Desde hace cuatro años, pobladores del fraccionamiento La Virgen de Panotla, enfrentan pérdidas materiales, pues el mal olor del agua contaminada y con un tono amarillo dañó accesorios sanitarios, redes de distribución y prendas de vestir.
En este lugar, las familias obreras que no tienen para comprar agua de las pipas, se ven en la necesidad de usar la turbia.
Otras solo la ocupan para el servicio sanitario, pues tiene un olor desagradable y mancha la ropa al contacto.
Vecinos del fraccionamiento recordaron que el problema fue heredado por el exalcalde Saúl Cano Hernández.
Si bien dijeron que él fue quien gestionó el pozo (ubicado hacia el sur del municipio), ante la Comisión Estatal de Agua (CEA), el recurso natural extraído está contaminado.
Comentaron que inicialmente con la instalación de un filtro en el almacenamiento general el agua sería potable y ya no saldría con esa coloración.
PROMESAS DE CAMPAÑA
Inclusive, durante la campaña de proselitismo, Eymard Grande Rodríguez ofreció dar respuesta a este problema, sin embargo, han pasado dos años y el agua sigue siendo abastecida en estas condiciones, situación por la que los usuarios han dejado de pagar.
Especialistas de la CEA indicaron que el agua podría estar contaminada con manganeso o bien, el color amarillo es causado por residuos de tanino.
No obstante, advirtieron que en cualquier caso es necesaria la instalación de una potabilizadora en el depósito que suministra a todas las redes de distribución.
Mientras, las jefas de familia pagan hasta 500 pesos a la quincena por cada pipa de agua limpia para el servicio doméstico.
- 40 por ciento de las viviendas en el fraccionamiento no están habitadas por la pésima calidad del agua que reciben.
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