Integrantes del cabildo de Santa Cruz Quilehtla se confrontaron verbalmente en la sesión ordinaria celebrada la mañana de ayer.
El alcalde Óscar Pérez Rojas, después de que fue cuestionado si se encontraba ebrio, acusó al regidor Eliseo Rojas de estar ligado a la trata de personas, lo que alteró la reunión.
Mientras el primer regidor Margarito Ibáñez cuestionó la presencia de medios informativos y la ventilación de puntos internos del cuerpo edilicio, el presidente municipal sostuvo que el Cabildo no puede cerrar las puertas a nadie.
En la pugna se quejó de que los regidores fueron al Congreso local a pedir información y aclaró que su cuenta pública fue reprobada porque no se prestó a la negociación con diputados de la anterior legislatura, “no fue por daño patrimonial o desvío de recursos, por lo que estamos en proceso de aclaración”.
Pérez Rojas dijo que la ciudadanía tiene que saber “que no tenemos nada que esconder, no fui al Congreso a negociar la cuenta porque no entro a la corrupción, me voy con lo legal”.
Aseguró que el entrar en un proceso legal la cuenta pública del ejercicio 2017 fue turnada al Tribunal Superior de Justicia para su análisis jurídico.
El alcalde acusó a los regidores de chantajearlo porque no les aprobó un aumento del 55 % de su salario, “no tengo ningún desvío de recursos como dicen, no soy dueño de un Oxxo, tampoco de un hotel ni de diferentes cosas que me han estado poniendo en entredicho”.
Añadió que no “voy a esconder nada ni a solapar a nadie, las deudas de los regidores cada quien tiene que pagar lo que debe, tenemos que transparentar para sacar adelante al municipio”.
Los cinco regidores, en contraparte, reclamaron al presidente municipal que no los toma en cuenta.
Pablo Pichón señaló que Pérez Rojas ha hecho las obras sin tomarlos en cuenta, “entonces para qué estamos, te pedimos que nos tomes en cuenta para saber y dar respuesta a la gente”.
El regidor Eliseo Rojas preguntó al alcalde si su estado era de ebriedad, “veo que estás ebrio, las decisiones las tomas tú solo, siempre estás borracho”.
En la discusión, el primer regidor Margarito Ibáñez dijo que “estamos desorientados y confundidos de lo que pasa en el municipio, no es consecuencia de nosotros, se da esta situación, es grave muy grave porque se dicen cosas incoherentes, somos representantes del municipio y no nos toman en cuenta, por eso nuestra molestia, hemos trabajado poco o mucho podemos demostrar con evidencias y oficios”.
Calificó de vergonzosa la sesión de cabildo, “porque no tenía que darse esta situación, me da pena lo que pasa en nuestro municipio porque se debe platicar”.
Acusó al alcalde de hacer mal las cosas, “te faltó capacidad para entender a un cabildo, es tu responsabilidad para asumir el cargo que estás desempeñando”.
Aclaró que no han chantajeado a nadie, “si hubo petición del 55 % de aumento en el salario fue de forma general, era para todo el administrativo porque no se habían pagado las primas vacacionales; en 2017 no se pagó la prima vacacional de un semestre, la información se maneja diferente para interés propio o personal”.
DENUNCIA
Óscar Pérez Rojas dijo que su cuenta pública fue reprobada porque no quiso ir al Congreso a pagar 700 mil pesos para negociarla.