Para el expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Sergio García Ramírez, la dignidad humana, es la que debe prevalecer por encima de cualquier Constitución local, nacional o internacional, pues eso es lo que todo Estado o ser humano debe defender, y consideró que la creación y emisión de sentencias de organismos internacionales, ha contribuido de forma importante en el respeto de los derechos humanos.
Así lo manifestó, durante la disertación de la conferencia magistral, "Las sentencias de la Corte Interamericana: Origen, Contenido y Cumplimiento de las Sentencias", con la cual se cerró el ciclo de videoconferencias denominado "Derechos Humanos en la Función Judicial", organizado por el Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE) a través del Instituto de Especialización Judicial (IEJTlaxcala).
Ahí, el destacado jurista internacional efectuó una exposición sobre los avances normativos que se han tenido a lo largo de los últimos dos siglos en aras de la defensa de los derechos humanos, lo que se vio fortalecido básicamente con la creación de la Convención Americana de Derechos Humanos y de la Corte Interamericana en 1979, aunque en el caso de México, fue hasta 1981 cuando optó por adherirse, lo que dio paso a significativos avances en el ámbito jurisdiccional.
Tras asegurar que estos tratados internacionales representan el acta de nacimiento de lo que ahora se conoce como los derechos humanos internacionales, insistió que estos instrumentos legales, han sido los que han contribuido de forma significativa a que los países de América, transiten a una mejora sustancial de sus normas, sobre todo, al acatar el contenido tanto de sus opiniones consultivas como de las sentencias emitidas.
Sergio García Ramírez precisó que las sentencias de la CIDH, sin duda han contribuido a que países como México, cuenten hoy en día con una legislación más favorable en materia de derechos humanos.
Explicó que la CIDH puede dar opiniones consultivas planteadas de solicitudes hechas por los propios Estados, las cuales, incluso hoy en día tienen una fuerza vinculante y decisiva para acatar la interpretación de determinado caso; es decir, que éstas opiniones no se queden en meras recomendaciones, sino que sean acatadas cuando se observe la violación de derechos humanos por agentes del Estado.
Mientras que en el caso de sentencias, las autoridades tienen el compromiso perentorio para ejecutar su contenido, para lo cual, la Corte convoca de forma continua a los estados para revisar su cumplimiento y que éstas no queden en el olvido, sobre todo porque sus resolutivos son muy complejos al incluir varios puntos condenatorios que van desde la publicación de las resoluciones, hasta la modificación legislativa, entre otras.
Ejemplificó con el caso Rosendo Radilla, donde a casi 20 años de los hechos y a 8 de haberse emitido la sentencia por este organismo, no ha sido cerrado ante la CIDH, porque no se ha logrado el cumplimiento de todos los puntos condenatorios como la búsqueda de restos y acciones legales en contra de funcionarios, lo cual demuestra que la dignidad humana, es la que debe prevalecer por encima de cualquier norma nacional o internacional.
Previo a la conferencia, el magistrado presidente del TSJE, Fernando Bernal Salazar, dijo que para el Poder Judicial resulta de gran importancia la constante actualización y profesionalización de quienes lo integran en temas que transversalizan su actuar y que resultan necesarios para garantizar un adecuado acceso a la justicia.
Manifestó que desde 2011 que se llevó a cabo la reforma constitucional en derecho humanos, se han efectuado diversas acciones de capacitación a operadores jurídicos, aunque reconoció que este tipo de acciones deben ser continuas y adecuadas a las exigencias del momento, pues el reto sigue siendo grande y el Poder Judicial no es ajeno a esta realidad.
Por ello, refirió que a través de estas conferencias, quienes forman parte del TSJE han tenido la posibilidad de conocer de manos de expertos en la materia temas fundamentales para la función judicial, por lo que refrendó su compromiso de continuar avanzando en la consolidación de una cultura de los derechos humanos desde la función judicial.
En este evento, también se contó con la participación del director científico del CIJUREP y exrector de la UAT, Serafín Ortiz Ortiz; el rector de la UAT, Luis Armando González Placencia y de la presidenta del Seminario de Cultura Mexicana corresponsalía Tlaxcala, Citlalli H. Xochiotzin Ortega.
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