Gran expectación y angustia causó el rescate de un hombre de 66 años de las cúpulas de la parroquia de San Berardino de Siena en el municipio de Contla de Juan Cuamatzi la tarde-noche de ayer jueves, hecho que fue informado oportunamente por El Sol de Tlaxcala a través de sus redes sociales.
Desde que inició el programa de confinamiento y sana distancia por la pandemia de coronavirus SARS-CoV-2, no se había visto tanta gente reunida en la zona centro del municipio.
Ahí, cientos de personas se aglomeraron en las inmediaciones del recinto religioso, unos en la Avenida Principal, otros en la reja que da al atrio, la mayoría sin respetar la sana distancia, ni cualquier otro tipo de medida preventiva como el uso de cubrebocas.
Lo importante fue presenciar el traslado de Rufino F. de 66 años de edad, que sufrió un fuerte golpe en la cabeza cuando la campana bandeaba.
Debido a que el acceso a las torres de la iglesia es a través de una escalera de caracol, de no más de un metro de ancho, impedía su traslado por esa zona, de este modo se optó por bajarlo a rapel por una de las paredes con equipo de montaña.
“Ave María Purísima”, fue la expresión de una mujer cuando la camilla rígida con el herido fue colocada al filo de la terraza, a un costado de la torre oriente
.Las expresiones se escuchaban por doquier, desde niños a adultos mayores… “dicen que es pirotécnico el herido”, comenzaron a retransmitir las primeras versiones, y efectivamente, el hombre, que según los primeros reportes presentaba traumatismo craneoencefálico leve, es un conocido artesano de la pirotecnia en Contla.
Aunque se desconoce si Rufino F. balanceaba la campana u otra persona, el hecho es que recibió un fuerte golpe en la cabeza que le provocó una fuerte hemorragia, y serán las autoridades ministeriales quienes tendrán que formular su tesis.
PIDEN SUSPENDER EVENTOS PATRONALES
Erick Bautista Cuatecontzi, titular de la dirección de Protección Civil del municipio de Contla, exhortó a la mayordomía y fiscales a cancelar cualquier celebración patronal con motivo de la festividad a San Bernardino de Siena.Informó que anteriormente la autoridad municipal ya había emitido las recomendaciones por la contingencia epidemiológica del Covid-19 que atraviesa el país, pero aun así iniciaron con novenarios y repiques de campana.
Empero, estos actos patronales ocasionaros que un hombre estuviera al borde de la muerte al pagarle una de las campanas en la cabeza y que afortunadamente no cayó al vació.
Incluso, pobladores han mostrado su inconformidad con las celebraciones por temor a que se propague el SARS-CoV-2.
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