El obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino se pronunció por promover acciones de reconocimiento a quienes llevan una vida consagrada y que se encargan de atender a las comunidades de las periferias en la entidad a través de la enseñanza, la prestación de servicios en hospitales, la impartición de catequesis, la atención e adultos mayores y huérfanos.
Por lo que este domingo dos de febrero la Diócesis de Tlaxcala se sumará a la “Jornada Mundial de la Vida Consagrada”, para realizar oración por aquellos religiosos que tienen como misión a quienes se encuentran en vulnerabilidad.
Expresó que “mediante estas jornadas hay que dar a conocer lo que es la vida consagrada, de que motiva a las personas a servir a la Iglesia, ese es el punto central de porque se emprenden este tipo de misiones”.
Se denomina vida consagrada a los fieles que se proponen seguir más de cerca a Cristo, procuran conseguir la perfección de la caridad a través del servicio, consejos evangélicos, o la oración, a través de los votos (simples o solemnes) se integran a esta forma de vida.
Quienes prestan estos servicios a la Diócesis emprenden diversas misiones, que contempla la impartición de catequesis, la formación de grupos, la atención a marginados, que sin importar las condiciones en las que se tengan que desenvolver deciden brindar su ayuda.
Este año la celebración se realizará en la Catedral de Tlaxcala, informo el jerarca católico, quien detalló que es una forma de resaltar la labor de las y los religiosos que atienden a los sectores más necesitados.
Salcedo Aquino enfatizó que ante la realidad que se vive hoy en día es necesario imprimir un rostro femenino en la labor parroquial, así como la ternura, la cercanía y la atención, para lograr la empatía con la feligresía mediante una vida sencilla y arduo trabajo.
NO DEJES DE LEER