A ser misericordiosos con el prójimo para contener y revertir la maldad que hay en el mundo, llamó el obispo Julio César Salcedo Aquino a la feligresía católica como parte de su mensaje de Domingo de Ramos.
Después de la bendición de “Las Palmas” en la Plaza Xicohténcatl, el máximo jerarca de la grey católica celebró la misa en la Catedral de Tlaxcala, donde destacó el evangelio de San Lucas, dentro del cual destacan tres palabras clave para su enseñanza que son el perdón, la misericordia y cumplir la voluntad de Dios.
San Juan Pablo Segundo nos decía que el único que puede detener el mal en nuestro mundo es la misericordia y ahora con todas las situaciones difíciles, adversas que estamos viviendo día a día, de dolor, de sufrimiento, de muerte, corrupción y tantos aspectos que constantemente estamos experimentando, aquí encontramos una luz para responder a todas esas situaciones y es la misericordia, insistió.
Ante cientos de fieles, puntualizó que la palabra de Dios no solamente es recordar lo que dijo hace miles de años, sino que debe ser “una palabra viva” que dé respuesta a los tiempos complexos que se están viviendo.
Todos estamos llamados a dar una respuesta ante este mundo que nos ha tocado vivir, por ello, los desafíos que tenemos debemos convertirlos en retos pastorales, en respuestas concretas desde nuestra vida, desde nuestra vocación o desde nuestra misión con la misericordia, precisó.
De igual forma invitó a aceptar los errores y a reconocer parte de lo que la gente ha ido formado para propiciar la maldad que hay en el mundo y en la sociedad misma.
Tenemos que ser nosotros agentes de cambio, agentes de misericordia y sobre todo en estos días Santos, debemos ofrecer contemplación y en silencio, en adoración reflexionar sobre nuestros actos, exhortó a la feligresía.
DEBEMOS PREVENIR LA VIOLENCIA EN JÓVENES
En entrevista, Salcedo Aquino aseguró que la violencia que vive el país es producto de la descomposición social que se propicia desde los hogares y que recae en los jóvenes, por lo que aseguró que el compromiso de la iglesia es “prevenir”.
Es más, aceptó que Tlaxcala no escapa de esa violencia, pues debido a los hallazgos de cuerpos con muestras de tortura e incluso decapitados, son por la falta de sensibilidad entre la gente que se encuentra corrompida.
Por todo ello, insistió en que es necesario que todos deben ser corresponsables de sus actos para que el cambio vaya surgiendo desde el primer núcleo social, que es la familia.
- A favor de la vida
El Obispo de Tlaxcala confirmó que la iglesia está a favor de la vida y el trabajo legislativo que tiene que ver con la despenalización del aborto debe ser muy bien analizada.
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