Docentes que recientemente fueron reinstalados después de haber sido retirados del cargo por negarse a presentar la evaluación docente, coincidieron en que deben ser instituciones calificadas y de acuerdo al contexto en que se desenvuelven las que realicen este procedimiento, pues dijeron que jamás se negaron a ello, solo que no estaban de acuerdo con que esto condicionara su permanencia.
Lo anterior después de que el secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán, anunció que la evaluación al magisterio continuará, pero no sería a costa de su permanencia, sino para detectar áreas de oportunidad de los docentes y capacitarlos para que realicen mejor su trabajo en favor de los estudiantes.
En entrevista, profesores cesados de Tlaxcala pidieron que para realizar la evaluación de su trabajo sean instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México o el Instituto Politécnico Nacional, para no caer en los mismos vicios de la administración anterior, donde capacitaban a algunos profesores y los certificaban para aplicar las pruebas sin saber nada y eran estandarizadas, a pesar de que los contextos son muy diferentes.
Por otro lado, exigieron a Florentino Domínguez, titular de la Sepe-Uset, que realice una verdadera planeación para realizar estas evaluaciones voluntarias.
- Las leyes secundarias marcan la realización de una evaluación integral para fortalecer la capacidad del maestro frente a grupo.
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