Debido a la reparación de las vías férreas en la península de Yucatán para el proyecto federal “Tren Maya”, el cruce de migrantes por Tlaxcala ha reducido en un porcentaje importante, aseveró el padre representante del albergue “La sagrada familia”, Elías Dávila Espinoza.
El proyecto de construcción instalará y rehabilitará mil 460 kilómetros de vías férreas en la Península de Yucatán para interconectar a Tabasco, Campeche, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo, por lo que a la fecha los rieles y durmientes se encuentran afectados.
“Los trabajos del proyecto Tren Maya, incluyen la compostura de las vías desde Guatemala hacia el norte; los migrantes nos han comentado que están rotas las vías y eso hace que busquen rutas más peligrosas porque tiene que caminar y a la vez más seguras porque agarran autobús”, detalló.
El presbítero insistió en que, aunque en menor medida, los migrantes buscan llegar a Estados Unidos de Norteamérica por diferentes rutas, “y antes les resultaba más viable el tren, porque moverse por autobús debían enfrentar mucho retenes de migración y hoy las cosas han cambiado, pues ya no están haciendo tantos operativos por temor a contagios”.
Por otro lado, aseveró que otro factor que ha reducido la movilidad de migrantes, es la pandemia por Covid-19, pues en agosto contabilizaron un total de 95 personas centroamericanas que visitaron el albergue ubicado en Apizaco.
“Sí siguen pasando, porque la situación que hay en Centroamérica es difícil, no hay fuente de trabajo, hay mucha violencia y eso hace que la gente emigre, así que ciertamente sigue transitando por diferentes rutas, pues ya no se arriesgan a caerse en el tren, además del frío, calor y los robos”, aseguró.
MOVILIDAD ES SOLO DE VARONES
Dávila Espinoza indicó que en las caravanas transitaban muchas mujeres y niños, ahora pasan en menor escala por el temor de contagios y peligros propios de la migración, “así que en su mayoría los migrantes son varones”.
“Además de la violencia que existe en México, viajar con mujeres y niños es mucho más peligroso, además de que las fronteras de Centroamérica están cerradas hacia el paso migrante, por ello no hemos recibido mujeres y niños”, concluyó.
95 centroamericanos visitaron el albergue “La Sagrada Familia” en agosto
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