“La situación que se nos presenta debemos tomarla como aprendizaje, pues puso a prueba nuestra habilidad y fortaleza, de ahí que mis compañeros no deben perder el amor a su trabajo y la pasión para mantenerse en contacto con los niños, que es tarea difícil, pero si amamos lo que hacemos podemos hacer grandes cosas”, expresó Silvia Reyes Acoltzi, docente de la telesecundaria Tierra y Libertad, ubicada en la comunidad de Unión Ejidal, municipio de Tlaxco.
Lo anterior, ante el reto que los docentes han encontrado en la educación a distancia, producto del aislamiento preventivo que inició el pasado 17 de marzo para evitar el contagio de Covid-19, pues la desigualdad social y sus propias limitaciones no les han permitido trabajar cómodamente, tal y como lo hacían en la educación presencial.
EL DESAFÍO
En este sentido, reconoció que los retos que encontró fueron el cómo comunicarse con sus alumnos, la forma en que seguirían trabajando, cómo mantener el nivel que habían alcanzado como grupo y continuar con el ritmo de trabajo que tenían hasta antes de comenzar el aislamiento voluntario.
Para ello, relató que primeramente se planteó cómo atender las necesidades de los alumnos, de ahí que lo que pasó por su mente fue acudir hasta la comunidad a dejarles las tareas de manera semanal, pero por indicaciones de las autoridades eso no fue posible pues podría poner en riesgo la salud de los alumnos, sus familias y la suya.
Ante esto, optó por utilizar WhatsApp, pues hasta antes de la contingencia sanitaria ya contaba con un grupo, pero de padres de familia, donde les hacía llegar los avisos fuera de horario de clases.
Sin embargo, dijo que sabía que no todos los padres se quedarían en su casa ni que estarían con los niños todo el tiempo para facilitarles las actividades, por lo que creó uno solo de alumnos, donde todos los días a las 08:00 horas les envía las actividades y tienen hasta las 14:00 horas para entregarlas, para mantener el horario y ritmo de trabajo, ya que si se los ampliaba sabía que muchos no lo trabajarían.
En ese lapso tienen para enviar dudas, preguntar, dar a revisión sus trabajos, actividades y, si están correctas tanto la ortografía o cosas como el margen, fecha y los detalles que pueda encontrar, ya la registro, pero si no, las regreso para que las corrijan y una vez haciendo eso registro los trabajos, apuntó la docente.
Asimismo, señaló que sabía también que no todos los niños se quedaban en casa, pues algunos deben salir a trabajar con sus papás a apoyar en esas actividades, por lo que para esos casos particulares amplió el horario de atención, pues al ver el compromiso de sus alumnos lo menos que podía hacer era ser flexible.
De igual forma, mencionó que desgraciadamente de sus 22 alumnos, solo 12 tienen computadora, pero de esos solo dos poseen internet, por ello el esfuerzo que hacen los padres para ponerle una recarga a los teléfonos es doblemente importante, pues se privan de algunas cosas para invertir en la educación de sus hijos, pues el reto también es para ellos y los niños.
EL APROVECHAMIENTO
Debido a que los estudiantes están acostumbrados al sistema educativo presencial, la nueva modalidad en línea permite que asimilen solo un 70 % de los contenidos, pues no todos aprenden de la misma forma ni al mismo ritmo, aceptó la mentora.
Ante esto, afirmó, debe crear diferentes estrategias para lograr que alcancen los aprendizajes esperados, y aunque hay a quienes “les das la actividad y solos trabajan, hay otros que se les dificulta dividir o les falta comprensión lectora”.
LAS HERRAMIENTAS
Detalló que al inicio de la emergencia sanitaria, las autoridades educativas le sugirieron utilizar Google Classroom, “que es una herramienta maravillosa, útil y práctica que sirve para crear tus clases, diseñar el instrumento de evaluación, iniciar una actividad y sola da los resultados, además de tener un control personalizado de los alumnos, pero el impedimento es que los adolescentes no cuentan ni con internet ni computadora”.
PIDE REVALORAR A LOS MAESTROS
¿Cree que con esta situación los padres deberían revalorar la profesión del docente?
Deberían, lo observo como madre al atender a mi hija y ver lo que implica enseñarle a leer, y aunque a mis manos llegan ya sabiendo leer, escribir y manejando las operaciones básicas, el sentar las bases es una tarea enorme y le agradezco a la maestra por tener esa paciencia.
Además, añadió que un docente debe tener miles de características y cualidades, como es el amor y pasión por su profesión y eso lo moverá a tener diferentes formas de trabajo y que atienda las necesidades de los niños y, de ser necesario, explique las veces necesarias hasta que todos comprendan; debe ser líder e inspirar a sus alumnos a tener deseos de aprender, algo que es una tarea enorme y que muchas veces ya no se valora.
La mayor satisfacción como maestro es encontrar a algún alumno y que nos diga que lo inspiramos a ser algo y que lo que le enseñamos le sirvió para la vida”
En esta cuarentena sanitaria no todos los niños se quedan en casa, pues algunos deben salir a trabajar con sus papás, por lo que para esos casos particulares amplió el horario de atención.
Compañeros no deben perder el amor a su trabajo y la pasión para mantenerse en contacto con los niños, que es tarea difícil, pero si amamos lo que hacemos podemos hacer grandes cosas”
La mayor satisfacción como maestro es encontrar a algún alumno y que nos diga que lo inspiramos a ser algo y que lo que le enseñamos le sirvió para la vida
Silvia Reyes Acoltzi / Docente de telesecundaria
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