Este día, el pleno del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE) entregó la primera Presea al Mérito Judicial 2018 al exgobernador Samuel Quiroz de la Vega, como una manera de reconocer su trayectoria académica, en la administración pública.
Al hacer entrega de la distinción como parte de la conmemoración del Día del Abogado, el presidente del Poder Judicial, Héctor Maldonado Bonilla, destacó que el exmandatario estatal ha desempeñado los cargos de presidente Tribunal Superior de Justicia en Tlaxcala en dos periodos y que en 1985 fue electo diputado federal por el Distrito 02.
Destacó que en abril de 1992, cuando la entonces gobernadora de Tlaxcala, Beatriz Paredes Rangel fue designada Subsecretaria de Gobernación por el presidente de México Carlos Salinas de Gortari, el Congreso de Tlaxcala lo designó como gobernador y que su cargo culminó el 15 de enero de 1993.
Ante el pleno del Judicial destacó a Quiróz de la Vega como una persona que sabe poner el derecho al servicio de los demás y un interesado en defender los derechos de las personas más necesitadas y que ha estado en los tres Poderes públicos.
En las instalaciones de Ciudad Judicial y acompañado de su esposa, familia y amigos, Quiroz de la Vega agradeció la distinción y expresó que como jurista le quedó claro que como servidor público debía trabajar en favor de los ciudadanos.
"Asimile que la creación del derecho y su aplicación se encuentran a cargo de los tres Poderes públicos y mis circunstancias propiciaron que participará yo en cada uno de ellos: como titular del Ejecutivo, como diputado federal y como presidente del Tribunal Superior de Justicia", expresó.
Antes, Maldonado Bonilla pidió a los abogados replicar el trato digno para con los justiciables, al tiempo que refirió que el Poder Judicial del que es titular tiene como reto consolidarse como institución humana.
Por eso, aseveró que el abogado desempeña una misión dentro de la sociedad que exige de una enorme confianza y que por ello debe cumplirse con honor, pues dijo que la principal virtud del abogado es la integridad por que es a través de ella que se genera una reputación.
"Estas exigencias obedecen a la confianza que el abogado debe generar, y que las acciones contrarias al prestigio y a la honorabilidad de la profesión deben derivar en la sanción disciplinaria correspondiente", expresó.