente improcedente".
Sin embargo, aclararon que se dejan a salvo los derechos de la quejosa para que proceda en la vía y forma que decida para la resolución del conflicto, al tiempo que exhortó a la alcaldesa y al síndico de Tlaxcala para que den pronta respuesta al escrito de la ciudadana Esperanza Minor Sánchez presentado el pasado 31 de agosto, eso a fin de evitar que incurran en responsabilidad.
El pasado uno de octubre, a través de un oficio, Esperanza Minor Sánchez solicitó al Poder Legislativo local la revocación de mandato en contra de ambos servidores públicos por el supuesto despojo en 1999 del predio ‘El Potrero’ ubicado en Cuautla.
En ese momento, Minor Sánchez argumentó que la actual administración municipal no ha dado respuesta a su petición de que dicho terreno ubicado en la parte trasera del Hospital General del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, le sea devuelto.
Incluso, al asegurar que posee escritura pública certificada ante notario público de la propiedad, relató que en 1999 el entonces presidente municipal y hoy actual director de Servicios Públicos Municipales, Víctor Hugo Cahuantzi González, la despojó del predio donde fue construida la Casa del Abuelo y áreas de esparcimiento, inmuebles desde entonces abandonados por ese litigio legal.